Especies invasoras
hacen y deshacen El pez león Pterois volitans es de las últimas amenazas en
aguas colombianas del Caribe. Es muy voraz. FOTO SSTOCK
6 especies de mamíferos en el planeta se extinguieron
probablemente por invasores.
No es por exagerar: hoy en la Ciénaga Grande de Santa Marta
las tilapias del Nilo y la roja mandan. Han acabado poblaciones de otros peces.
Lo mismo sucede con la represa de Betania, donde la segunda es reina.
Estos peces no son el único caso. Se cree que la trucha
arcoiris exterminó al capitán de la sabana de Bogotá. La rana toro y el caracol
africano son otros ejemplos de gran voracidad y dispersión.
En el país hay cerca de 581 especies invasoras documentadas.
Sus daños no han sido estudiados.
Ayer una investigación publicada en Biology letters reportó que
las especies invasoras son la segunda causa de extinción de especies en el
mundo a partir del año 1500.
La situación es peor en ambientes cerrados como islas. De
hecho allí se ha dado la mayoría de las extinciones, dijo a EL COLOMBIANO Tim
Blackburn, uno de los autores, de University College London.
Pero el mal no para allí. “Cada vez más estamos viendo que
el problema se está diseminando, con muchas especies continentales amenazadas
de extinción por las invasoras”, agregó.
Aunque la causa principal de extinción se debe a la
sobrexplotación, solo supera por una especie, 125 a 124 la acción de las
invasoras. La mayor parte de las desapariciones se presentó hace mucho tiempo,
pues declarar hoy una especie como extinta no es fácil, explicó el investigador.
Hoy, el número más alto de especies amenazadas por invasoras
se encuentra en Suramérica.
¿Exitosas?
Tal pareciera que las especies nuevas en los distintos
ambientes son exitosas, pero el asunto no es así.
Juan Fernando Díaz Nieto, profesor del Departamento de
Ciencias Biológicas de Eafit y candidato a Ph. D., explicó que “en general el
efecto de cualquier especie invasora, lo resumiría en una palabra: competencia.
La competencia es aquello en lo que se centra la ‘pelea’ entre especies nativas
y aquellas introducidas”.
El efecto final de la competencia entre especies nativas con
las introducidas, continuó, “puede ser el desplazamiento local o total, es
decir, la extinción de la especie más débil en parte de su distribución o la
extinción total (a lo largo de la distribución)”.
No toda invasora es exitosa. “Algunas lo son y son las que
terminan desplazando. Sin embargo puede darse el caso contrario, donde una
especie introducida no tiene un buen desempeño en el nuevo hábitat. Por ejemplo
si trajeras un camello a las tierras altas de los Andes, seguramente no sería
peligro alguno para las poblaciones locales de llamas”.
Una vez establecidas, su control es difícil. Díaz Nieto
estima que lo mejor es evitar la introducción.
En algunos casos, según Blackburn, las invasoras traen
beneficios económicos, por ejemplo las usadas en alimentación. Algunas pueden
servir como control biológico de invasoras más dañinas, pero hay que tener
mucho cuidado.
Hoy, en un mundo que privilegia lo económico, la amenaza
puede acentuarse. Para algunos será letal.
LA INTRODUCCIÓN A NUEVOS AMBIENTES
1 Se estima que 90% de las especies introducidas son
intencionales, las otras accidentales.
2 De las 100 peores especies invasoras, 32 son plantas
terrestres y 4 acuáticas. Hay 1.000 plantas invasoras.
3 El mayor número de extinciones de vertebrados tiene como
causa principal a especies invasoras.
4274 especies de plantas invasoras se han documentado en el
país; al menos 42 presentan alto riesgo.
RAMIRO VELÁSQUEZ GÓMEZ Los temas de la ciencia, la
astronomía y el medio ambiente con énfasis en cambio climático son mis campos
de acción periodística. Con vocación por el mundo de los pequeños felinos y la
defensa animal. TOMADO DE EL COLOMBIANO
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