viernes, 17 de julio de 2015

MAREA ROJA

Opiniones FUNIBER: ¿Son las “Mareas Rojas” un peligro para la salud?
SUMOME Los humanos modificamos nuestro entorno para poder tener una mejor calidad de vida, pero en el proceso muchas veces no tomamos en cuenta el impacto indirecto que esas modificaciones tendrán sobre el medio ambiente o sobre los organismos que habitaban determinada zona. Las “Mareas Rojas”, o la Floración de Algas Nocivas (FAN), ocurren cuando las microalgas de un determinado territorio crecen intensamente de forma repentina. Este tipo de eventos es cada vez más frecuente y su presencia puede conducir a la muerte de muchas especies marinas o la contaminación de alimentos que posteriormente podrían ser consumidos por humanos. Erik Simões, profesor en la Fundación Universitaria Iberoamericana (FUNIBER) en los programas de Postgrado en Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, explica las causas y consecuencias de las “Mareas Rojas” y su impacto en la vida del planeta y el potencial peligro que representan para la salud de las personas. Un poco de historia
El docente de FUNIBER opina que las “Mareas Rojas” no son algo reciente, e indica que la primera vez que se registró este tipo de fenómeno se puede encontrar en la Biblia, específicamente en el Antiguo Testamento (Éxodo, 7:20-21), donde se relata que ocurrió una floración de dinoflagelados, alrededor del año 1000 a.C. en Egipto, cuando se tiñó de rojo el río Nilo, generando una masiva mortalidad de peces y tornando el agua tan fétida que los egipcios no la pudieron tomar. La “Marea Roja” es un nombre coloquial que se le ha dado a este fenómeno natural, pero Simões explica que podrían ocurrir “Mareas Verdes” o “Mareas Amarillas” dependiendo de la pigmentación de la microalga. En el caso de la “Marea Roja” se trata del rápido crecimiento de dinoflagelados, cuya presencia del pigmento piridina le confiere un color rojizo a las células. Las causas Simões señala que la masiva floración de los dinoflagelados se puede producir por un incremento en la disponibilidad de nutrientes en su entorno y la disponibilidad de luz. En sus investigaciones el profesor de FUNIBER ha identificado que la causa puede ser natural, como el fenómeno oceanográfico conocido como resurgencia, en el que aguas profundas, ricas en nutrientes, afloran a la zona fótica. Pero también puede tener origen antropogénico, como consecuencia de los desechos vertidos por los humanos en el agua como parte de las actividades domésticas e industriales. Los fertilizantes utilizados actualmente para el cultivo de alimentos, usualmente se filtran hacia el cauce de los ríos y desde allí llegan a los océanos, brindando una gran cantidad de nutrientes que pueden ser aprovechados por los dinoflagelados y otros microorganismos unicelulares para crecer en forma explosiva. Adicionalmente, los residuos industriales y domésticos siguen el mismo curso y pueden servir de alimento a estos microorganismos, que pueden llegar a crecer rápidamente, generando el “cambio de color” de ciertas regiones de ríos, lagos y océanos. Peligro para la vida En opinión de Simões las “Mareas rojas” no son un fenómeno exclusivo del océano. Se producen tanto en el océano como en las aguas continentales, siendo un evento de mayor peligro cuando se produce una reproducción masiva de dinoflagelados en entornos cerrados como un lago, donde los animales no pueden escapar. El especialista indica que algunas especies de estos organismos unicelulares producen toxinas, otros pueden causar la obstrucción de las branquias de los peces o pueden consumir rápidamente el oxígeno del agua generando una zona anóxica, provocando la muerte masiva de otros organismos. Cuando una FAN es muy grande, genera una barrera que impide el paso de la luz en el agua, como consecuencia de esta situación, el fitoplancton no puede completar su proceso de fotosíntesis por tanto no produce oxígeno. Tras la muerte de las microalgas se inicia un proceso de descomposición que consume oxígeno en la zona afectada y este fenómeno sumado a la ausencia de fotosíntesis, genera la anoxia, creándose una zona muerta que impide el desarrollo de la vida en determinadas regiones. En zonas donde se cultivan o producen moluscos bivalvos, las toxinas producidas por los microorganismos se pueden almacenar en la carne