Alerta por brote de rabia bovina en
Collpaciaco
Por Katiuska
Vásquez
Foto : Una
comunaria de Collpaciaco lleva sus vacas al corral, ayer. - Carlos López Gamboa
Ante la
muerte de ocho cabezas de ganado a consecuencia de un brote de rabia bovina en
Collpaciaco (Arani), ubicada a 70 kilómetros de la ciudad de Cochabamba, el
Senasag aplicó un bloqueo epidemiológico en las comunidades de la región del
valle alto.
El Servicio
Nacional de Sanidad Agropecuaria e
Inocuidad Alimentaria (Senasag) de Cochabamba informó que los casos reportados
en Collpaciaco representan un leve brote de rabia bovina y que a la fecha se
han confirmado dos casos en laboratorio, dos están en observación y se han
tomados dos muestras.
Según el
director del Senasag, Efraín Ricaldi, una vez que se conocieron los primeros
casos se comenzó con el bloqueo epidemiológico, la vacunación del ganado y la
captura de los murciélagos hematófagos (vampiros), que son los transmisores del
virus que infecta el sistema nervioso de los animales.
Los
murciélagos serán capturados a través de redes para adherirles un veneno en la
espalda, el mismo que al llegar a sus madrigueras (casas abandonadas, conventos
o los huecos de los árboles) es lamido por los demás animales.
El Senasag
ha comenzado con la captura de los murciélagos, la vacunación del ganado y la
revacunación de los perros, una especie también vulnerable a la mordedura de
los murciélagos y de alto riesgo por su cercanía a los humanos.
El director
del Senasag manifestó que se van a extremar los esfuerzos para interrumpir esta
corriente a pesar de no contar con el financiamiento de la Gobernación, que
desde este año les suspendió el financiamiento para varios programas, entre
ellos la vacunación del ganado contra la rabia bovina.
La
vacunación y la eliminación del murciélago que muerde al ganado y propaga el
virus se realiza con los recursos del Senasag. Asimismo, el trabajo es apoyado
con los exámenes de laboratorio, para certificar los resultados.
“A pesar de
nuestros escasos recursos, estamos trabajando y haciendo el control,
verificando con laboratorio, enterrando a los animales, porque es peligroso:
han muerto con rabia”, dijo el director del Senasag.
El Senasag
manifestó que las corrientes anteriores de rabia bovina en el valle alto se han
controlado. Los últimos brotes se registraron en Toco y Cuchu Muela, donde
murieron 20 vacas y en ocho los
resultados dieron positivo para rabia bovina.
Lloran las
pérdidas
Los
comunarios de Collpaciaco lloran por las pérdidas económicas que les representa
la muerte del ganado. Expresaron que en los más de 40 años que viven en el
lugar nunca vieron morir a su ganado por rabia bovina.
Más de uno
atribuye el brote de la enfermedad a la extrema sequía que afecta al valle alto
y, particularmente, a Arani, y a las elevadas temperaturas. Pero, lo único
cierto hasta ahora es que el virus es transmitido por el murciélago hematófago
—que se alimenta de sangre— que ha proliferado en las decenas de casas
abandonadas y el histórico convento de Collpaciaco.
Los
pobladores lamentan la pérdida de su ganado, cada uno cotizado entre 7 y 8 mil
bolivianos. Sin embargo, el Senasag informó que se trata de un brote leve y que
no todo el ganado está enfermo, por lo que pidió a los dueños de vacas que no
sean tentados por los especuladores que aprovechan estas situaciones para
comprar ganado a bajo precio. El
Senasag, que trabaja desde hace años en sanidad animal, hizo notar que varios
de los ganaderos señalaron que sus reses fueron vacunadas hace unos meses
contra la rabia bovina.
Control y
asistencia
Los
pobladores de Collpaciaco reclaman apoyo de la Gobernación y la Alcaldía de
Arani, sobre todo para reponerse de las pérdidas económicas.
Por el
momento, el sistema de salud se ha movilizado para revacunar a los canes.
La meta es
inmunizar a unos 400 perros, que pueden ser mordidos por el murciélago portador
del virus.
También se
tiene bajo observación y reciben la vacuna antirrábica seis personas que ante
el primer brote de rabia bovina decidieron sacrificar a la vaca y carnearla
para el consumo. Aunque la carne no es dañina, sí es posible que exista un
contagio en la manipulación de la carne cruda, por lo que las personas serán
vacunadas por seguridad. Los pobladores también acordaron no comercializar el
ganado ni faenarlo hasta que la emergencia haya pasado.
En
Collpaciaco habitan aproximadamente 1.000 personas, las vacas son parte
importante de la economía de las pocas familias que aún viven en la zona y no
han migrado a la ciudad.
Tomado de
los Tiempos de Bolivia
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