La subida en más de 2ºC de la temperatura media del río
Mackenzie afectará al clima mundial
Julio César Rivas
Las corrientes oceánicas dependen en gran medida de lo
que pasa en la desembocadura del Mackenzie, cuando sus aguas se mezclan con las
del Ártico.
Un grupo de expertos internacionales ha lanzado la voz de
alarma sobre la situación del río Mackenzie, uno de los mayores del mundo, y
las graves consecuencias que tendrán para el clima mundial los cambios que está
experimentando.
El río Mackenzie está considerado, por su ecosistema,
el «Amazonas del Norte» o el «Serengueti americano»
Científicos de Canadá, Estados Unidos y Reino Unido, a
instancias del Foro Rosenberg sobre Políticas del Agua, han dado a conocer un
informe en el que advierten de que la cuenca del Mackenzie se encuentra en
peligro por el cambio climático y el desarrollo industrial, lo que puede tener
consecuencias globales.
El profesor Henry Vaux, presidente del Foro Rosenberg, ha
asegurado que la temperatura media de la cuenca del Mackenzie ya ha aumentado
más de 2 grados centígrados, la cifra acordada por la comunidad internacional
como el límite que no se debería rebasar para luchar contra el cambio
climático.
«La preocupación es que la combinación de un desarrollo
desequilibrado junto con el cambio climático van a hacer de la cuenca del
Mackenzie menos resistente y más inestable. La cuenca del Mackenzie supone un
recurso continental que proporciona beneficios a pueblos que están en puntos
muy alejados del norte de Canadá, ya sea mediante aves migratorias, la
moderación del clima o las corrientes oceánicas. Las corrientes dependen en
gran medida de lo que pasa en la desembocadura del Mackenzie, cuando sus aguas
se mezclan con las del océano Ártico»,
reconoce Vaux.
En la actualidad, el Mackenzie, que tiene una longitud de
casi 1.800 kilómetros, deposita 10,3 millones de litros de agua en el océano
Ártico cada segundo, y 100 millones de toneladas de sedimentos al año.
Permafrost
«Sabemos que el clima, al menos en el hemisferio norte, está
determinado parcialmente por las diferencias en la temperatura entre el ecuador
y las latitudes más septentrionales. Las diferencias están disminuyendo, lo que
tendrá implicaciones no solo en el clima de América sino en el de todo el
mundo. En parte está relacionado con la desaparición de la cubierta de hielo
del Ártico, y, según ésta desaparece, menos energía es reflejada al espacio y
más es absorbida por las aguas. Un mecanismo que está haciendo que las
temperaturas del Ártico aumenten»,
subraya el profesor.
La otra parte de la ecuación es que la cuenca del Mackenzie
modera el clima al capturar centenares de millones de gases de efecto
invernadero (GEI) en el permafrost, la capa de la tierra que permanece siempre
congelada.
En la cuenca del Mackenzie, la desaparición del permafrost
supondrá la liberación de «cantidades masivas de metano», un GEI que tiene 21
veces más potencial por molécula que el dióxido de carbono.
Petróleo
Para añadir más presión, parte de la cuenca del Mackenzie se
encuentra en la zona de arenas bituminosas de Canadá, una región que se calcula
contiene las terceras mayores reservas de petróleo del mundo, y que Ottawa
quiere convertir en el motor del futuro desarrollo económico del país.
Los yacimientos de las arenas bituminosas ya proporcionan a
Canadá una de sus principales fuentes de ingresos, pero el continuado
desarrollo de estos recursos presenta un considerable peligro para la cuenca
del Mackenzie.
Los científicos han destacado en su informe que un derrame
de petróleo, o de productos tóxicos derivados de la extracción del crudo,
tendría consecuencias desastrosas para la región, que ha sido comparada con el
Serengueti africano por su ecosistema.
Según el texto, la ruptura en invierno de una balsa de
residuos de metales pesados, como la que se produjo en 1998 en la localidad
española de Aznalcollar, «sería casi imposible de sanear o limpiar».
Por ello, solicitan que las empresas petrolíferas depositen
«sustanciales fianzas» para explotar los recursos naturales en la cuenca del
río Mackenzie, con el fin de cubrir los costes de limpieza o recuperación.
Fuente: ABC
enviado por ST
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