Acechados por la basura: Bolivia aún no encuentra el
camino para reducir el impacto
Pañales, papel higiénico, restos de frutas, verduras,
huesos, botellas de plásticos, vidrios rotos y otros elementos, juntos en
la misma bolsa, tirada en una esquina de la ciudad, comienzan a emitir olores
propios de la descomposición de la materia orgánica atrayendo moscas y perros
callejeros hambrientos.
Pronto, a esta bolsa se unen otras 10 bolsas hasta crear una
torre nauseabunda de donde van brotando líquidos que se fusionan al polvo y van
formando, lixiviado, un líquido oscuro y tóxico. Esta escena se da fácilmente
en cualquier lugar del país y a toda hora.
Desde que uno elige comer algo o comprar algún
producto, implícitamente decide sobre los tipos de residuos que genera, pero
también puede definir qué hacer con éstos.
En Bolivia se acumulan un poco más de 5 mil
toneladas de basura al día, de las cuales el 87 por ciento se genera a nivel
urbano y el restante 13 por ciento es de áreas rurales,según datos
diagnósticos del Ministerio del Medio Ambiente.
De la cantidad total, el 60 por ciento es orgánico
un 20 por ciento es material reciclabley el resto son elementos no
recuperables.
[CUADRO]
Lo paradójico es que el material orgánico es el único que
puede volver a la vida en un cien por ciento como abono, sin embargo, al no ser
separado no puede ser procesado y no puede cumplir su ciclo natural.
Debido a que no hay un sistema establecido de gestión
de residuos sólidos o porque simplemente muchos ciudadanos no se
habitúan a separar la basura y optan por juntar todo en una bolsa, la
situación se agrava.
¿Qué pasa con la basura en el país?
Mientras miran cómo un problema menor "desaparece"
de sus vidas, ignoran que es el inicio de algo mucho peor.
Hace unos días en La Paz, se vio sorprendida por el
deslizaminto del relleno sanitario de Alpacoma. Los comunarios bloquearon el
lugar para exigir el cierre y durante 13 días la urbe paceña vio como
crecía la basura en cada esquina de la ciudad. La situación casi desemboca en
una emergencia sanitaria.
Esa situación se réplica en diferentes ciudaddes del país,
muchas incluso no manejan los residuos de manera adecuada
"En Bolivia tenemos 339 municipios, de esos 339
municipios la gran mayoría no cuentan con una disposición adecuada de residuos
sólidos. Contamos con once municipios con rellenos sanitarios en toda la norma.
Hay un porcentaje importante de municipios que cuenta con botaderos controlado
s, 14 municipios y el resto, algo así como 314, han estado utilizando botaderos
a cielo abierto, que son lugares de disposición de basura sin ningún tipo de
tratamiento", señaló el ministrito de Medio Ambiente y Agua, Carlos René
Ortuño, durante una entrevista con el programa No Mentirás, hace unos días.
Ortuño explicó que se está trabajando para cerrar lo
botaderos a cielo abierto, una meta para el año 2025, como parte de
la agenda Patriótica del Bicentenario.
La autoridad manifestó que tras dejar los botaderos ser
pasará a "modalidades de disposición de residuos sólidos de forma
sostenible y responsable. Desde la solución más básica que es contar con los
rellenos sanitarios hasta procesos y plantas clasificadoras, y recuperación de
la basura".
Tarabuco, Villa Abecia, La Paz, Achacachi, Tiwanaku,
Coroico, Sacaba, Huanuni, Uyuni, Villazón y Santa Cruz son los municipios que
cuentan con rellenos sanitario según datos del Ministro.
Las ciudades capitales, que tienen mayor índice
de generación de desechos, se enfrentan a un gran desafío: "poder
adecuar a mecanismos de recolección de la basura y de su disposición
final", aseveró Ortuño.
