Los desplazados suman
mil y habría otros 200 no identificados; temen que el río llegue hoy a los 8,50
Suman 1.000 los desplazados por las inundaciones que están
registrados por el Comité Departamental de Emergencias, aunque ese organismo
estima que hay otros 200 que no han sido detectados. EL TELEGRAFO encontró
algunas decenas de esos evacuados, que residen temporalmente en los studs del
hipódromo San Félix y que hasta ayer no se habían contactado con las
autoridades que atienden la emergencia.
En tanto, a la medianoche, el río alcanzaba los 7,85 metros
por sobre el cero del puerto, y desde Salto Grande se advertía que hoy --tal
como había sido previamente anunciado-- se producirá el último pico de
creciente, que podría llevar a los 8,50, siendo seguro que sobrepasará los 8
metros. Esto se debe a que la cota del embalse se encontraba en los 35,20
metros, y se evacuaban 24.047 metros cúbicos por segundo, de los cuales 16.011
por vertederos y los restantes 8.036, turbinados.
Los datos oficiales indican que hay 998 evacuados, 226 más
que en la jornada anterior. De estos, 850 son autoevacuados, 520 mayores y 330
menores. Los restantes 148 son evacuados y están bajo vigilancia del Comité Departamental
de Emergencias. De estos, 66 son mayores y 82 son menores. Están alojados en el
estadio “8 de Junio”, al máximo de capacidad, el gimnasio de la Escuela Nº 2 y
en carpas en el parque Cairo Cosio, Entre Ríos y Washington y en el barrio
Curupí.
A los alojados en el Cairo Cosio, después que EL TELEGRAFO
expusiera sus carencias, entre ellas la imposibilidad de bañarse, se les
ofreció traslado y duchas en el estadio cerrado, pero no aceptaron, dijo el
presidente del comité Emilio Roque Pérez.
Representantes del comité, además, recorrieron las carpas
levantadas por familias en las cercanías de sus hogares inundados, para
determinar la pertinencia de proveerles de canasta de alimentos. Se detectaron
unas 15, algunas de ellas conectadas sin autorización al tendido eléctrico de
UTE.
Pérez subrayó por su parte que “las autoridades de Salto
Grande mantienen el alerta hasta los 8,50 metros. Ante esto exhortamos a los
residentes que evacúen con tiempo, que tenemos los vehículos y el personal
necesario, pero que es mucho mejor sacarlos de sus casas sin que estas estén
inundadas”.
Ayer “se volvió a visitar casas con inminencia de ser
inundadas, pero prácticamente nadie quiso evacuar. Es un peligro este tipo de
actitudes, para ellos mismos, pero no tenemos las herramientas legales para
proceder a una evacuación compulsiva, así que estamos pidiendo que reflexionen
y colaboren”.
Durante el día hay una media docena de camiones a
disposición del comité y alrededor de 20 personas. Por la noche, queda en
guardia el camión de Prefectura de Puerto y personal de esa misma dependencia,
que solamente actúa ante emergencias. El resto de los pedidos es derivado para
el día siguiente.
LA COMIDA ES BUENA
El presidente del Comité Departamental de Emergencias,
Emilio Roque Pérez, salió al cruce de las declaraciones formuladas a EL
TELEGRAFO por evacuados relacionadas con la calidad de la comida que se les
brinda. “Yo comí (el lunes a mediodía) el guiso de lentejas, fideos y carne.
Estaba buenísimo. Lo comieron también quienes están con nosotros trabajando en
el comité en los equipos de evacuación. Estaba riquísimo y era abundante”.
“No podemos conformar a todos, y también es cierto que el
domingo se sirvió una polenta que estaba un poco aguada, son cosas que ocurren
cuando se cocina para mucha gente. Además no nos gustan todas las comidas. A
mí, por ejemplo, no me gusta la polenta, aunque tuve que comerla en alguna
etapa de mi vida, no voy a decir que no”, agregó Pérez.
“Pero la comida es buena, tenemos los insumos, tenemos a la
gente del Batallón ‘General Leandro Gómez’ de Infantería Mecanizado Nº 8, e
INDA nos brinda los alimentos. La comida es buena y si no creen los invito a
comer en cualquiera de los lugares donde se sirve”, dijo a los medios de prensa
presentes en el informe diario de las 11.
