martes, 6 de agosto de 2019

¿PODRÍA ALIVIARSE LA ANSIEDAD CAMBIANDO SU DIETA?


La revisión sugiere que regular el microbioma intestinal y alterar su dieta para reducir la ansiedad podrían ser enfoques efectivos para la salud intestinal y la ansiedad.
Un equipo de investigadores revisó la literatura que abarca a 1503 personas y determinó que la regulación de la microbiota intestinal podría tener un efecto positivo sobre la ansiedad.
Los síntomas de ansiedad son comunes en las personas con trastornos mentales y algunos físicos, y hasta un tercio de las personas sufren síntomas en su vida. La investigación ha indicado que el microbioma intestinal puede afectar la función cerebral a través del 'eje intestino-cerebro'; Sin embargo, no ha concluido si regular el intestino puede ayudar a los trastornos mentales.
El equipo, del Centro de Salud Mental de Shanghai en la Facultad de Medicina de la Universidad Jiao Tong de Shanghai (China), revisó 21 estudios, de los cuales 14 utilizaron intervenciones probióticas de "bacterias buenas" y siete intervenciones no probióticas, como la regulación de la dieta.
De los 21 estudios, 11 mostraron un efecto positivo sobre los síntomas de ansiedad. De los 14 que usan probióticos, el 36% los encontró efectivos, mientras que seis de los siete estudios no probióticos mostraron un efecto (86%). De cinco estudios que usaron tanto intervenciones como tratamiento normal, solo aquellos que usaron intervenciones no probióticas redujeron los síntomas de ansiedad.
Los autores creen que la mayor eficacia de las intervenciones no probióticas podría deberse al mayor impacto del cambio de dieta en comparación con la suplementación con probióticos. Los autores postularon que esto podría deberse a un cambio en la dieta que resulta en una diferencia significativa en el suministro de energía para las bacterias, el período de las intervenciones es demasiado corto para tener un efecto significativo, o la amplia gama de especies utilizadas que hace que algunas no sean efectivas implantado



De los estudios, solo cuatro informaron efectos adversos leves (como sequedad de boca y diarrea), y ninguno informó eventos adversos graves.
Si bien el estudio sufrió limitaciones debido a su naturaleza observacional y las diferencias en el diseño de los estudios incluidos, los autores esperan que se realicen más investigaciones y confirmen de una vez por todas si la alteración de la flora intestinal puede mejorar la ansiedad.  // tomado de envio de techniques


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