¿El cierre de K'ara K'ara o un lugar nuevo? La realidad
de Cochabamba
Cochabamba solía ser considerada la ciudad de las flores y
la comida, pero desde hace unos años también es considerada la ciudad más sucia
del país. El aire es el más contaminado de la región, según la Organización
Mundial de la Salud (OMS).
Los viajeros que llegan al aeropuerto Wilstermann tienen el
primer contacto con esta realidad por el olor que emana el río Rocha, lleno de
basura y residuos. Mientras que los que llegan a la terminal de buses, ubicado
en la zona sur, se topan con las calles oscuras por la polución de los
vehículos.
A medida que uno se queda más tiempo en la ciudad se da
cuenta que los basureros siempre rebalsan, que pese a ver durante toda noche a
mujeres limpiando la caótica ciudad, no pasa mucho tiempo para que nuevamente
esté todo cubierto con basura.
La personas tienen el descaro de arrojar por las ventanas de
los autos papeles y bolsas. Mientras otros, incluso, abandonan
en calles alejadas bolsas llenas de desperdicios.
En el año 1987, comenzó a funcionar el botadero de K'ara
K'ara, en predios de la Universidad Mayor de San Simón.
Al inicio fue un sitio para probar compostaje, por lo que
los residuos iban llegando para este fin. Con el tiempo más personas
acudieron para sacar los desechos que se podían vender. Después se levantó
un cementerio y poco a poco se fue loteando el lugar, cuenta la responsable
regional de Swisscontact, Carola Ortuño.
En el municipio de Cercado se producen alrededor de 520
toneladas al día, que es casi la mitad de lo que se genera en el
departamento.
Tras todas estas décadas se determinó el cierre técnico de
K'ara K'ara, su vida útil termina en octubre de esta gestión.
En 2014, la Compañía de Limpieza e Ingeniería Ambiental
(Colina) firmó para realizar el proceso del cierre y otras actividades, que
fueron modificadas a lo largo de las diferentes gestiones de los alcaldes.
¿Adónde irá la basura después del cierre? El jefe de
Residuos de la Alcaldía, Marco Claure, señaló que se trabaja para la concesión
de un vertedero que deberá ser adjudicado hasta finales de este mes.
"Haremos una invitación directa a nueve empresas
nacionales e internacionales que ya mostraron su interés. El principal
requisito es que cuenten con un terreno", apuntó Claure.
Jarka Loma, el único relleno sanitario de Cochabamba
Entre los once rellenos sanitarios que existen en el país
figura Jarka Loma, ubicado en la zona de Lava Lava, a 7 kilómetros de la plaza
principal de Sacaba y a una altura de 2.600 metros.
Después de un área de seguridad de trecientos metros desde
la entrada al relleno, se encuentran emplazadas las oficinas de la empresa de
Gestión de Residuos Sólidos (Geres), que están sobre un área de
recuperación.
"Aproximadamente en estas dos áreas tenemos alrededor
de 180 mil toneladas (de residuos). Estamos hablando que estamos abarcando en
esta primera etapa un área de 2500 metros cuadrados, entonces esa es la
cantidad de residuos que están confinados debajo, pero como verá la diferencia
entre un vertedero o un botadero, la ventaja de relleno sanitario es que una
vez que pasa cinco años uno ya puede colocar algunos árboles y darle vida, eso
es lo que esperamos. La expectativa de Geres es que cuando el relleno sanitario
deje de funcionar en algún momento pues todo sea como esto un parque ecológico
donde la gente pueda venir a hacer actividades deportivas", explica el
gerente de Geres, Cristian Gutiérrez.
En el área de recuperación, la vegetación comenzó a cubrir
la tierra, hay flores, animales y peces. El objetivo de tener fauna es para
monitorear la seguridad del terreno y el agua de los pozos de la zona.
"Nosotros usamos macro celdas, bajo la tierra no habría
ningún tipo de peligro, por el tema que nuestras macroceldas están diseñadas en
base a lo que es obras de ingeniera de resguardo, justamente lo que sí habría
que controlar y seguimos controlando con nuestras piscinas de estabilización y
la piscina de los peces, es el tema del lixiviados, que es el residuo líquido
que se genera por la acumulación de cierto residuo orgánico", manifestó
Gutiérrez.
