Reforestan mil hectáreas al año, mucho menos de lo que se
pierde
Cochabamba
Poscampaña. La mortandad de los árboles aún llega al 20 por
ciento; en algunas comunidades y barrios comprometidos con el medioambiente y
con el uso de hidrogel sobreviven el 95 por ciento de los plantines | Los
Tiempos
Lorena Amurrio Montes
Cada año se pierden 3.000 hectáreas de cobertura vegetal,
que equivalen a unas 12 lagunas como Alalay, a causa de incendios y la
deforestación en el departamento de Cochabamba.
Mientras tanto, las campañas de forestación y reforestación apenas llegan a restaurar 1.000
hectáreas, según datos del Ministerio de Medio Ambiente y Agua y de la Gobernación.
A esto se suma, la falta de planes reales para el
control y seguimiento a los plantines. En ocasiones se deja al cuidado de
comunidades o vecinos, pero no en todos los casos están dispuestos a
protegerlos.
En lo que va del año, se plantaron más de un millón de
árboles para reforestar 900 hectáreas en
44 de los 47 municipios (Ver
infografía).
Sólo Bolívar,
Omereque y Pojo no solicitaron plantines. Sin embargo, la mayor parte de
las alcaldías también produce plantas para forestar su jurisdicción, explicó uno de los técnicos de la Secretaría de la Madre Tierra
de la Gobernación, Yuri Baptista.
Tapacarí es el municipio que más plantines propios usa,
alrededor de 260 mil este año.
Sin embargo, un 70 por ciento de los proporcionados por la
Gobernación son pinos. En tanto, el 30 son especies nativas.
“El 70 por ciento es para forestar. El pino es una especie
que se adapta fácilmente y que crece rápido. Además, se puede aprovechar su
madera. El 30 por ciento es
para reforestación. Es decir, recuperar bosques nativos”, aseveró
Baptista.
El ambientalista Jhon Zambrana señaló que lo que más se
debería tratar de preservar es el bosque nativo.
Protección
Asimismo, Zambrana indicó que en la forestación es vital el
seguimiento. Si bien es inevitable que por lo menos un 20 por ciento de los
plantines no logre prenderse, esto se puede reducir con un cuidado adecuado.
Baptista explicó que la mayoría de las campañas de
forestaciones se hace en comunidades campesinas. De este modo, se capacita y
solicita a los pobladores que cuiden las plantas.
“Hay comunidades que tienen más experiencia y logran que
hasta el 95 por ciento de los plantines prenda. Sin embargo, hay otras con
menos conocimiento y el 60 por ciento de
los árboles llegan a adultos”, indicó.
Por otro lado, en la ciudad se compromete a los vecinos a
cuidar las plantas que se colocan en sus barrios. Sin embargo, a veces existen situaciones en
las que se dañan los árboles.
Los vecinos que viven cerca de la torrentera Beijing indican
que cada uno cuida entre tres y cinco
árboles, pero denunciaron que una instalación de gas dañó algunas especies.
A esto se suma, que en algunos sectores hay terrenos vacíos
o viviendas donde no habita nadie. Entonces, son lugares en los que nadie se
hace cargo del crecimiento de los
plantines.
En un recorrido por algunas
torrenteras y lagunas se verificó que por cada 20 plantines, por lo
menos cuatro no logran pasar de los dos a tres meses de vida.
Asimismo, se estableció que no todos tienen protección y son
destruidos por animales y personas que los pisan.
Además, muchas de las campañas se realizan durante el año,
cuando debería ser con mayor énfasis en la época de lluvia.
Por otra parte, el hidrogel que y el agua permiten que la
planta se mantenga hidratada un mayor tiempo y así mejora su crecimiento, dijo
la secretaria de Madre Tierra, Soledad
Delgadillo.
La restauración de
los bosques es un proceso largo. Los árboles del Tunari que son arrasados por
incendios tardan hasta 20 años en recuperarse.
En 2017 se
quemaron 712 hectáreas y este meses se
restaurarán cuatro con especies nativas
como la
kewiña.
MUNICIPIO
El desafío es plantar 2 millones de plantas
El municipio de Cochabamba tiene como meta plantar 2 millones de árboles en los próximos
10 años, a un ritmo de 200 mil por año.
Sólo de esa forma se
podrá revertir la pérdida de cobertura vegetal y la contaminación atmosférica.
Créditos:
Poscampaña. La mortandad de los árboles aún llega al 20 por
ciento; en algunas comunidades y barrios comprometidos con el medioambiente y
con el uso de hidrogel sobreviven el 95 por ciento de los plantines
SEPA MÁS
Torrenteras y lagunas
Cerca a 30.000 plantines se colocaron en torrenteras de
Cochabamba, asimismo, en las lagunas Alalay y otras.
