RÍO DE JANEIRO (AFP y ANSA).La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff,
canceló el viaje que
Miles se
concentraron en la Iglesia de la Candelaria, en el centro de Río de Janeiro,
con el plan de marchar hacia el estadio Maracaná, donde se disputó el partido
entre España y Tahití.
La Policía
impedía a usuarios del metro descender en las estaciones cercanas al Maracaná
para evitar que se concentren allí manifestantes, según el diario O Globo, y
solo dejaban pasar a los que exhibían entradas para el partido.
En Recife, más de
50.000 personas ganaron las calles, según la Policía. A medida que la multitud
avanza pacíficamente por el centro de la ciudad, la gente les lanzaba papeles
blancos desde lo alto de los edificios.
Gigantescas
marchas fueron convocadas en unas 100 ciudades y nada presagia el fin de este
movimiento, que carece de liderazgos identificados.
Ayer, algunos
sindicatos, organizaciones de la sociedad civil y partidos políticos –incluido
el gobernante Partido de los Trabajadores– declararon su intención de
participar en las marchas, portando sus banderas.
Las protestas,
que han dejado perplejo al gobierno de Dilma Rousseff y a la clase política en
general, comenzaron exigiendo la revocación del aumento del precio del boleto
de autobús, metro y tren. Pero rápidamente sumaron otros reclamos y denuncias,
como los 15.000 millones de dólares de dinero de los contribuyentes destinados
a la Copa Confederaciones y el Mundial 2014.
Los manifestantes
expresan su indignación por el aumento del costo de vida y la mala calidad de
los servicios. También denuncian la corrupción arraigada en la política
brasileña y reclaman más inversión en educación, salud y seguridad.
Al menos 34
personas resultaron heridas en la represión policial en Río de Janeiro contra
manifestantes. Estos incendiaron puestos policiales de atención al turista en
la Avenida Presidente Vargas.
En Brasilia un
grupo atacó el Ministerio de Relaciones Exteriores con objetos en llamas y
causó destrozos.
TOMADO DE ABC DE
PARAGUAYNota : hace unos años era feyaoda y fútbol , en ves de pan y circo , ahora los reclamos se han ampliado
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