EL LUGAR TIENE TODOS LOS SERVICIOS BÁSICOS, AUNQUE FALTAN
OBRAS DE VIALIDAD Guasaganda busca su progreso con la industrialización de
quesos y chocolates Los 5.000 pobladores de esta parroquia de La Maná dedican
la mayor parte del tiempo a la ganadería. Los numerosos ríos en la zona se han
convertido en un problema y fortaleza a la vez. Foto: Shirley Serrano / Ecuador tiene lugares desconocidos y con
nombres que quizás nunca escuchó antes.
Uno de ellos es Guasaganda, una parroquia rural ubicada a 30 minutos de
La Maná, en Cotopaxi. Llegar al lugar es casi imposible a bordo de un
transporte interprovincial, hay camionetas que cobran $ 1 por persona y los
taxis alredor de $ 10 por el traslado. El camino es irregular y de piedras,
pero el paisaje es inspirador: está rodeado de afluentes de agua y espesa
vegetación de distintos colores. También es posible observar los imponentes
ríos Guasaganda (que da el nombre al lugar) y Quindigua. De ellos se derivan
varios afluentes que forman a su vez los ríos Mandila Grande y Chico.
Precisamente los ríos son el problema y la fortaleza de Guasaganda. Primero
porque tal cantidad de agua permite que existan filtraciones. Para evitar los
deslaves, la comunidad se ha unido y ha construido pasos de agua. En el sitio
ya hay 14 de estas estructuras en los 16 afluentes que tienen contabilizados. Jorge
Corrales, presidente de la Junta Parroquial, detalló que es un trabajo conjunto
con la vecina parroquia Pucayacu. Por ello, el viernes y sábado pasados se
interrumpió el paso, con maquinaria de la Prefectura, para instalar una
tubería. La presencia de agua también se convierte en una bendición en
Guasaganda, a la hora de cosechar la tierra. La calidad del pasto es tan buena
que el 75% de los pobladores se dedica a la cría de animales, lo que se
complementan con cultivos de yuca, naranja, cacao o fréjol. Al escuchar que
Guasaganda queda en Cotopaxi cualquiera se imagina una tierra con clima frío,
la característica de esta región del país. No es así, se trata de un clima
subtropical y la mayor cantidad de sus habitantes son descendientes de otros
pobladores de la Sierra. Sergio, el más
antiguo En el lugar hay 5.000 pobladores, aunque en el censo de 2010 se
registraron 3.900. Uno de los fundadores de Guasaganda, que se parroquializó
oficialmente el 25 de mayo de 1977, es
Sergio Aldaz. Él llegó al sitio en 1963, cuando los terrenos pertenecían
al desaparecido Ierac (Instituto Ecuatoriano de Reforma Agraria y Colonización).
Don Sergio, como todos lo llaman, llegó al sector a los 27 años y hoy con 8
décadas a cuesta ha logrado consolidar
una casa cómoda y grande, en donde crió a sus hijos que ya no viven en el
lugar. Ahora solo quedan él y su esposa. Guasaganda está compuesta por 19
recintos y la mayoría de sus habitantes pasan la gran parte del día cuidando el
ganado o los cultivos, por ello la cabecera parroquial permanece casi desierta.
Solo se observan a varias personas
sentadas en los exteriores de las tiendas o en la esquina del parque.
Allí 2 mujeres venden frituras, junto al paradero, cubiertas por un plástico
negro que es sujetado por una caña, y quienes ya están acostumbradas al polvo
que levantan los carros. A pesar de ser una parraquia rural Guasaganda cuenta
con todos los servicios básicos, como agua, luz, teléfono e internet, pero no
hay señal de celulares, por lo que es complicado encontrar a algún poblador que
no esté en su casa. La vialidad también es una de sus deficiencias. En las
vías, la mayoría lastradas, se pueden observar cabezas de ganado que son
pastoreadas por los habitantes.Debido a la abundancia de ganado en la zona, en
Guasaganda se implementó desde 2012 un centro de acopio de leche, que lleva el
mismo nombre de la población. Gracias a este centro los productores pequeños no
usan los intermediarios y pueden obtener un precio justo por cada litro de
leche. Corrales cuenta que antes de que funcione el centro los ganaderos recibían entre $ 0,29 y $ 0,30. Al
inició en el centro se pagaba $ 0,38 y actualmente $ 0,45 por cada litro del
lácteo. La comunidad ahora entrega diariamente 3.000 litros a Toni y Rey Leche,
aunque este es un gran avance es poco comparado con los 14.000 litros que se
producen en la localidad. En Guasaganda sus habitantes han comprendido que la
forma de progresar es generando valor agregado a la materia prima, por ello
trabajan en una planta de leche y ya han
firmado un contrato con la empresa El Salinerito para elaborar quesos de la misma calidad. También
trabajan en la construcción de una procesadora de cacao y así crear derivados
del producto. A esto se suma el turismo sostenible, puesto que desean
promocionar las cascadas y los ríos del sector. (I) TOMADO DE EL TELEGRAFO DE
ECUADOR
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