A casi un mes de la
evacuación continúa la espera de familias del afectado Caridi
CONSECUENCIAS. Tras la inundación el agua reveló los daños
ocasionados en el humilde barrio.
Las familias acordaron con Defensa Civil la futura
construcción de viviendas en el barrio que padeció la crecida. Registraron
importantes pérdidas materiales. Acumulación de basura de toda índole, casillas
quemadas y precarias a punto de desmoronarse, son el retrato actual de la zona
que fue perjudicada por el río.
Tras casi un mes del traslado, las 16 familias evacuadas del
barrio Caridi permanecen en la Escuela 299. Luego de que el viernes se
reunieran con el titular de Defensa Civil, Eulogio Márquez, hoy comenzarán con
los primeros análisis en el terreno que fue afectado por la crecida del Paraná.
En este contexto El Litoral realizó un recorrido por el
barrio y pudo constatar que actualmente si bien el agua bajó por completo,
muchas de las viviendas precarias que se alzan en la zona están en malas
condiciones. Algunas, incluso, fueron quemadas mientras que otras, según
comentaron los mismos habitantes, fueron saqueadas.
Machimbre, madera, bolsas de residuos, cartones e incluso un
capó que otrora perteneciera a un automóvil son los elementos utilizados para
la elaboración de las viviendas utilizadas por las 16 familias del Caridi.
Otro factor que dificulta el retorno al lugar es la
cuantiosa cantidad de basura que se ha ido acumulando. Juguetes rotos, ropas
añejas, incontables botellas plásticas y bolsas de residuos se entremezclan con
el barro seco convirtiendo al lugar en un criadero de enfermedades. Sumados al
frío que actualmente azota a la ciudad, impiden que los damnificados puedan
volver.
En este sentido y luego de que lograran un acuerdo con
Defensa Civil, los afectados por la crecida del río permanecerán en el
establecimiento educativo mientras comienzan los preparativos para la
edificación de sus viviendas. El punto anterior es muy importante ya que era el
objetivo principal de las familias del barrio Caridi, ya que como habían expresado
en diversas oportunidades a este medio, no iban a dejar las aulas hasta tener
una respuesta favorable ante su problemática habitacional.
El viernes y luego que se oficiará una reunión entre el
titular de Defensa Civil y los vecinos, se acordó que hoy iniciarían los
primeros trabajos en el barrio. Concretamente, personal de Vialidad
inspeccionaría el terreno acompañado de un delegado barrial escogido para tal
ocasión.
Posteriormente y ya con la construcción de las viviendas en
marcha, se intentará dotar al lugar de agua potable y luz eléctrica. Además uno
de los pedidos más urgentes de las familias afectadas era la posibilidad de
contar con baños propios. Sobre todo, hicieron principal hincapié en la salud
de sus hijos, más en esta época del año.
Actualmente las 48 personas que siguen refugiadas mantienen
su postura de no abandonar la escuela ya que aseguraron recibir amenazas por
parte de sus vecinos.
En este sentido, la semana pasada dos casillas fueron
quemadas. Al respecto varias de las madres aseguraron que “los bomberos nos
dijeron que no hubo cortocircuito y que fue hecho de forma intencional”,
aseveraron indignadas.
También afirmaron que desde que son foco de atención tanto
de los funcionarios como de los medios de comunicación les ha llovido
intimidaciones. “La gente que vive del otro lado nos dicen siempre que van a
robarnos nuestras maderas, chapas y lo que nos quede en las casillas”, relató
una de las afectadas.
Cabe destacar que muchas de las familias sufrieron pérdidas
materiales que se extendieron a electrodomésticos como heladeras o, incluso,
armarios llenos de ropa.
Si bien el agua bajó prácticamente en su totalidad, la zona
donde anteriormente vivían se halla en condiciones poco aptas para regresar. En
tal sentido desde la mañana de hoy personal de Vialidad estará recorriendo la
zona a fin de preparar el terreno para las futuras casas.
Tomado de el litoral de ctes ar
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