sábado, 24 de agosto de 2013

AUTOS Y CASAS RODANTES EN EEUU COMO VIVIENDAS, en aumento

 Más familias sin hogar viven sobre ruedas en Los Ángeles
Crece el número de familias que viven en autos o casas rodantes en Los Ángeles, y también los peligros que enfrentan
María Garibay muestra los daños a su casa rodante luego de un ataque perpetrado por presuntos pandilleros.
Foto: La OpiniónCiro César
Por:
Virginia Gaglianone / Aug 24, 2013 9:00 am ESTMaría Garibay vive con su esposo Ramón y sus tres perros en una casa rodante. Cuatro meses atrás, sin saberlo, estacionó su "hogar" en el barrio equivocado y fue víctima de un ataque que casi le cuesta la vida.
"Por mucho tiempo estuvimos parqueados en la calle Paxton, al lado del Parque Ritchie Valens, de Pacoima, sin molestar a nadie", recordó la oriunda de Michoacán. En abril de este año, un hombre se acercó a su hogar y la atacó, golpeándole la cara y rompiendo todas las ventanas de la casa rodante.
Garbay y su esposo forman parte de los Hidden Homeless o 'Personas escondidas sin hogar', que no tienen vivienda, pero que, en lugar de vivir en las calles a la intemperie, se refugian en vehículos, jardines o garajes.
Jason Mandell, director de Asuntos Públicos de United Way, Los Ángeles, explica que los Hidden Homeless forman parte de una población en crecimiento en el condado de Los Ángeles, donde existen en la actualidad 18 mil personas en esa condición.
"Su situación es tan traumática como la de aquellos que viven en la calle. No tienen vivienda, ni recursos", indicó.
Pero además de eso, las personas que viven en casas rodantes o en sus autos enfrentan una serie de peligros como el ataque que enfrentó Garibay y su esposo.
"Primero se nos acercó un chamaquito como de 9 años diciéndonos que este era su barrio, que ellos eran 'Pacas' y que nos iban a correr. Al rato, volvió con un hombre de cómo 50 años, que fue quien me atacó", recordó Garibay. Los "Pacas" son miembros de una pandilla hispana de Pacoima.
El atacante, quien fue luego identificado como Juan Carlos Estrada, tenía antecedentes criminales y dos arrestos previos.
"Yo lo ví agacharse, y creí que se le había caído algo, pero al levantarse, el hombre sacó un machete que llevaba atrás y me golpeó", contó. El agresor regresó más tarde con más hombres, portando un cuchillo y un arma y persiguieron a su marido, tratando de atacarlo. Tres de los cuatro agresores fueron detenidos.
"Hasta que nos atacaron, nunca había sentido miedo de vivir en el trailito, pero ahora todo me asusta y el frío entra por las ventanillas", dijo Garibay.
Dos años atrás, Garibay había sido declarada 92% discapacitada, debido a serios daños cervicales y lumbares que hacen que necesite un bastón para caminar. Debido a su precaria condición de salud, Garibay no pudo defenderse del ataque.
La pareja aún no ha podido conseguir el dinero para reparar su Dodge modelo 1977, al que llaman hogar.
"Si bien las personas que nos atacaron están en la cárcel, nunca pagaron por las ventanas que rompieron", dijo Garibay, quien ahora teme la llegada de la temporada de lluvias. "Siempre hay alguien que nos quiere correr ", recordó.
Entre 2009 y 2011, aumentó un 66% el número de personas viviendo en casas rodantes en los valles de San Fernando y Santa Clarita.
Aquellos en la misma situación de Garibay pueden llamar al 211 y pedir ayuda e información.
Fuente: Autoridad de Servicios para Personas sin Vivienda de Los Ángeles.

TOMADO DE LA OPINIÓN DE CALIFORNIA EEUU 

No hay comentarios: