En Llanogrande se construyó
una casa que se alimenta del sol
José Ignacio Marulanda, a la izquierda, y Mauricio Betancur
Muñoz junto a la casa dotada con energía solar en sus ladrillos. FOTO Cortesía
Agencia de noticias eafit
José Ignacio Marulanda, a la izquierda, y Mauricio Betancur
Muñoz junto a la casa dotada con energía solar en sus ladrillos.
4.000 vatios es la capacidad generadora de energía que tiene
la casa solar del Oriente.
3.000 vatios es la cantidad estimada de energía que necesita
una casa pequeña.
Una investigación que tuvo una duración de tres años
permitió que dos empresas y dos grupos de investigación de Eafit desarrollaran
un ladrillo que capta la luz solar y la convierte en energía, suficiente para
nutrir una casa.
José Ignacio Marulanda, director del Grupo de
Electromagnetismo Aplicado (Gema); Javier Mauricio Betancur Muñoz, gerente de
Tecnologías Marte; Alejandro Velásquez López, coordinador de la especialización
en Diseño Integrado de Sistemas Técnicos de Eafit; y Mario Betancur Rodríguez,
socio fundador de Dynacad, fueron los responsables de la invención del ladrillo
solar.
El proyecto surgió después de la participación de los
investigadores en una convocatoria realizada por Ruta N, en agosto de 2013, la
cual consistía en el desarrollo de productos elaborados en el laboratorio
Uno de los resultados de esa investigación fue el ladrillo
solar. Meses después salió la convocatoria 700 de Colciencias, la cual
consistía en pruebas de conceptos de productos generados por investigaciones.
Fue entonces cuando los investigadores desarrollaron la casa solar, para
validar y perfeccionar el concepto del ladrillo.
“Al ladrillo le hicimos pruebas de compresión, luego de
sismorresistencia, para estar seguros de que no solo resistía compresión sino
también a movimientos telúricos, y la última etapa fue construir una casa.
Usualmente, uno no compra un ladrillo, uno lo que compra es una casa o un lugar
para habitar, entonces ese es el último medio para validar nuestro producto,
que es un ladrillo solar”, explica Alejandro Velásquez.
Con la alianza de Arquitectos e Ingenieros Asociados,
quienes diseñaron y llevaron el proceso de la interventoría de la obra, se
construyó la casa en Llanogrande (Rionegro), que busca aprovechar la luz solar
irradiada en las paredes; sin embargo, el fin de los investigadores no es solo
implementar los ladrillos en las casas, sino también en apartamentos, nuevos o
usados.
“Pensando en espacios urbanos no hay tanta área horizontal
disponible para paneles solares y esas cosas, que es la tecnología que algunas
personas asocian con la energía solar, pero los paneles solares están
dispuestos horizontalmente y nosotros pensamos en el aprovechamiento de mucha
área vertical que hay en las ciudades”, argumenta José Ignacio Marulanda
Energía renovable
La luz solar es la tercera energía renovable más utilizada
en el mundo. Farid Chejne, profesor de procesos y energía de la Facultad de
Minas de la Universidad Nacional, desde su experiencia, aclara que existen
diversas formas de aprovechar la luz solar, siendo una de ellas la energía
fotovoltaica, que es la misma utilizada en los ladrillos solares del proyecto
Helium.
“Existen unos paneles fotovoltaicos, que reciben la energía
solar en forma de protones y estos chocan con los electrones y producen energía
eléctrica, que puede mover los ventiladores, los televisores y demás
electrodomésticos”, explica Chejne.
Contrario a lo que algunas personas creen, no existe mucha
diferencia entre la función de la energía eléctrica y la energía solar, lo
único es que la fuente primaria es distinta.
En Colombia, por ejemplo, la mayoría de energía proviene de
las fuentes hídricas y otra parte de combustibles fósiles, sin embargo hay
épocas de sequía y pocas lluvias que aumentan el consumo de energías fósiles.
“Se provocan problemas ambientales, la quema de estos
combustibles fósiles genera gases del efecto invernadero, como el CO2, que
puede ser nocivo, mientras que la energía solar se puede considerar una energía
limpia, que todos recibimos. Otra cosa es que los combustibles fósiles no son
renovables, se están acabando, cada vez tenemos menos reservas de petróleo, de
carbón y de gas, mientras que el sol tiene una vida muy larga, casi ilimitada”,
afirma el catedrático de la Nacional .
CARACTERÍSTICAS DE LA CASA
· La casa está ubicado en la sede Llanogrande de la
Universidad Eafit.
· Para construirla se basaron en el modelo de una vivienda
de interés social, mide 50 metros cuadrados y cuenta con 600 ladrillos solares.
· La cantidad de ladrillos se adecúa teniendo en cuenta el
gasto de energía y el tamaño de la casa.
· 750 millones de pesos fue el costo del proyecto con
Colciencias, en el que se retomó la idea del ladrillo y la construcción de la
casa. TOMADO D E EL COLOMBIANO
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