VISITA DEL PREFECTO NACIONAL NAVAL
A mediodía de la víspera arribó a Paysandú el prefecto
nacional naval, capitán de Navío (CP) Javier Bermúdez, por el aeropuerto
internacional “Tydeo Larre Borges”, en el helicóptero 066 de la Armada
Nacional.
En la terminal aérea sanducera dijo a EL TELEGRAFO que
“quise ver cuál es el panorama desde Fray Bentos a Paysandú, que es la zona más
afectada por la inundación, para determinar si los recursos que se pusieron a
disposición de los comités departamentales de emergencia son los apropiados o
si es necesario reforzarlos, tanto desde la Prefectura Nacional Naval como
desde la Armada Nacional”.
También anunció que llegó para conversar sobre “la
posibilidad de trasladar a mediano plazo la sede de la Prefectura de Paysandú,
porque está en un área inundable, lo que hace que ante una emergencia
importante primero tengamos que evacuarnos nosotros para luego atender a la
población”. Por otra parte, “es un edificio muy viejo, que sufre con cada nueva
inundación. La idea es encontrar un edificio de algún organismo público que
pueda ser usado a esos efectos, lo más cerca de la zona portuaria, pero no en
una cota de tan rápida inundación”.
El actual edificio podría ser convertido en un museo,
siguiendo una idea de Rubens Stagno, y allí solamente quedaría la sala de radio
de Prefectura de Puerto. “Pero es una idea, hay mucho que trabajar sobre ella
aún”.
El capitán de Navío Bermúdez expresó además que en la zona
hay una embarcación y varias unidades neumáticas, además de las embarcaciones
que tiene cada una de las prefecturas. “Lo que hacemos con nuestros medios es
apoyar las actividades del Comité Departamental de Emergencias, que es el que
coordina las actividades y las evacuaciones. Creo que lo que hemos planificado
ha dado buen resultado”. Posteriormente, visitó la sede del Comité
Departamental de Emergencias, donde fue recibido por su presidente, Emilio
Roque Pérez.
SIN PRENSA
Al iniciarse la sesión de la víspera del Comité
Departamental de Emergencias, por moción de unos de los organismos integrantes
del Centro Coordinador de Emergencias Departamental (Cecoed), conocidos también
como los organismos permanentes del comité, se determinó impedir el ingreso de
EL TELEGRAFO, medio que cubría habitualmente las sesiones, tanto del Comité
Departamental de Emergencias como del Cecoed, desde hace años. El miembro
mocionante se mostró particularmente molesto por parte de la crónica publicada
ayer martes. Como consecuencia de eso, se impide el acceso a las sesiones a EL
TELEGRAFO.
MÁS CALLES CERRADAS
Ante el avance del río, se procedió al cierre de otras
calles de la zona oeste de la ciudad. Como fuera informado en la víspera
estaban cortadas (y permanecen) Costanera Norte de CARU a Antonio Estefanell,
Baldomero Vidal y Antonio Estefanell y Baldomero Vidal y Ayuí. Ahora se sumó Baldomero
Vidal y Purificación.
También están cortadas Andresito y Avenida de los Iracundos,
Avenida de los Iracundos y Éxodo, Baldomero Vidal y Henderson al Sur, Costanera
Norte y Baldomero Vidal (Yacht Club Paysandú), agregándose ahora avenida José
Batlle y Ordóñez y Lucas Piriz.
El tránsito continúa interrumpido además en avenida José
Batlle y Ordóñez y Zelmar Michelini, y desde ayer también en Entre Ríos y
Bolívar. Lo mismo ocurre en Charrúas y Zelmar Michelini, Don Bosco y Zelmar
Michelini (cortada ayer por el agua), Uruguay y Zelmar Michelini, Florida y
Zelmar Michelini, Gutiérrez Ruiz y avenida Brasil, avenida Brasil y Pinilla,
Ledesma y Leandro Gómez, Leandro Gómez y Paz, Ituzaingó y Garzón y 25 de Mayo y
Garzón. A estas calles se sumaron avenida Francia (Park Way) y Ledesma y el
camino al hipódromo San Félix por la diagonal.