En Jarka Loma no sólo se entierra los residuos, cuenta con
una planta de compostaje, una planta clasificadora y proyectos industriales a baja
escala.
Pese a que los carros basureros no están adaptados para el
recojo diferenciado de residuos, los trabajadores tienen gangochos colgando del
vehículo donde van depositando papel, plástico y otros materiales que se pueden
reciclar.
Posteriormente, el material pasa a un área donde son
catalogados por el tipo de plástico. Esta tarea es con ayuda de una máquina
semiautomática.
Las bolsas de plástico son procesadas para elaborar macetas.
El proyecto aún tiene ajustes, pero se planea usarlos junto a los plantines que
también crecen en el lugar.
En cuanto a los residuos biodegradables, existen dos
"carros verdes" que recogen de manera diferenciada la materia
orgánica de cuatro distritos, el mercado central y las flores marchitas del
cementerio general de Sacaba,
Todo esto también tiene un proceso de compostaje con el
método Bocashi del cual se obtiene abono que luego es comercializado en bolsas
de 5 kilos.
Dentro de sus proyectos se encuentra un videojuego educativo
para aprender a realizar el compostaje con este método. El lanzamiento se
realizará en unos días.
A estas actividades se suman las visitas guiadas a escolares
y también la recuperación de algunos productos. El lugar cuenta con un par de
motos, una bicicleta y un buggy que fueron reconstruidos con diferentes partes
desechadas.
Santa Cruz, 1.800 toneladas de basura
La noches cruceñas no sólo son para enamorar, es el horario
en el que pasan los carros basureros por la zona El Trompillo. Horas antes, los
vecinos cuelgan sus bolsas de basura en árboles o en canastillos que colocan en
la calle.
Trabajadores de aseo recogen cada uno de los paquetes que
son lanzados a camiones que los compactan.
Los vecinos confiensan que no separan los residuos, que no
tienen la costumbre. Al ver que la basura es depositada en un mismo lugar de
los camiones, los vecinos se cuestionan ¿Para que separar si lo van a juntar en
el carro?
Sin embargo el gerente de Emacruz, Jhonny Bowles,
manifestó a Los Tiempos que se realiza el recojo diferenciado.
"Se cuenta con servicio de recolección diferenciada de
residuos sólidos, es responsabilidad del vecino entregar sus residuos, de forma
diferenciada", aseveró.
La ciudad de Santa Cruz de la Sierra, una de las más grandes
de Bolivia, genera 1800 toneladas de basura diaria.
El relleno sanitario de Normandía, que comenzó sus
operaciones en 1992, tiene una extensión de 57 hectáreas de las cuales 33 son
de fosa para residuos.
"El plazo nominal de vida útil hasta mediados de 2019 y
como margen de seguridad cuenta, además, con un área de emergencia para 18
meses adicionales de relleno sanitario", explica el gerente de Emacruz,
Jhonny Bowles.
En cuanto al nuevo relleno sanitario, se encuentra ubicado a
4 kilómetros de la comunidad de San Miguel de los Junos y hasta la fecha tienen
un 35 por ciento de avance.
"El lugar es un predio expropiado por el municipio de
200 hectáreas, cuenta con un área operativa de 114 hectáreas. La inversión en
esta primera fase de implementación es de 38 millones de bolivianos",
explica Bowles.
Se tiene planificado que se termine de construir el lugar
hasta mayo de este año "contando con un margen de seguridad de 30 días por
las inclemencias meteorológicas", manifiesta el gerente.
¿Qué pasará con el relleno de Normandía? "Luego de
concluido el periodo de monitoreo y mantenimientos post clausura durante un
periodo mínimo de 20 años determinado por la auditoría ambiental, hasta la
total estabilización biológica de las fosas, podrá ser destinado el predio a un
área pública de recreación, como parque urbano protegido", explica.
