La cumbre del Clima: un mal acuerdo es mejor que un buen
pleito (2) Escrito por Pablo Trejo Pérez
Los
países industrializados manejan un discurso favorable al cambio
climático, cuidar el medio ambiente.
Pero cuando los países en vías de desarrollo imponen en sus fronteras leyes
favorables al equilibrio ecológico, hablan entonces de barreras para la
inversión. Así, los acuerdos sobre cómo evitar el calentamiento global y
combatir el cambio climático se
convierten en un verdadero frente de guerra, en el que los
países en vías de desarrollo acaban exigiendo que los países industrializados
asuman las acciones de sus compañías. Lo siguiente se pudo observar en la
cumbre Mundial del Clima, en Lima, capital de Perú.El reto de la cumbre era
enorme: la necesidad de controlar el termostato del planeta para evitar que la
temperatura aumente más de dos grados, el límite señalado por la ciencia para
evitar consecuencias catastróficas. Se trata de lograr el entendimiento entre
los que más contaminan (y más han contaminado) y los que más sufren los efectos
del cambio climático. La lucha contra el cambio climático presenta tres
pilares:
$11. Es una
responsabilidad común pero diferenciada: el pacto enuncia el objetivo de
alcanzar un acuerdo ambicioso en 2015 y reitera el principio de responsabilidad
común pero diferenciada de todas las partes en cuanto al calentamiento, un
principio inscrito en la Convención de la ONU.
$12. El estándar lo
fijará la Ciencia, no la Política. El mensaje de la ciencia ha sido muy claro:
si no se empieza a trabajar desde ya en la reducción de emisiones de efecto
invernadero, el calentamiento global puede crear efectos devastadores a lo
largo de todo el planeta.
$13. Es necesario
un mayor financiamiento, tipo la “tasa verde” (la que paga por árboles
plantados, ríos limpios, etc.): se llama a los países desarrollados a
proporcionar una ayuda financiera reforzada a los países en vía de desarrollo,
en particular a los más vulnerables, para reducir las emisiones y adaptarse al
cambio climático.
Todos los países participantes presentarán ante la ONU, a lo
largo de 2015, sus compromisos “cuantificables” en reducción de gases de efecto
invernadero. Deberán ser presentados antes de marzo de 2015 por "las
partes listas para hacerlo" y antes de la conferencia de París para las
demás. Se trata de algo inédito hasta ahora, ya que la lucha contra el
calentamiento global siempre había recaído sobre los países desarrollados,
responsable del 80% de las emisiones globales.
Las medidas quedan al libre juicio de los países, pero se
debe ir más allá de las acciones ya emprendidas.
Tendrá que contener informaciones sobre el año de
referencia, el periodo de compromiso, un calendario de puesta en acción, el
método de cálculo elegido, un plan de acción por sector.
La importancia de la Conferencia de Lima es que ha permitido
alcanzar un acuerdo para lo que será el Protocolo de París, en 2015, donde se
tiene que aprobar un nuevo acuerdo para luchar contra el calentamiento global
que tiene que incluir a todos. La meta es sustituir al ya ineficaz Protocolo de
Kioto, en vigor desde 2005, que tan solo obliga a reducir emisiones a los
países desarrollados. Todos prevén que ese acuerdo ahora, aunque sigue siendo
impensable, está más cerca. Lo ocurrido en
Lima, como dice el refrán, ha sido un mal acuerdo para evitar un buen
pleito. TOMADO DE PUNTO CRITICO POR SUGERENCIA DE ENVIO DE BOLETIN GAL DE CHILE
No hay comentarios:
Publicar un comentario