Humaitá: Pésimos caminos
Por Clide Noemí Martínez HUMAITÁ, Ñeembucú. El mal estado de los
puentes de
madera que jalonan el camino de acceso a Humaitá vuelve a ser motivo de quejas
por parte de los vecinos de esta histórica población del sur de Ñeembucú.La
pasarela de madera representa un peligro para los que circulan por esta vía. /
Clide Noemí Martínez, A pesar de los reclamos, ninguna autoridad ha tomado la
determinación de invertir recursos públicos para cambiar las precarias
construcciones de madera por estructuras de hormigón armado. Las viejas
pasarelas crujen al paso de los vehículos y constituyen un gran riesgo para los
automovilistas. En varias oportunidades camiones que transportaban productos a
la zona quedaron atascados al romperse las maderas de la parte superior de los
frágiles puentes. Igualmente la falta de mantenimiento hace que los clavos
queden expuestos y perforen las cubiertas de los vehículos que circulan por
esta vía. Los vecinos consideran que por la importancia que tiene Humaitá para
la historia del Paraguay, el Ministerio de Obras públicas y Comunicaciones,
como las instituciones regionales y locales hubieran considerado la posibilidad
de asfaltar su camino de acceso. En los últimos tiempos las autoridades del
ministerio han anunciado la pavimentación de la vía que une Villeta con Alberdi
y Pilar, asimismo la regularización asfáltica del empedrado Pilar-Isla
Umbú-General Díaz, entre otras obras viales. Los humaiteños explican que llevar
el asfalto hasta el distrito donde se encuentra la emblemática Ruina del Templo
San Carlos sería dar un poco de alivio a esta población que ha sufrido los
rigores de la guerra y posteriormente el abandono por parte del Estado
paraguayo, lo que ha condenado a la migración a la mayoría de las familias de
la zona. Actualmente sin posibilidades de progreso por su aislamiento, los
habitantes de la zona sobreviven dedicados a la pesca y el cultivo de productos
agrícolas, que muchas veces se realiza en terrenos que no son de propiedad de
los labriegos, lo que obliga a dejar por lo menos la mitad de la producción a
los dueños de las tierras. El turismo, que debería ser la actividad fundamental
de la economía local no puede despegar, debido a la falta de caminos de todo
tiempo. TOMADO DE ABC DE PARAGUAY
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