“Los plaguicidas llegan a las personas por medio de los
alimentos rociados, las partículas transportadas por el viento y el
agua”. Por Vanesa Rosales de la Quintana.
Por Vanesa Rosales de la Quintana*
El Glifosato es el plaguicida de mayor uso en Argentina y en
el mundo. Es un herbicida sistémico, no selectivo y de amplio espectro
que actúa inhibiendo competitivamente a la enzima “EPSPS” de plantas y
microorganismos, eliminando malezas y plagas de todo tipo.
A lo largo de los años las fumigaciones y los criterios de
seguridad se basaron en los efectos agudos. Al aplicar plaguicidas a los
cultivos solo se tenían en cuenta las dosis letales, es decir las dosis con las
que se puede matar directamente a una persona. Pero los plaguicidas generan un
efecto a largo plazo debido a la exposición crónica a bajas dosis de las
partículas del producto.
Los plaguicidas llegan a las personas por medio de los
alimentos rociados, las partículas transportadas por el viento y el agua.
Persisten en el tiempo, en el ambiente y en las personas. El SENASA (Servicio
Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) halló 52 tipos de pesticidas en
frutas, hortalizas y verduras basándose en controles que realizaron en los
últimos 5 años en zonas urbanas.
De los pesticidas encontrados 2 están prohibidos (DDT y
Endosulfan), 4 no están autorizados para usar (Diazinon, Aldicarb, Acrinatrina
y Hexaconazole) y 2 fueron prohibidos por Resolución 149/2016 del SENASA el 1
de Julio de 2016 (Metil Azinfos y Metamidofos). Los encontrados en mayor
presencia fueron el Clorpirifos, Deltametrina, Cipermetrina, Endosulfan,
Lambdacialotrina, Imidacloprid, Carbendazim, Pyremethanil y Diclorvos.
Los resultados confirman la gran exposición a la cual
estamos sometidos todos. Con los años, la exposición da lugar a enfermedades
endocrinas, neurodegenerativas, alteraciones del desarrollo embrionario y al
cáncer.
A nivel general los plaguicidas actúan como disruptores
endocrinos que alteran la síntesis, liberación, transporte, metabolismo, acción
o eliminación de las hormonas naturales, modificando el funcionamiento del
sistema hormonal humano. Por efecto símil estrógeno alteran los procesos
normales de reproducción y desarrollo, es por eso que los efectos se
manifiestan con más severidad en el desarrollo embrionario produciendo
malformaciones y abortos.
En el hombre está relacionado con cáncer de testículo y
próstata, disminución de los niveles de testosterona y de la cantidad de
esperma. En la mujer se relaciona con cáncer de mama, ovario y útero.
En el año 2017 se emplearon 3,8 millones de toneladas de
agrotóxicos en el país. Argentina lidera el ranking mundial de litros de
agrotóxicos por habitante. Se estima que hay 12 millones de personas
expuestas habitacionalmente a pesticidas en el país. Diversos son los estudios
a lo largo del mundo que han demostrado su nocividad sobre la salud.
El laboratorio de Biogeoquímica y Química Ambiental de
la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la UNLP, junto con el Defensor del
Pueblo de la Provincia de Buenos Aires, han llevado a cabo un relevamiento
sobre la utilización de agroquímicos en la provincia de Buenos Aires. Para el
mismo se obtuvieron muestras de suelos y aire colectados en toda la Provincia
de Buenos Aires. Entre los plaguicidas encontrados, se confirmó la
predominancia de Endosulfanes y de compuestos prohibidos como Dieldrin y DDTs
en la zona hortícola.
El estudio asevera que los plaguicidas aplicados en el campo
llegan a las ciudades aledañas, con un fuerte incremento durante el verano
debido a las mayores fumigaciones en esa época del año. Las concentraciones de
plaguicidas se disparan hasta 25 veces, en mayor medida se observa el
incremento de Endosulfanes y Clorpirifos (máximos de 100-500 veces) adquiriendo
niveles elevados, similares a los reportados para la India, lo que refleja el
impacto de las aplicaciones locales.
La relación entre pesticidas y Cáncer ha sido documentada en el estudio multicéntrico titulado "Valoración de la exposición a plaguicidas en cultivos extensivos de la argentina y su potencial impacto sobre la salud" financiado por el Ministerio de Salud Argentino en el año 2014.
La relación entre pesticidas y Cáncer ha sido documentada en el estudio multicéntrico titulado "Valoración de la exposición a plaguicidas en cultivos extensivos de la argentina y su potencial impacto sobre la salud" financiado por el Ministerio de Salud Argentino en el año 2014.
Los resultados obtenidos dan cuenta de una asociación
positiva entre la intensidad de exposición (evaluada a través del Índice de
Exposición Acumulada a Plaguicidas- IEP) y la mortalidad por cáncer total en
varones, y cáncer de mama en mujeres. El área pampeana del país agrupa los IEP
mayores al promedio nacional. Los mayores Índices de Impacto Ambiental
Total (IIAT) fueron para los plaguicidas 2,4-D y Clorpirifos en igual
zona.
Los Altos Índices de Impacto Ambiental Total de Cipermetrina
y Clorpirifos se asocian con más mortalidad de cáncer de mama, y los de
Glifosato y Clorimuron con la de cáncer total en varones. Mayores síntomas
generales, cardio respiratorios, dérmicos y daño genotóxico fueron mayores en
las personas encargadas de las fumigaciones, que en las no expuestas. El daño
genotóxico provocado por los pesticidas es un factor potencial de riesgo
primario para efectos a largo plazo, tales como cáncer y alteraciones
reproductivas. Además el estudio, concluyó que el entorno de residencia de los
niños/as que pertenecen a zonas fumigadas, constituye un contexto de alta
vulnerabilidad.