de los lamelibranquios y causar una intoxicación entre las personas que los consuman posteriormente. En algunos casos, cuando la “Marea Roja” afecta una zona costera, las toxinas producidas por los dinoflagelados pueden ser inhaladas por los humanos cuando las olas dejan un rastro de minúsculas partículas de agua en el aire. El investigador de FUNIBER destaca que en la historia se han registrado algunos casos de intoxicación por el consumo de bivalvos, como el ocurrido en 1973, en Canadá, cuando tripulantes de una embarcación inglesa murieron después de ingerir moluscos contaminados con toxinas. La ingestión de bivalvos contaminados con las toxinas producidas durante una FAN puede producir en las personas fuertes diarreas, e incluso amnesia o parálisis. El especialista de FUNIBER indica que los síntomas clínicos causados por la ingesta de ficotoxinas son clasificados de la siguiente manera:
– Síndrome amnésico o ASP (Amnesic Shellfish Poisoning): cefalalgias, mareo, desorientación, disturbios en la visión, pérdida de memoria, debilidad y convulsiones.
– Síndrome paralizante o PSP (Paralytic Shellfis Poisoning): náuseas, dolores abdominales, hormigueo por el cuerpo y falta de aire.
– Síndrome diarreico o DSP (Diarrhoeic Shellfish Poisoning): diarrea, náuseas, vómitos y cólicas.
– Síndrome neurotóxica o NSP (Neurotoxic Shellfish Poisoning): vómitos y náuseas y una variedad de síntomas neurológicos, como habla arrastrada y pierdas de coordinación.
Riesgo para la economía Determinadas regiones que sustentan su economía en la producción de bivalvos pueden enfrentar dificultades en la producción y comercialización de ostras, mejillones, pectínidos y almejas. Adicionalmente, la floración de algas nocivas puede afectar la salud de los habitantes de una ciudad y demandar recursos adicionales por parte de los sistemas de salud. Simões indica que en algunas ciudades como Santa Catarina, responsable de la producción del 90% de moluscos bivalvos en Brasil, la presencia de una FAN puede elevar los costos de salud pública, como consecuencia de atender a personas infectadas, y mermar la economía local al producirse el embargo de las zonas afectadas. El fenómeno puede tener un impacto directo sobre sectores como acuicultura y pesca. FAN y calentamiento global Simões resalta que el calentamiento global no puede ser considerado como una de las principales causas de las FAN. Sin embargo, tiene un impacto indirecto. Algunos científicos afirman que el calentamiento global sí podría aumentar en frecuencia, intensidad y distribución geográfica los eventos de floraciones de algas nocivas. En este momento no existe un método para evitar el desarrollo de una FAN, solo se han establecido medidas para supervisar áreas que podrían estar en riesgo. El investigador indica que el Codex Alimentarius, programa responsable por la estandarización mundial de la seguridad alimentaria, ha reunido a especialistas de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Comisión Intergubernamental de la UNESCO (IOC), para definir los límites aceptables de la presencia de toxinas en los pescados y establecer métodos adecuados para realizar los análisis. Por el momento las medidas se han orientado a establecer un monitoreo y no a evitar la ocurrencia de los fenómenos. El investigador de FUNIBER manifiesta que el impacto antropogénico se puede reducir instalando eficientes sistemas de tratamiento de aguas residuales y resalta que en aquellas ciudades que tienen como actividad principal el cultivo de bivalvos, la instalación de sistemas de tratamiento de aguas residuales es más necesario.
Conozca más sobre los programas de Maestría y especializaciones en Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible de FUNIBER en el siguiente enlace:
http://www.funiber.org/areas-de-conocimiento/medio-ambiente-y-desarrollo-sostenible/

Pueden consultar el trabajo completo de Erik Simões sobre las “Mareas Rojas” en el siguiente enlace: http://fnbr.es/130 TOMADO DE ENVIO DE FUNIBER 

1 comentario:

FUNIBER dijo...

Es una entrevista muy interesante la que Erik Simoes nos ofrece a través del blog www.estudiarenfuniber.com
Si están interesados en formación sobre Medio Ambiente, les invitamos a visitar la página web de FUNIBER donde encontrarán maestrías y especializaciones vinculadas a esta área: http://fnbr.es/1ae