ESPACIO DE LA MEMORIA
Polémica por la placa del monumento en honor al
estudiante Juan José Cabral
La plaza de San Lorenzo y Junín fue refaccionada, aunque la
obra continúa incompleta.
Un vecino de la ciudad de Corrientes levantó en 2017 la
placa caída del monumento en honor a su compañero de militancia, Juan José
Cabral, el estudiante de Medicina asesinado en la revuelta de 1969. La
Municipalidad reparó la herrumbre de la pieza, pero esta jamás volvió a su
sitio.
“Pidió que la restituyeran varias veces, pero no obtuvo
respuestas. La fue a rescatar porque estaba totalmente abandonada”, dijo Camilo
Gómez Montero, sobre el recupero que hizo su padre de la placa
abandonada.
“Él falleció hace dos años”, recordó. Entonces, hubo
publicaciones en la prensa local con la solicitud de reparación por parte de
una generación que recuerda los golpes militares en el país.
La restauración del monumento se realizó en marzo de 2019, y
José Arnaldo Gómez, el amigo de la universidad de Cabral, falleció seis meses
después.
La obra, de dos metros de altura, continúa incompleta,
porque tampoco se conserva una de las siluetas humanas de metal.
“Mi viejo fue un gran difusor y luchó por el reconocimiento
de ese espacio, se hicieron muchas actividades con jóvenes”, detalló Gómez
Montero a El Litoral.
El monumento fue emplazado en 2013, durante la intendencia
de 0Carlos Mauricio Espínola. La tarea formó parte de una remodelación urbana
de la histórica plaza. La obra tiene el propósito de rememorar un hecho de
violencia estatal del 13 de mayo de 1969.
Una masiva asamblea estudiantil de la Universidad Nacional
del Nordeste fue reprimida ese día, con repliegue de manifestantes por las
calles del casco céntrico de Corrientes. La jornada concluyó con el asesinato
del estudiante de Medicina Juan José Cabral, de 22 años, oriundo de Paso de los
Libres, en la esquina de San Lorenzo e Yrigoyen, en la plaza Sargento Cabral.
“Otra vez está herrumbrado el monumento y venido a menos. Se
pueden leer las dos placas pequeñas que dejaron los compañeros de Cabral en el
86 y otra más nueva, de 2012”, agregó Gómez Montero. “Todo lo que sea símbolo
de resistencia popular es olvidado”, lamentó. “Estudiante asesinado durante la
dictadura de Onganía”, era el título de la pieza de vidrio conservada por
Gómez. Además, detallaba las fechas de vida de Cabral y un poema escrito por
los compañeros universitarios durante su cursado de Medicina.
Entre los detalles, también se destacó el nombre del
entonces intendente de la ciudad. Hace más de cuatro años la obra permanece
incompleta, sin la identidad precisa ni la figura humana. Y la herrumbre volvió.
(IB)
Tomado de el litoral de ctes ar
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