Dilma Rousseff y los cuatro caminos para o nuevo Código Forestal
André Gonçalves
Presionada por los ruralistas y ambientalistas, la Presidenta tiene hasta el próximo día 25 de mayo próximo para realizar cambios en el texto aprobado en abril.
A 12 días de la fecha final para la sanción de la ley que se refiere al Código Forestal, la Presidente Dilma Rousseff está en una encrucijada. Presionada por ruralistas y ambientalistas y en vísperas de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Rio+20), que se celebrará entre los días 13 y 22 de junio en Rio de Janeiro, ella trabaja con cuatro opciones. La tendencia es que la opción definitiva sea escogida a lo largo de esta semana y negociada con la base aliada del gobierno en el Congreso Nacional.
Márgenes de ríos
La principal controversia gira en torno a las normas de recuperación de las de las tierras degradadas en áreas de Preservación Permanente (APPs) en las márgenes de los ríos. Durante la votación final de la propuesta en el pleno de la Cámara de Diputados, el 25 de abril, fueron establecidas reglas sólo para ríos con hasta diez metros de ancho. En tales casos, será necesario la recomposición de 15 metros de vegetación ciliar a ambos lados de las llamadas "áreas consolidadas” – zonas de APPs explotadas por actividades agro-silvo-pastoril, de ecoturismo y turismo rural hasta el 22 de julio de 2008.
El texto generó un vacío para los ríos mayores, que sería llenado posteriormente en base a la consideración de cada caso, por los estados y la Unión, dentro de los programas de regularización ambiental. Este, sin embargo, no era el deseo del Palacio do Planalto. O gobierno defiende que, para los ríos mayores de 10 metros, la recuperación sea de la mitad de la anchura, dentro de un parámetro mínimo de 30 metros de área recompuesta y un máximo de 100 metros. Aún así, hay dudas sobre cuál será el camino escogido por Dilma para revertir o suavizar la decisión del Congreso.
Comprenda cuáles son las opciones:
Ambientalistas
Derribar todo el texto aprobado por los Diputados
Ya antes de la votación final sobre el texto remitido para la sanción, ambientalistas ya se movilizaban en redes sociales con el lema "¡Veta todo, Dilma!". La campaña adquirió fuerza y alcanzó las calles durante la "La virada [Festival] cultural” de Sao Paulo, el fin de semana. En la tarde del martes pasado, activistas de Greenpeace lanzaron un láser de luz verde sobre las dos torres del Congreso Nacional con el mensaje en inglés "New Forest" (Nuevo Código Forestal) al lado de "Veta Dilma".
Si Dilma veta cualquier propuesta aprobada en abril, continúa vigente el actual código forestal, de 1965. Con ello, serían enterrados otros cambios combatidos por ambientalistas, además de la cuestión de las márgenes de los ríos. Entre ellos, el que hace caso omiso de apicuns y salados (*) como Áreas de Protección Permanente (APP) y que, en la práctica, permite la producción de camarón en estos lugares. Otra polémica es en cuanto a la inclusión de áreas de protección permanente para el cálculo de la reserva legal (área de bosque que debe ser conservada dentro de las propiedades rurales).
"No puede tener la misma base de apoyo el ruido de la motosierra y el canto del uirapuru (**). Ahora, lo que falta es que ella [Dilma] use su poder de veto o transija con lo que está puesto [como ley]. Ha llegado la hora de la verdad. Veta, Dilma. Veta todo, no a medias”, escribió la candidata derrotada la Presidencia en las elecciones de 2010, Marina Silva, en un artículo publicado por Folha de S. Paulo
Ruralistas
Dejar el texto tal como está y posteriormente hacer cambios complementarios.
Si elige sanción completa del texto aprobado por el Congreso, Dilma todavía podrá realizar cambios en el futuro por su propia iniciativa. La Presidente podría, por ejemplo, proponer cambios adicionales al artículo 61 (que se ocupa de las APPs en las márgenes de los ríos). Esto podría hacerse por medio de una ‘medida provisional’ (MP) o un proyecto de ley elaborado por el poder ejecutivo.