La Paz encendió la alarma de una emergencia sanitaria
"La basura que se acumulaba día a día en La Paz. era
demasiada, daba un mal aspecto, y el olor era nauseabundo al transitar por las
calles", contó Erika Rada una vecina que vivió los 13 terribles días
que no se tuvo aseo en la urbe paceña.
A mediados de enero, Alpacoma registró un deslizamiento de
una de sus celdas llena con toneladas de residuos. El olor era insportable y
aún se teme que las lluvias arrastren el lixiviado a las fuentes de agua que
existen alrededor.
Ante esto los pobladores del sector bloquearon la
entrada del relleno como medida de presión para su cierre definitivo.
El lunes los alcaldes de La Paz y Achocalla, con
intermediación del presidente Evo Morales, lograron acordar el cierre del
relleno, la auditora y el funcionamiento del relleno por dos meses más, tiempo
en que el municipio deberá ver dónde desplazar el relleno.
El martes, las Fuerzas Armadas salieron a las calles para
recoger la basura de las calles.
El alcalde de La Paz, Luis Revilla, manifestó, citado por
Página Siete, que hasta le fecha se recogieron 1600 toneladas de basura.
La empresa Tersa, que se dedica a administrar el relleno,
fue sancionada con 970 mil bolivianos. Y dejó de ser un referente de relleno
sanitario.
Aún se realizan los estudios para determinar el impacto
ambiental del incidente en Alpacoma, que en 2016 fue catalogado como uno de los
mejores de la región en cuanto al tratamiento y reutilización de residuos
tóxicos.
Según una nota de Página Siete el relleno sanitario de
Alpacoma ya contaba con una planta piloto de clasificación de residuos
inorgánicos, botellas PET y otros plásticos reciclados y materia prima para la
producción de láminas de plastimadera con las que se fabrica mobiliario
escolar.
Áreas contaminadas
"No solo los botaderos, sino también los
rellenos, representan una complicación a futuro. Son como una bomba
de tiempo porque como no se ha manejado técnicamente (...) Son lugares
donde hay alta contaminación. A la naturaleza hay que darle el tiempo necesario
para restablecerse, pero si es un lugar de alta contaminación ni apoyando
con un cierre técnico vamos a poder limpiar totalmente. Se va a afectar el
agua, por ejemplo, la vida misma alrededor, y hay que hacer un seguimiento por
años".
Responsable regional de Swisscontact, Carola
Ortuño.
Voluntad ciudadana
La decisión de cómo tratar la basura y la cantidad que se
genera está en cada persona, y entre menos sean los desechos que lleguen a
los botaderos y rellenos, ayuda a disminuir la contaminación.
Desde el 2007 hasta el año pasado, Swisscontact impulsó el
programa Ecovecindarios, que trataba de reeducar a las personas en cuanto al
manejo de los residuos del hogar. El programa consistía en tres fases:
empoderamiento ciudadano, fortalecimiento al sistema público y fortalecimiento
de negocios verdes.
Los vecinos de los distritos 3,4,2 y 1 lograron grandes
resultados, cada quien adaptando a su realidad el propósito de reducir y
reciclar.
Los vecinos comprendieron la utilidad de separar el material
y, en algunos, llegaron a ganar dinero vendiendo los reciclables. Ese dinero
posteriormente fue invertido en las necesidades de la OTB.
LA encargada regional de Swisscontac, Carola, Ortuño asevera
que el movimiento vecinal son actores de cambio, sin embargo, es un proceso
particular en cada zona de la ciudad por lo que se debe trabajar de diferente
manera en cada sector.
Hacernos cargo de la basura que producimos en nuestros
hogares es la mejor forma de reducir el impacto de esta problemática mundial
que acecha peligrosamente la existencia a los seres vivos, aunque el tiempo no
es un factor a favor.
¿Se puede en Bolivia asumir acciones para detener un
inminente daño medioambiental?
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