El cambio climático y
las emisiones negativas, capítulo Bonn por Laura Rocha Una nueva reunión con la lucha contra el
cambio climático comenzó en Bonn, Alemania. Se trata de una de las previas
decisivas a la hora de hablar de un borrador. Aunque desde la ONU el optimismo
crece, se van conociendo compromisos de disminución de gases de efecto
invernadero y de posibles escenarios un poco más realistas. “El objetivo es
alcanzar un preacuerdo en octubre (…) La COP21 [cumbre de París] permitiría
luego dar los últimos retoques y tratar los puntos pendientes, pero sobre la
base de un texto sólido y claro para todos”, declaró el ministro francés de
Ambiente, Laurent Fabius en la apertura de la sesión de negociaciones. Algunas
cuestiones complejas están en el centro de las negociaciones y muchas de ellas
pasan por el centro propio del modelo de desarrollo vigente: ¿debe limitarse la
extracción de combustibles fósiles o solamente la emisión de gases? ¿Qué rol
deben jugar países emergentes como China, India e Indonesia y qué rol deben
jugar los países industrializados como la Unión
Europea, Estados Unidos y
Rusia? “Llegamos a Bonn con un borrador de 90 páginas que contiene opciones en
temas clave que incluyen lo bueno, lo malo y lo que debería ir a la pileta de
platos sucios. Los negociadores trabajarán en reducir el texto y consolidar
algunas opciones, al tiempo que negociarán algunos temas complicados como el
tratamiento de países con diferents capacidades de un modo justo en el acuerdo
y cómo debe ser legalmente ese acuerdo”, dijo mediante un comunicado Jaco du
Toit, vocero de WWF Internacional. Por el momento los compromisos presentados
son:
Suiza (27/2/15): 50% de reducción al 2030 respecto de las
emisiones de 1990.
UE (6/3/15)- 28 países: 40% de reducción al 2030 respecto de
las emisiones de 1990.
Noruega (27/3/15): 40% de reducción al 2030 respecto de las
emisiones de 1990.
México (30/3/15): 25% de reducción al 2030 respecto de su
escenario de emisiones BAU (Business as Usual)
Estados Unidos (31/3/15): 26-28% de reducción al 2015
respecto de emisiones de 2005.
Gabón (1/4/15): 50% de reducción al 2025 respecto de un
escenario de emisiones BAU.
Rusia (1/4/15): 20-25% de reducción al 2030 respecto de las
emisiones de 1990.
Liechtenstein (23/4/15): 40% de reducción al 2030 respecto
de las emisiones de 1990.
Andorra (30/4/15): 37% de reducción al 2030 respecto de un
escenario de emisiones BAU
Canadá (15/5/15): 30% de reducción al 2030 respecto de las
emisiones de 2005.
Pero según algunos expertos este esfuerzo no alcanzaría para
que el aumento global de la temperatura no llegue a los 2°C. Incluso se empieza
a hablar de la necesidad de llegar a emisiones negativas. Otros especialistas
sugieren que comenzarán a aparecer distintas estrategias y hasta una nueva
industria para conseguir lo que la humanidad no conseguirá hacer para
disminuir. Resultado: un escenario complejo. Tal vez las metas que se acuerden
en diciembre debieran ser provisorias y ser revisadas a medida que los países
vayan instrumentando las políticas. Claro, si es que sucede, porque por el
momento sólo se habla de compromisos pero hay pocas acciones para conseguirlas,
al menos, en el mediano plazo. Tomado de la nación de ar
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