“Logros” que dañan el ambiente Por Claudia Merlos Paraguay
es el sexto productor mundial de soja y
quinto principal exportador mundial de
carne. A pesar de lo grandilocuente que puede sonar esto, no se puede negar que
ambas actividades comprometen seriamente el medio ambiente. ¿Qué se puede
hacer?FOTO Miles de hectáreas de bosques dejaron de existir para dar paso a la
producción mecanizada. Aquí, plantaciones de soja. (Archivo). / ABC “La producción sustentable es una tendencia
mundial (…) no será beneficioso que la producción de Paraguay sea asociada a la
deforestación”
Esta pregunta se hicieron los creadores del proyecto “Green
Commodities”, ya aplicado en otros países del mundo y que espera desarrollarse
en nuestro país con dos rubros emblemáticos: la soja y la carne. El objetivo de
la propuesta es proteger la biodiversidad y las funciones de la eco-región del
Bosque Atlántico del Alto Paraná frente a las amenazas existentes y emergentes
de las prácticas de producción multi-sectorial. Varias organizaciones,
inclusive las del sector público, están involucradas, entre ellas el Programa
de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), cuyo técnico, Eduardo
Allende, explicó los alcances de este proyecto, que tiene una duración de cinco
años. Lo que se busca principalmente es lograr que la expansión de la
actividad, que es una realidad, no comprometa los recursos naturales, como
actualmente lo está haciendo. Pero, ¿por qué los empresarios que no respetan,
lo harán ahora? El experto de las Naciones Unidas explicó que la tendencia
mundial es la “producción verde”, por varios motivos. Primeramente, muchos
países que compran alimentos producidos en esta parte del mundo están ajustando
sus legislaciones para no recibir más producción que cause deforestación o dañe
el medio ambiente, especialmente en Europa. Es decir, si no se cambia la forma
de desarrollo del rubro, se reducirán los mercados. Además, ocurre algo aún más
importante, explicó Allende: “Estamos casi al límite en el uso de los recursos
naturales”. Los proyectistas consideraron que de aquí a tan solo 50 años, la
demanda de alimentos crecerá en gran manera, al mismo tiempo que la población,
mientras que los recursos para producirlos se reducirán considerablemente. Este
es otro motivo por el que se debe optar por la producción amigable con el medio
ambiente. ¿QUÉ SE PRETENDE? El proyecto está en etapa inicial, es decir, la de
establecer los contactos y acordar mesas de diálogo con todos los sectores.
Allende contó que se logró el involucramiento de la Secretaría del Ambiente
(Seam), del Ministerio de Agricultura y Ganadería y de los propios gremios de
la producción y exportadores. Primeramente, concentrarán los esfuerzos en los
departamentos de Alto Paraná, Canindeyú y Amambay, zonas donde predomina la
producción de soja y carne. Los ejes generales que establecen todas las
acciones que se realizarán en el marco del proyecto abordan diferentes
realidades: - El escaso control: aunque existen legislaciones que regulan la
producción en favor del medio ambiente, los controles para que estas se cumplan
son muy débiles. Se pretende construir mayores capacidades de monitoreo de las
violaciones a estas normativas, por ejemplo, dotando de elementos y
herramientas concretas. - Vacíos legales: esto tiene que ver con el anterior
punto. Ni siquiera las propias instituciones tienen claro el alcance de sus
políticas o de las sanciones que se pueden hacer. “Los errores de
interpretación se prestan para que no se cumpla la ley”, comentó Allende. -
Otro eje es trabajar con el sector privado, para que se generen líneas de
financiamiento que motiven la producción sustentable y las buenas prácticas. -
En este sentido, se habla también de que la inversión forestal tenga mayores
beneficios. Se considera lo dicho al inicio: ampliación del mercado en el
mundo. “La producción sustentable es una tendencia mundial (…) No será
beneficioso que la producción de Paraguay sea asociada a la deforestación”,
dijo. - Un componente fuerte del proyecto es el trabajo con los gobiernos
locales, que son los que más cerca están del proceso desde que se prepara la
tierra. LEYES MUERTAS Allende
recordó particularmente la Ley de “Deforestación Cero” que está vigente en
nuestro país. De acuerdo a esta normativa, no se puede arrasar con ningún solo
metro cuadrado de bosque en la región Oriental. Pero esto no se respeta. Son
casi diarias las denuncias de ciudadanos a este diario sobre tráfico de rollos
y devastación de bosques para plantaciones. Hay más leyes muertas para varios
empresarios. Por ejemplo, están prohibidas las plantaciones al costado de las
rutas, o bien en un radio cercano a poblaciones, ya que la utilización de agroquímicos
no debe llegar a los humanos. Sin embargo, esto tampoco se cumple, según ha
denunciado la Federación Nacional Campesina (FNC) en varias oportunidades. Estas
son solamente dos de las situaciones que la Seam y las demás organizaciones
involucradas deberán considerar al llevar adelante la propuesta. “Es un
proyecto bastante ambicioso, pero vemos el problema desde todas las aristas.
Haciendo una mirada holística, es la única forma de abarcar el problema”,
concluyó el representante del PNUD. Los recursos para ello provendrán del Fondo
para el Medio Ambiente Mundial (GEF), más la contrapartida local y fondos de
proyectos complementarios. El avance del proyecto está siendo publicado
constantemente en la fanpage en Facebook: “Paisajes de Producción Verde.
Commoditiers Sustentables”. TOMADO DE ABC DE PARAGUAY
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