Por
considerarlo de interés, noticias desde Colombia. Saludos Marcela
Llegó la hora de las energías renovables no convencionales
en Colombia Este 5 de agosto se lanzó la ley para la integración de las
energías renovables no convencionales al Sistema Energético Nacional.
El firmante de la ley 1715 de 2014 fue el autor, José David
Name, que también es presidente del Senado. Según Name, "Colombia
como país cuyas exportaciones dependen principalmente de sus riquezas
naturales, entre ellas el petróleo, tiene la necesidad de evaluar nuevas
fuentes de energía para enfrentar la crisis energética que los expertos
pronostican a corto y mediano plazo".
Al acto de lanzamiento asistieron del Ministro de Minas y
Energía Amylkar Acosta Medina, la ministra de Ambiente y Desarrollo
Sostenible, Luz Helena Sarmiento, directivos de la Asociación Nacional de
Empresarios, Andi, Asocaña, Fedepalma, Acolgen, Andeg, Creg,
Fedebiocombustibles, entre otros especialistas del sector energético
colombiano.
La ley, además de incentivar el uso de energías renovables
no convencionales y de minimizar los conflictos ambientales causados por la
dependencia actual del país de las fuentes de energía a base carbón y petróleo,
generará también incentivos arancelarios, contables y tributarios que abrirán
la importación de nuevas tecnologías al país y fomentaran la investigación en
este campo.
Name también espera que con esta ley se instaure “una nueva
política, en relación con la forma cómo se genera, transporta, distribuye y
comercializa la energía en nuestro país".
La ley lleva dos años esperando ser sancionada y busca
encontrar un nuevo modo de aportar al desarrollo sostenible del país al salirse
de los sistemas de generación y transmisión nacionales que priorizan las
matrices energéticas basadas en hidroeléctricas o combustibles fósiles con el
objeto de abastecer a los grandes emprendimientos productivos y a los centros
urbanos de pequeña a gran escala.
En Colombia la abundancia del recurso hídrico ha hecho
que la generación eléctrica se centre en esta fuente lo que ha traído
consecuencias adversas para el medio ambiente que se ven reflejadas en las
externalidades de estos proyectos. Para dar un ejemplo de estos casos
Name citó la situación del embalse del Muña, que ha afectado
negativamente a la población de Sibaté y les ha impedido volver a frecuentar
los ríos Aguas Claras y Muña.
Pero estas externalidades no son lo único negativo de las
fuentes de energía convencionales. En medio de una sequía anómala, el
país verá con más fuerza los daños causados por estas fuentes entre los que
pueden contarse: la disminución de los caudales de agua, la afectación de
la calidad del agua por la sedimentación excesiva, la alteración del aire, el
incremento del material particulado debido a los procesos de extracción y
transporte del carbón, los procesos de erosión potenciados por la construcción,
el deterioro del paisaje, el desplazamiento de la fauna y la disminución de la
cobertura vegetal.
A esto se suma el cambio climático que, para países como
Colombia, representa una amenaza real ya que podría, en los próximos 30
años, afectar la manera en que la fauna, flora y habitantes humanos se desarrollan.
Name añadió que según el Informe sobre la situación mundial de las Energías
renovables, estas aportan al consumo energético mundial el 16.7 por ciento de
la totalidad de la capacidad energética.
El mayor desafío a corto y mediano plazo de esta ley es el
impulso y promoción de las Fuentes No Convencionales de Energía con metas
definidas en las políticas del Ministerio de Minas y Energía y en los Planes
energéticos nacionales.
También falta saber cómo garantizar que la inversión y
producción de este tipo de energías sean los correctos. Así, es clave que el
gobierno, en cabeza del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible,
comience a evaluar una política que impulse el uso de energías limpias.
Algo importante de esta nueva ley es que le permite a cualquier
ciudadano que lo desee y que esté en capacidad de hacerlo volverse un
participante activo de la oferta de generación eléctrica a pequeña y mediana
escala. ¿Cómo? Un buen ejemplo es la energía obtenida a través de paneles
solares. Cuando una persona usa este tipo de paneles para obtener energía puede
generar su propia energía. Pero el tema no se queda ahí. Si a esa persona le
sobra alguna cantidad de energía generada por sus paneles tiene la opción de
inyectar este sobrante a la red o a redes no interconectadas. Esto es
posible gracias a una figura llamada generación distribuida que permite
incrementar la oferta energética y la expansión del sistema energético Nacional
sin restricciones sometidas por terceros.
En Colombia, sin embargo, las inversiones que se han hecho
para desarrollar o importar tecnología que ayude a que estas fuentes penetren
de manera significativa el mercado de energía son mínimos por lo que este tipo
de inversión y de modelo de negocio sería uno de los principales retos a los que
se enfrenta esta ley. Como primer piloto de implementación de la ley el gbierno va
a hacer una socialización en San Andrés y Providencia en la que se
proyecta que la isla se sirva de alternativas energéticas de bajo costo
con indiscutibles beneficios para la actividad turística y las áreas
residenciales.
Otro aspecto trascendental de la nueva ley es la
constitución del Fondo de Energías no Convencionales y Gestión Eficiente de la
Energía (Fenoge), cuyo objetivo es financiar iniciativas de fuentes no convencionales
de energía y su gestión eficiente, con recursos tanto públicos como privados y
de carácter internacional.
Hay, sin embargo, algunos recelos frente a este tipo de
energías ya que en países como España terminaron fracasando de manera rotunda.
Esto se debió a varias razones: primero, después de que la obtención de
paneles solares se hizo muy económica el gobierno español comenzó a cobrar un
“peaje” por inyectar energía a la red lo que hizo que muchos generadores a
pequeña y mediana escala dejaran de inyectar la energía que les sobraba y
optaran por usarla ellos mismos. Segundo, el autoconsumo es difícil de
cuantificar por lo que muy pocos gobiernos han logrado saber las cifras reales
de estos generadores “domésticos”.
Pero este no es el único caso. En otros países europeos
donde el autoconsumo energético está más consolidado las políticas son muy
diferentes. En vez de cobrarles los ‘peajes’, lo que han hecho gobiernos
como el de Holanda ha sido bonificarlos para permitir que los consumidores
viertan la energía que recogen a la red para recuperarla cuando la necesiten o
que la vendan a las compañías eléctricas.
Lo cierto es que a partir del 5 de agosto, fecha
de sancionamiento, el Gobierno tiene 9 meses para reglamentar lo consignado en
esta ley. Queda por ver cómo o si se adaptará el sector
energético a esta nueva forma de generar energías más limpias y
democratizadas.
¿Qué son las energías renovables no convencionales?
Se entienden como energías renovables no convencionales
energías que se caracterizan porque en sus procesos de transformación y
aprovechamiento en energía útil no se consumen ni se agotan en escala humana.
Entre estas fuentes pueden contarse la hidráulica, la mini hidráulica, la de
biomasa, la de geotermia, la solar, la eólica y la de los océanos.
Lo que clasifica algunas energías renovables como no
convencionales es el grado de desarrollo de la tecnología para su
aprovechamiento y la penetración que tengan en los mercados energéticos. Un
ejemplo es la solar, que necesita de paneles solares para poder existir.
ENVIADO POR RED FOROBA
No hay comentarios:
Publicar un comentario