La decisión sería cómoda porque le evitaría desgaste con los ruralistas y el posible rechazo de los vetos hechos por la Presidente por parte del Congreso. "Dilma tiene el poder de veto y nosotros de derribar el veto", dijo el congresista paranaense Abelardo Lupion (DEM), uno de los líderes de la bancada ruralista en la Cámara, un día después de la aprobación del el proyecto por los diputados, mes pasado.
Así como los ambientalistas que sostienen el veto total, diversas organizaciones de productores rurales también se han movilizado en internet con campañas a favor de la sanción completa. " Dilma! Vetar es castigar al Brasil que produce ", dice el lema de la Federación de Agricultura del Estado de Paraná (Faep).
"Se pelea mucho por las APPs, pero se olvida del principal punto del código, que es la definición de un marco regulatorio adecuado”, advierte el coordinador del medio ambiente de la Organización de las Cooperativas del Estado de Paraná (Ocepar), Silvio Krinski.
Veto parcial 1
Vetar todos los cambios sobre deforestación del pasado
Otra solución para tratar de recuperar el acuerdo construido por el Gobierno en el Senado (y más tarde deshecho en la cámara de diputados) es vetar todo el capítulo 13 de la propuesta enviada para ratificación del Ejecutivo. El trecho se ocupa de las disposiciones transitorias (referidas a la deforestación efectuada en el pasado) y se compone de nueve artículos (de 59 a 68). La medida afectaría la elaboración de los programas de regularización ambiental (PRAs), que son fundamentales para las definiciones de todo tipo de APPs y reservas legales en las llamadas "áreas consolidadas". La propuesta tiene como principal sustentante a la Ministra de Medio Ambiente, Izabella Teixeira.
Senadores oficialistas favorables a esta idea ya comenzaron a movilizarse la semana pasada. El miércoles, los presidentes de las cuatro comisiones permanentes del Senado, formaron un grupo para negociar con la Casa Civil y la Cámara de Diputados, una solución política para el caso. El plan consiste en aprobar con carácter de urgencia el proyecto de ley del Senado 123/2012, que ya está en trámite, para reemplazar el capítulo 13.
"Para algunos juristas, la falta de normas para las áreas consolidadas en ríos con más de 10 metros puede conducir a la interpretación que el propietario debería hacer una recuperación completa de la aplicación”, dijo el Presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Rodrigo Rollemberg (PSB-DF), justificando la necesidad de una nueva ley. El proyecto también puede ser adoptado, si Dilma veta sólo artículo 61.
Veto parcial 2
Detener solo los cambios sobre recomposición de los márgenes de los ríos
La cuestión de las Áreas de Protección Permanente (PPA) de los márgenes de ríos, pone el Gobierno y a la bancada ruralista en la Cámara de Diputados en pie de guerra desde que la primera versión del Código Forestal fue aprobada por los diputados, hace un año. En la época, una maniobra dirigida por PMDB retiró del Ejecutivo federal el derecho de definir por decreto cuales APPs de los ríos ya deforestadas debían ser recompuestas. Más tarde, un acuerdo en el Senado restableció con más claridad cuantos metros de conservación [en ambas márgenes] son considerados necesarios por el Gobierno.
En la nueva discusión en la Cámara, sin embargo, los ruralistas cambiaron nuevamente en el texto, anulando algunos de los cambios realizados por el Senado. Ahora, el camino más corto para resolver la cuestión de APPs en las márgenes de los ríos es vetar solamente la parte final de texto remitido para promulgación, que detalla el problema. Procediendo así, Dilma vetaría sólo un artículo, (número 61) dentro de un universo de 84. La decisión crearía un vacío que sería probablemente llenado con ‘una medida provisional (MP). La ventaja de la MP es que tendría vigencia inmediata, pero el riesgo para el Gobierno es que tal medida podría ser anulada posteriormente por el Congreso Nacional.
NdT.:
(*) Áreas de suelos salinos adyacentes a manglares.
