Economía
Volúmenes disponibles para la exportación. | Wilson Cahuaya
El presidente Evo Morales junto a los representantes del
sector privado, en Santa Cruz, ayer. | ABI
Una imagen del Puerto Gravetal. | ABI
Por Josué Hinojosa
En una reunión entre el presidente del Estado, Evo Morales,
y el sector privado del oriente, se acordó la liberación irrestricta de la
exportación de soya, carne, sorgo y azúcar; además de la apertura para revisar
una propuesta técnica sobre el uso de eventos de transgénicos para productos
como maíz, caña, algodón y soya.
A pesar que los pedidos datan de gestiones con mejores
resultados en cuanto a productividad, el acuerdo se logra en un contexto previo
a las elecciones presidenciales.
El debate sobre la liberación de las exportaciones comenzó
en septiembre, en una de las mesas de trabajo que se instaló con el Gobierno.
Según Morales, se autorizó la libre exportación de soya y sus derivados
habiendo un previo estudio de la cadena productiva para garantizar la provisión
del grano para el sector avícola, porcícola, lechero e industrial.
“Implicará acuerdos internos en materia de precio justo y
volumen adecuado entre diferentes sectores, incluyendo, además, a los pequeños
productores”, dijo Morales.
La producción de soya este año asciende a 2.528.660
toneladas, de esa cantidad, 800.000 son destinadas para el consumo interno, por
lo que existen alrededor de 1.728.660 toneladas de excedentes exportables,
según datos de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo). Morales también informó que el Gobierno autorizó la libre
exportación carne de res, un alimento cuya producción creció considerable. En
2017, en base a datos del Observatorio Agroambiental, Bolivia produjo 230.000
toneladas de carne bovina, restando así un excedente
Luego de establecer la autorización irrestricta para los
cuatro rubros mencionados, Morales aclaró que el Estado aplicará los controles
y el seguimiento necesario para garantizar el abastecimiento interno, el precio
justo y las medidas correctivas.
El Gobierno y el sector privado consensuarán una normativa
general de asociaciones público privadas para impulsar megaproyectos como
Puerto Busch.
Esta determinación, que cobró fuerza con la declaratoria de
prioridad nacional a la construcción de Puerto Busch, también fue el resultado
de una mesa de trabajo entre el Gobierno y privados.
La construcción de Puerto Busch, ubicado en la provincia
Germán Busch (Santa Cruz), le permitirá al país acceder a una salida soberana
al Atlántico, que favorecerá a la exportación de productos agroindustriales.
Sin embargo, el acta de entendimiento entre Gobierno y
privados incluye también el compromiso de establecer condiciones para que los
puertos ubicados en el canal Tamengo (Puerto Gravetal, Puerto Jenifer y Puerto
Aguirre) adquieran la categoría de “puertos nacionales” con la inclusión de
servicios de Aduana y Senasag.
El presidente de la Confederación de Empresarios Privados de
Bolivia (CEPB), Ronald Nostas, calificó como valiosos los acuerdos que alcanzó
su sector con el Gobierno y destacó la predisposición para dialogar. “No puede
haber un sector privado sin estar respaldado por el Estado y no puede haber un
Estado sin el sector privado, porque ambos debemos cumplir un rol, por eso
vamos a trabajar codo a codo con nuestro Gobierno”, dijo. Tomado de los tiempos
de Bolivia
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