ALERTA | Un informe
del Cipca recoge datos de varias regiones del país afectadas por sequías,
granizadas, inundaciones, vientos y otros desastres. Prevén que los efectos de
este año serán tan fuertes como 2006-2007 El Niño golpea con fuerza a
comunidades indígenas Por Anf – FOTO Inundaciones en la zona de Guanay, en
departamento de La Paz. - Apg La Paz | Sequías, granizadas y lluvias
localizadas afectan seriamente la capacidad productiva de muchas regiones del
país, según advierte el informe “Fenómeno de El Niño en comunidades indígena
originario campesinas de Bolivia” elaborado por el Centro de Investigación y
Promoción del Campesinado (Cipca). El
informe recoge los reportes del impacto climático de todo el territorio
nacional y concluye que la afectación será dará con mayor fuerza entre fines de
2015 y marzo de este año, podría ser similar a la magnitud del año agrícola
2006-2007. Mientras algunas regiones se
inundan, otras soportan sequías extremas. “La laguna Huarapata, Oruro, muy
cerca de Caracollo, se ha secado por completo, amenazando el bofedal
circundante del que se alimentaba el ganado ovino y camélido de las comunidades
vecinas”, señala el informe. La falta de
lluvias tendrá serios efectos en la producción de quinua que “en algunas
regiones se perdió completamente por los fuertes vientos que taparon con arena
las plántulas recién nacidas, resultado de la desertificación de los suelos en
gran parte de la región circundante al salar de Uyuni por la ampliación
inadecuada del cultivo, estimulado por el boom de la quinua”. La sequía extrema en la región altiplánica
también afecta a la producción camélida -llamas- y a los animales silvestres,
principalmente vicuñas y si no hay lluvias en las próximas semanas podría
producirse una alta mortandad de camélidos como ocurrió el 2014. En el Norte de
Potosí las zonas altas son las más afectadas por la sequía, hay un retraso
generalizado en la siembra de papa y maíz, la poca superficie sembrada hasta
ahora fue afectada por las granizadas Al sur de Cochabamba no se han registrado
precipitaciones pluviales desde noviembre y las temperaturas han ido en aumento
hasta 28 grados “los efectos de la sequía se dejan sentir con más fuerza que
otros años”. Muchos atajados de reserva de agua se han
secado y no ha sido posible la siembra temprana y resulta casi imposible
continuar con la cría de los peces carpa, por la disminución de los caudales.
Disminuye caudal de agua El
informe del Cipca pronostica que para esta zona chaqueña 2016 “será un año malo
para la producción”. En el Chaco subandino la situación es menos dramática, ya
que se han presentado lluvias con cierta regularidad. En
varias regiones del departamento de Santa Cruz, los caudales de agua han
disminuido tanto para el consumo humano como para el consumo del ganado. A la
sequía se suman fuertes olas de calor que derivan en incendios que han
provocado la pérdida de viviendas en algunas comunidades. En la
Amazonia norte y sur “se han presentado lluvias retrasadas y escasas por lo que
muchos de los sembradíos se perdieron por la sequía; en otros casos, las
familias han preferido no sembrar aún. Frente a ese panorama, Cipca plantea la
necesidad de “intensificar y ampliar inversiones no sólo para el manejo del
agua, sino para la gestión integral de los recursos naturales en perspectiva de
cuencas y territorios que sean productivos”. TOMADO DE LOS TIEMPOS DE BOLIVIA
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