(**) Pájaro
[Traducción: Ricardo Zúniga]
enviado en red FOROBA
André Gonçalves
Presionada por los ruralistas y ambientalistas, la Presidenta tiene hasta el próximo día 25 de mayo próximo para realizar cambios en el texto aprobado en abril.
A 12 días de la fecha final para la sanción de la ley que se refiere al Código Forestal, la Presidente Dilma Rousseff está en una encrucijada. Presionada por ruralistas y ambientalistas y en vísperas de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Rio+20), que se celebrará entre los días 13 y 22 de junio en Rio de Janeiro, ella trabaja con cuatro opciones. La tendencia es que la opción definitiva sea escogida a lo largo de esta semana y negociada con la base aliada del gobierno en el Congreso Nacional.
Márgenes de ríos
La principal controversia gira en torno a las normas de recuperación de las de las tierras degradadas en áreas de Preservación Permanente (APPs) en las márgenes de los ríos. Durante la votación final de la propuesta en el pleno de la Cámara de Diputados, el 25 de abril, fueron establecidas reglas sólo para ríos con hasta diez metros de ancho. En tales casos, será necesario la recomposición de 15 metros de vegetación ciliar a ambos lados de las llamadas "áreas consolidadas” – zonas de APPs explotadas por actividades agro-silvo-pastoril, de ecoturismo y turismo rural hasta el 22 de julio de 2008.
El texto generó un vacío para los ríos mayores, que sería llenado posteriormente en base a la consideración de cada caso, por los estados y la Unión, dentro de los programas de regularización ambiental. Este, sin embargo, no era el deseo del Palacio do Planalto. O gobierno defiende que, para los ríos mayores de 10 metros, la recuperación sea de la mitad de la anchura, dentro de un parámetro mínimo de 30 metros de área recompuesta y un máximo de 100 metros. Aún así, hay dudas sobre cuál será el camino escogido por Dilma para revertir o suavizar la decisión del Congreso.
Comprenda cuáles son las opciones:
Ambientalistas
Derribar todo el texto aprobado por los Diputados
Ya antes de la votación final sobre el texto remitido para la sanción, ambientalistas ya se movilizaban en redes sociales con el lema "¡Veta todo, Dilma!". La campaña adquirió fuerza y alcanzó las calles durante la "La virada [Festival] cultural” de Sao Paulo, el fin de semana. En la tarde del martes pasado, activistas de Greenpeace lanzaron un láser de luz verde sobre las dos torres del Congreso Nacional con el mensaje en inglés "New Forest" (Nuevo Código Forestal) al lado de "Veta Dilma".
Si Dilma veta cualquier propuesta aprobada en abril, continúa vigente el actual código forestal, de 1965. Con ello, serían enterrados otros cambios combatidos por ambientalistas, además de la cuestión de las márgenes de los ríos. Entre ellos, el que hace caso omiso de apicuns y salados (*) como Áreas de Protección Permanente (APP) y que, en la práctica, permite la producción de camarón en estos lugares. Otra polémica es en cuanto a la inclusión de áreas de protección permanente para el cálculo de la reserva legal (área de bosque que debe ser conservada dentro de las propiedades rurales).
"No puede tener la misma base de apoyo el ruido de la motosierra y el canto del uirapuru (**). Ahora, lo que falta es que ella [Dilma] use su poder de veto o transija con lo que está puesto [como ley]. Ha llegado la hora de la verdad. Veta, Dilma. Veta todo, no a medias”, escribió la candidata derrotada la Presidencia en las elecciones de 2010, Marina Silva, en un artículo publicado por Folha de S. Paulo
Ruralistas
Dejar el texto tal como está y posteriormente hacer cambios complementarios.
Si elige sanción completa del texto aprobado por el Congreso, Dilma todavía podrá realizar cambios en el futuro por su propia iniciativa. La Presidente podría, por ejemplo, proponer cambios adicionales al artículo 61 (que se ocupa de las APPs en las márgenes de los ríos). Esto podría hacerse por medio de una ‘medida provisional’ (MP) o un proyecto de ley elaborado por el poder ejecutivo.