Comuna Adela Zamudio
Durante el 2016, la exsubalcaldesa de la comuna Adela
Zamudio, Roxana Neri, emprendió una campaña de forestación en las aceras.
Scouts y sindicatos
Agrupaciones e instituciones privadas también se suman a
campañas de forestación. Este año se plantaron más de 1.000 en Cercado y otros.
Día del Árbol
Municipios y organizaciones sociales se organizaron para
plantar miles de árboles, en octubre, en especial en el eje metropolitano.
Sin embargo, no se considera una buena época porla época de
calor y, además, no suele existir un proceso de seguimiento.
Una gran cantidad de plantines colocados alrededor de la
laguna Alalay y otros que se producen en el vivero para reforestar este espacio
natural.
Mauricio Rocabado
OPINIÓN
“Se debe potenciar cada espacio que se tiene”
Gonzalo maldonado Ingeniero Emérito de Cochabamba
Presentamos al Concejo Municipal la propuesta de
forestación, porque es una combinación entre agua y árboles.
La idea es colocar especies adecuadas según el lugar y que
realmente tengan impacto.
También se necesitan crear áreas de parques urbanos, cada
municipio tiene espacios destinados para esto y se deberían potenciar y en lo
posible ampliar.
Asimismo, esto debe ir acompañado de una propuesta de riego,
porque que se necesita dotar agua. Se debería evitar regar con agua del río
Rocha, porque su contaminación genera un riesgo para el buen desarrollo de las
plantas.
Por este motivo, considero que se debería hacer un uso del
canal de riego No. 1 de La Angostura o esperar que llegue el agua de Misicuni.
No sólo se puede encarar campañas de forestación o
reforestación sin garantizar el agua para que la planta logre su desarrollo. Se
necesita más de un año para tener un árbol constituido.
Un árbol de una campaña en Coña Coña.
MAURICIO ROCABADO
RESTAURACIÓN
Campaña se enfocará en el Parque Tunari
Ante los constantes incendios que sufre el Parque Tunari, se
decidió que la campaña de forestación se realice en este lugar.
La secretaria de la Madre Tierra de la Gobernación, Soledad
Delgadillo, indicó que el objetivo es devolver el bosque nativo su principal
función: dar agua.
Sólo este año se quemaron 712 hectáreas de bosque entre
pinos, eucaliptos y kewiñas. El inicio de la campaña es hoy en el kilómetro 14,
en la ladera sur de Cercado, en la zona del Exfundo Andrada, que se quemó en
noviembre.
Pero, la idea es convocar a instituciones para firmar un
convenio y entregarles plantines a cambio de que hagan el seguimiento de las
plantas durante al menos dos años. De este modo, garantizar el crecimiento de
las kewiñas, molles o de las especies que se seleccionen para restaurar las
áreas quemadas.
Las campañas no llegan al centro ni a mercados
La pérdida de cobertura vegetal es cada vez más notoria en
las ciudades y sus efectos se sienten con más fuerza en días calurosos. En
Cercado así como Quillacollo y Sacaba en varias cuadras no hay árboles, sólo
aceras de cemento.
A pesar de esta realidad, las campañas se centran en los
barrios, torrenteras, lagunas y serranías, casi nunca en el centro y menos en
mercados.
Según el plan municipal de forestación y reforestación, en
Cercado sólo el 2,58 por ciento cuenta con áreas verdes, que equivalen a 357
hectáreas de 13.854 que tiene la provincia. La zona sur es la más afectada por
la falta de árboles.
La ausencia de plantas se puede apreciar desde La Cancha
hasta los barrios nuevos en K’ara K’ara y Uspha Uspha.
En tanto, en el norte la tendencia es de tres árboles por
cuadra. Los barrios que están en el norte y forman parte de la Comuna Adela
Zamudio tienen más plantas con 102 hectáreas por la presencia de parques
naturales y plazuelas que en el pasado priorizaron la vegetación.
En tanto, los barrios de zona sudeste, en la comuna Valle Hermoso, tienen la menor cantidad de
árboles con 36 hectáreas.
Otro aspecto que agrava la situación es que el 42,94 por
ciento de la jurisdicción se compone de “suelo artificial”, es decir, áreas
impermeabilizadas por edificios, pavimento y construcciones que impiden que la
lluvia ingrese a los acuíferos. Por su parte, el ambientalista Jhon Zambrana
explicó que tampoco se está cuidando que las plazas tengan árboles. Tomado de los tiempos de Bolivia
No hay comentarios:
Publicar un comentario