COLONIA JUAN GUTIÉRREZ RECUPERÓ COMUNICACIÓN
La colonia Juan Gutiérrez recuperó sus vías de comunicación
al descender las aguas del río Queguay, aunque aún se mantiene la creciente,
informó a EL TELEGRAFO el residente en la zona Diego Parietti. Dijo que tanto
el paso Andrés Pérez, sobre el Queguay, como el paso Hondo, sobre el Queguay
Chico, permiten ahora la circulación, si bien se mantiene la creciente por
debajo del nivel de los puentes. Por el primero, el más utilizado, los colonos
viajan a Guichón, distante 32 kilómetros y la ciudad a la que más asiduamente
concurren. Por el paso Hondo, en cambio, llegan a ruta 26. Por ambos, se puede
llegar a Paysandú.
Parietti señaló que “ahora es común que quedemos aislados
con cualquier lluvia de muchos milímetros en pocas horas, como ocurre por esto
del cambio climático”. Agregó que aunque el Ministerio de Transporte y Obras
Públicas (MTOP) “está ensanchando la calzada sobre Andrés Pérez, mantiene el
mismo nivel, ni un centímetro más alto, por lo que la situación continuará
igual; la zona se seguirá inundando y quedaremos aislados, con problemas
importantes si tenemos que enfrentar alguna emergencia sanitaria”.
Recordó además que “durante la temporada de fuertes vientos
en el verano, caen un par de columnas y quedamos sin energía eléctrica, hasta
por 15 días”.
En la zona hay explotación bovina y ovina, y producción de
quesos.
AUTOEVACUADOS EN EL HIPODROMO
Varias decenas de personas se encuentran alojadas en los
studs del Hipódromo de San Félix, después de la salida de cauce del arroyo
Sacra y del río Uruguay, dos cursos de agua que afectan la zona, y que cortaron
el acceso al centro hípico por la Diagonal, anegando más de diez viviendas, en
tanto otras estaban a punto de colapsar en la tarde de ayer.
En general, familias de personas que trabajan en el
hipódromo recibieron la autorización de las autoridades para poder trasladarse
a esos lugares. Tal el caso de la familia Martínez-Puerto, que se había mudado
una semana antes desde una vivienda ubicada en la acera Sur de Park Way,
cercana al Sacra.
“Estábamos acostumbrados a las crecidas del Sacra, que son
muy rápidas. Un mañana nos despertamos y teníamos el agua bajo la cama.
Había un ventilador enchufado a un alargue. No pasó nada de
milagro”, contaron. Después de sufrir varias crecidas, decidieron mudarse cerca
del hipódromo, adonde llegaron la semana pasada. “En una semana tuvimos que
mudarnos dos veces. Acá estamos como podemos, hará mucho frío de noche, pero no
tuvimos más remedio”, agregaron.
No están recibiendo apoyo del Comité Departamental de
Emergencias pero tampoco lo han solicitado, aunque tienen dificultades para
conseguir agua pues la que está cercana es salobre, deben compartir el baño con
otras familias y no tienen facilidades para ducharse.
RECOMENDACIONES PARA
INUNDADOS
La Dirección Departamental de Salud comenzó la entrega del
folleto “Recomendaciones a la población”, producido por el Ministerio de Salud
Pública, la departamental y el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae).
El folleto sugiere que para evitar problemas de salud,
vinculados a la inundación, se recomienda mantener las condiciones de higiene
personal y ambiental; lavarse las manos con agua corriente y jabón antes de
preparar o comer alimentos; consumir solamente agua potable; vigilar la
preparación adecuada de los alimentos; no utilizar aguas estancadas para
consumo o aseo; mantenerse alertas ante el riesgo de mordeduras de ofidios y
roedores; y no permitir que los niños jueguen en lugares donde haya aguas de la
inundación. En tanto, para el retorno tras el descenso se las aguas, se sugiere
efectuar la primera visita con luz diurna; extremar precauciones con la
instalación eléctrica y asegurar la ausencia de riesgo eléctrico antes de
ingresar; entrar con calzado adecuado porque pueden encontrarse objetos cortantes
o contaminados que pueden ser peligrosos si se camina descalzo; dejar abiertas
puertas y ventanas para facilitar el secado de las instalaciones; y realizar la
higiene de la vivienda con una dilución de hipoclorito de sodio. TOMADO DE EL
TELGRAFO DE URUGUAY
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