La estrategia de la gestión ambiental local y
municipal
por Luis Alberto Gallegos, editorial Boletín GAL.- Hoy se realizan en la Región Metropolitana
dos eventos muy importantes. El primero con los gestores ambientales
municipales de la región a efecto de intercambiar experiencia, reflexionar y
construir colaborativamente estrategias sobre la gestión ambiental local y el
Sistema de Certificación Ambiental Municipal (SCAM) que desarrolla el
Ministerio del Medio Ambiente.
El otro, el Cuarto Encuentro con los líderes de los Comités
Ambientales Comunales (CAC) de la RM que se han creado en el marco del SCAM y
que tiene por objeto fortalecer su gestión ambiental en el contexto del proceso
del Plan de Prevención y Descontaminación Ambiental para la RM.
Experiencias GAL y
globalidad
En nuestras comunas existen experiencias de buenas
prácticas, experiencias innovadoras y testimonios ilustrativos respecto a
actividades ambientales exitosas de las comunidades y/o sus municipios.
Estudios recientes muestran que la ciudadanía viene asumiendo
cada vez con mayor vigor sus propias preocupaciones, responsabilidades y
desafíos frente a problemas y conflictos ambientales que afectan su salud,
calidad de vida, bienestar comunitario y el desarrollo sustentable de su ciudad
y territorio.
La globalidad de nuestro mundo contemporáneo en las esferas
de nuestra vida como ciudadanos, no deja de lado el tema ambiental. Es más, las
redes globales tienen tres ámbitos que destacan como los más relevantes y en
torno a los cuales giran las preocupaciones, aportes e innovaciones.
El primero se
refiere a la gestión del conocimiento, es decir, a la necesidad y el desarrollo
de procesos de colectivización y mundialización de la curiosidad, investigación
y acceso a la información en torno a asuntos que nos afectan e involucran en
nuestra vida cotidiana.
El segundo se
refiere a la necesidad cada vez más creciente de la sociedad civil de nuestros
países a generar modalidades de participación activa en los debates políticos,
sociales, económicos, culturales, entre otros, que les posibilite acceder a las
decisiones de las políticas públicas que rigen sus vidas y, por tanto, les
empodere en su calidad de actores de este Planeta.
El tercero tiene
que ver con el desarrollo de la cualidad -innata e instintiva de cualquier tipo
de vida-, consistente en la percepción de la urgencia de atender los fenómenos
que arriesgan la sobrevivencia de la humanidad como especie. Y ello hoy es el
medio ambiente y específicamente el cambio climático.
La transversalidad de estos tres asuntos nos impone
considerarlos en nuestra gestión ambiental local. Mirar para el lado u
obviarlos en nuestro quehacer diario sería de una irresponsabilidad inexcusable
ante nuestra familia, comunidad, entorno laboral y ante las generaciones que
nos seguirán en el futuro.
El rol de los
municipios
Una de las experiencias que son parte de este escenario
descrito son las más de más de cien municipalidades que componen el Sistema de
Certificación Ambiental Municipal (SCAM), que se han constituido en un
componente activo en la gestión ambiental local de nuestras comunas.
El SCAM tiene por objetivo promover diagnósticos y
contribuir a definir planes de acción que permitan dirigir la gestión ambiental
local. La práctica social impulsada por el SCAM constituye pequeños y
significativos pasos concretos hacia la construcción de novedosas formas de
sustentabilidad territorial en nuestras comunas.
Por cierto, el SCAM no se inventó en Chile. Son innovaciones
de gestión ambiental que se desarrollan en otros países, llamadas Ecocomunas,
Ecomunicipios, Ecobarrios o Barrios Sustentables.
Agenda Local 21
Ello por una simple razón: la gestión ambiental local
–avalada en numerosos eventos mundiales desde su reconocimiento explícito en la
Cumbre de la Tierra y la Agenda 21 de 1992-, se ha convertido en uno de los
pilares fundamentales del quehacer de largo plazo de los países del orbe a
nivel ambiental.
¿Por qué la gestión ambiental local se ha constituido en un
soporte clave para el desarrollo sustentable?
Por tres razones,
entre otras.
Primero, la
gestión ambiental local permite que la comunidad y los municipios elaboren
diagnósticos, planes y estrategias ambientales, rescatando las experiencias de
la comunidad y proyectándolas a largo plazo de modo que se constituyan en
proyectos concretos y viables.
Segundo, la
gestión ambiental local es la forma específica en que se expresan y concretan
las metas ambientales globales y las voluntades colaborativas, solidarias y
asociativas de innumerables comunidades de múltiples regiones y continentes de
nuestro Planeta.
Tercero, la
gestión ambiental local es la praxis sustentable más apropiada para canalizar
una eficaz participación ciudadana de las comunidades de las ciudades,
territorios y municipalidades.
Gobernabilidad
ambiental
No obstante, el punto central y de mayor relevancia de la
gestión ambiental local y del Sistema SCAM en nuestras comunidades y municipios
radica en otro componente.
Estas experiencias son o pueden convertirse en el espacio,
en la experiencia y en la red social que pueden contribuir a una nueva
gobernabilidad ambiental en las ciudades, territorios o comunas.
La gobernabilidad ambiental se ha constituido en un tema
crucial a nivel global. Hoy los grandes decidores de las políticas públicas
ambientales, leyes, normativas, entre otras, son preferentemente los actores de
la clase política que controlan las correlaciones de fuerzas en las instancias
de poder del Estado y los organismos internacionales. Es decir, un sistema al
que los gobiernos locales y la sociedad civil generalmente no tienen acceso
decisorio o disponen de poca y limitada incidencia.
La gestión ambiental local es un instrumento en donde la
ciudadanía practica, experimenta y desarrolla las potencialidades de su
empoderamiento como actor relevante en las decisiones de las políticas públicas
ambientales.
Y este aprendizaje se logra mediante la educación ambiental,
la organización comunitaria y la práctica cotidiana en la construcción de
nuevas formas de gestión e incidencia en las políticas públicas ambientales. En
otras palabras, en el desarrollo de lo que en otros países se denomina
Ecocomunas, Ecomunicipios, Ecobarrios o Barrios Sustentables.
En definitiva, la gestión ambiental local es el crisol y el
espacio de posibilidades y desarrollo de experiencias ciudadanas y municipales,
en donde podemos contribuir a construir en Chile a una sociedad civil ambiental
potente, lúcida y como actor relevante en hacer de nuestro país un territorio
sustentable, sano y con alta calidad de vida. (FIN) tomado de envio de boletín gal
de chile
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