La decisión sería cómoda porque le evitaría desgaste con los ruralistas y el posible rechazo de los vetos hechos por la Presidente por parte del Congreso. "Dilma tiene el poder de veto y nosotros de derribar el veto", dijo el congresista paranaense Abelardo Lupion (DEM), uno de los líderes de la bancada ruralista en la Cámara, un día después de la aprobación del el proyecto por los diputados, mes pasado.
Así como los ambientalistas que sostienen el veto total, diversas organizaciones de productores rurales también se han movilizado en internet con campañas a favor de la sanción completa. " Dilma! Vetar es castigar al Brasil que produce ", dice el lema de la Federación de Agricultura del Estado de Paraná (Faep).
"Se pelea mucho por las APPs, pero se olvida del principal punto del código, que es la definición de un marco regulatorio adecuado”, advierte el coordinador del medio ambiente de la Organización de las Cooperativas del Estado de Paraná (Ocepar), Silvio Krinski.
Veto parcial 1
Vetar todos los cambios sobre deforestación del pasado
Otra solución para tratar de recuperar el acuerdo construido por el Gobierno en el Senado (y más tarde deshecho en la cámara de diputados) es vetar todo el capítulo 13 de la propuesta enviada para ratificación del Ejecutivo. El trecho se ocupa de las disposiciones transitorias (referidas a la deforestación efectuada en el pasado) y se compone de nueve artículos (de 59 a 68). La medida afectaría la elaboración de los programas de regularización ambiental (PRAs), que son fundamentales para las definiciones de todo tipo de APPs y reservas legales en las llamadas "áreas consolidadas". La propuesta tiene como principal sustentante a la Ministra de Medio Ambiente, Izabella Teixeira.
Senadores oficialistas favorables a esta idea ya comenzaron a movilizarse la semana pasada. El miércoles, los presidentes de las cuatro comisiones permanentes del Senado, formaron un grupo para negociar con la Casa Civil y la Cámara de Diputados, una solución política para el caso. El plan consiste en aprobar con carácter de urgencia el proyecto de ley del Senado 123/2012, que ya está en trámite, para reemplazar el capítulo 13.
"Para algunos juristas, la falta de normas para las áreas consolidadas en ríos con más de 10 metros puede conducir a la interpretación que el propietario debería hacer una recuperación completa de la aplicación”, dijo el Presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Rodrigo Rollemberg (PSB-DF), justificando la necesidad de una nueva ley. El proyecto también puede ser adoptado, si Dilma veta sólo artículo 61.
Veto parcial 2
Detener solo los cambios sobre recomposición de los márgenes de los ríos
La cuestión de las Áreas de Protección Permanente (PPA) de los márgenes de ríos, pone el Gobierno y a la bancada ruralista en la Cámara de Diputados en pie de guerra desde que la primera versión del Código Forestal fue aprobada por los diputados, hace un año. En la época, una maniobra dirigida por PMDB retiró del Ejecutivo federal el derecho de definir por decreto cuales APPs de los ríos ya deforestadas debían ser recompuestas. Más tarde, un acuerdo en el Senado restableció con más claridad cuantos metros de conservación [en ambas márgenes] son considerados necesarios por el Gobierno.
En la nueva discusión en la Cámara, sin embargo, los ruralistas cambiaron nuevamente en el texto, anulando algunos de los cambios realizados por el Senado. Ahora, el camino más corto para resolver la cuestión de APPs en las márgenes de los ríos es vetar solamente la parte final de texto remitido para promulgación, que detalla el problema. Procediendo así, Dilma vetaría sólo un artículo, (número 61) dentro de un universo de 84. La decisión crearía un vacío que sería probablemente llenado con ‘una medida provisional (MP). La ventaja de la MP es que tendría vigencia inmediata, pero el riesgo para el Gobierno es que tal medida podría ser anulada posteriormente por el Congreso Nacional.
NdT.:
(*) Áreas de suelos salinos adyacentes a manglares.
(**) Pájaro
[Traducción: Ricardo Zúniga]
enviado en red FOROBA
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