Inundaciones
En cuanto al tema de las lluvias torrenciales y desbordes de
ríos que mantienen inundada la mitad del territorio, monseñor Aparicio resaltó
la preocupación que esta situación provoca entre los obispos, puesto que miles
de familias han quedado sin techo, sin cosechas, e incluso han perdido a sus
seres queridos. Asimismo, exhorta a la solidaridad de todos, pero de manera muy
particular solicita el trabajo de los gobernantes.
“Especialmente las autoridades en todos los niveles del
Estado Plurinacional están llamados a ser sensibles al dolor de tantos
compatriotas, ya que ellos administran lo que es de todos y tienen en sus manos
el poder de decidir”, aseguró haciendo alusión a que lo primero es aliviar la
necesidad de los que se encuentran en situación de desastre.
Tomado de los tiempos de Bolivia
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