Clúster citrícola, la nueva apuesta del agro paisa
25 toneladas por hectárea al año, es la productividad
citrícola en Antioquia. FOTO DONALDO ZULUAGA El potencial de la citricultura en
Antioquia está por aprovechar, según lo afirma Manuel Escobar Quijano,
representante de la Asociación de Citricultores de Colombia (Citricauca),
agremiación que congrega a unos 120 productores del Suroeste antioqueño y el
Norte de Caldas.
Además de la ampliación de la frontera citrícola en
Antioquia, de 6.200 a 20.000 hectáreas en los próximos años, Escobar apuesta
por la conformación de un clúster para el sector, que sirva de modelo para
Colombia y en el que estén vinculados productores, empresas, entidades de apoyo
sanitario e investigación, así como a los gobiernos seccional y locales e
instituciones como el Sena y la Fundación Julio C. Hernández.
Otra iniciativa que procuran impulsar los cultivadores de
cítricos es el establecimiento de una planta de empaque y transformación de
frutas (packing house), para el que se busca un socio estratégico.
“Este es un macroproyecto enfocado en el aprovechamiento de
las segundas y terceras producciones de cítricos para transformarlos en
productos como pulpas, jugos o concentrados, para sacar del mercado las frutas
de menor calidad y lograr una mejor competencia con frutos de primera calidad
en los mercados nacional e internacional”, explica Escobar.
Citricauca ha logrado acercamientos con la gobernación de
Antioquia y la Cámara de Comercio de Medellín para ubicar potenciales aliados
que permitan poner en marchar el proyecto el próximo año.
El complejo tendría una capacidad de procesamiento mayor a
las 100.000 toneladas de cítricos por año, pues además de la fruta de Antioquia
y Caldas se buscaría que por ella pasara la producción del Occidente y del
Pacífico. Se estima que la inversión superaría los cuatro millones de dólares
estaría localizada entre el municipio de La Pintada y el corregimiento
Bolombolo de Venecia, en el Suroeste, e incluso se contempla la zona de Urabá.
A pesar del potencial de los cítricos en este departamento,
sus promotores no intentan que estos sean el reemplazo de la caficultura, pues
su expansión se ha dado aprovechando el terreno dejado por la ganadería. TOMADO
DE EL COLOMBIANO
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