El Centro de Investigaciones del Medio Ambiente (CIMA) perteneciente
a la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata ha
llevado a cabo la investigación que demuestra que los plaguicidas aplicados en
las fumigaciones se evaporan y caen, luego, con las lluvias. Es decir, llueven
agrotóxicos. El objetivo del trabajo consistió en estudiar los niveles de
Glifosato y Atrazina en aguas de lluvia en núcleos poblacionales urbanos y
periurbanos de la Región Pampeana.
Para ello se realizaron muestreos de los eventos de lluvia
en la provincia de Bs. As, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos. El glifosato fue el
herbicida más detectado con un 90% de resultados positivos, una media y una
máxima de concentraciones regionales de 6,5 µg/L y 67,3 µg/L, para la Atrazina
en el 79% de los casos con media- máxima de 1,5-15,7 µg/L y el AMPA con 35% de
detección y media-máxima de 0,8-7,9 µg/L. Del glifosato se produce un
metabolito ambiental por acción de las bacterias del suelo, llamado AMPA, con
mayor capacidad genotóxica. Las provincias donde se detectaron las mayores concentraciones
fueron Córdoba, Santa Fe, Bs. As. y Entre Ríos.
La investigación “Glyphosate and Anencephaly” llevada a cabo
por el Instituto Tecnológico de Massachusetts en Cambridge y publicada
este año en el Journal of Neurology and Neurobiology, reveló que el glifosato
una vez en la circulación del embrión genera dos consecuencias, anencefalia y
detención del desarrollo embrionario.
El estudio aclara el rol del herbicida en las enfermedades
neurológicas y degenerativas. El glifosato acumulado a lo largo de la vida,
actúa sustituyendo al aminoácido glicina durante la síntesis de proteínas de
funciones vitales lo que ha contribuido al aumento de enfermedades
debilitantes, como la ELA, el parkinsonismo y el autismo.
La investigación recorre todas las vías metabólicas en las
que el glifosato actúa de forma perjudicial. De los múltiples caminos que
llevan a la anencefalia, el glifosato actúa en todos. Su exposición perjudica
la absorción de nutrientes esenciales, actuando como quelante de varios
minerales, incluyendo al zinc, manganeso, cobalto, cobre y de múltiples
vitaminas que su déficit están vinculadas al desarrollo de anencefalia,
incluyendo folato, cobalamina, vitamina D y el aminoácido metionina. El
glifosato además de inducir el estrés oxidativo en las células humanas,
sustituye las Glicinas en el receptor de insulina lo que está vinculado a la
actual epidemia mundial de diabetes tipo II.
La conclusión más importante es el rol del glifosato en la
formación de micronúcleos, relacionados en los procesos cancerosos, en dosis
bajas y continuas, y el daño que provoca al ADN de las células, considerado
lesión precancerosa. El estudio coincide con la realidad a la que se
enfrentan los pueblos fumigados de la Argentina, con las tasas más altas del
país en malformaciones y cardiopatías congénitas.
Otro estudio realizado en conjunto, entre la Universidad de Córdoba y la Universidad Nacional de la Plata sobre la localidad de Monte Maíz en el año 2015, confirma alta tasa de abortos espontáneos, con una frecuencia que es 3 veces mayor a la media urbana en el país; y la presencia de niños con malformaciones congénitas que duplican la tasa provincial y nacional.
Otro estudio realizado en conjunto, entre la Universidad de Córdoba y la Universidad Nacional de la Plata sobre la localidad de Monte Maíz en el año 2015, confirma alta tasa de abortos espontáneos, con una frecuencia que es 3 veces mayor a la media urbana en el país; y la presencia de niños con malformaciones congénitas que duplican la tasa provincial y nacional.
Actualmente el Senasa busca ampliar el uso de agroquímicos
en varios cultivos y la cantidad de veneno permitida en los alimentos. El
objetivo es aumentar los agroquímicos autorizados para los cultivos como el
pomelo, pelón, damasco, cereza, arándanos, higo, banana, kiwi, palta, hinojo,
puerro, brócoli, coliflor, pepino, zapallito, berenjena, acelga, rúcula,
espinaca, legumbres, cereales en grano, frutos secos, hierbas aromáticas y tés.
Junto con la introducción de nuevos agroquímicos que no tienen antecedentes ni
dentro ni fuera del país.
No es admisible que se autorice el registro y
comercialización de plaguicidas sin investigaciones realizadas por centros y
con control público de universidades y organizaciones de la sociedad civil. Sin
embargo, el Ministerio de Medio Ambiente anunció en la última inauguración del
25° Congreso de la AAPRESID, la idea de acortar por resolución la distancia
mínima para la fumigación con Glifosato a nivel Nacional. La medida no tendría
intervención del Congreso ni del Ministerio de Salud y achica las
fumigaciones a una distancia de 100 metros.
Argentina vulnera las leyes de protección y defensa de
derechos humanos. Se incumple la ley general de ambiente, la ley de residuos
peligrosos, el artículo 41° de la Constitución y el Pacto Internacional de
derechos económicos sociales y culturales, ratificado por nuestro país, que
protegen a la ciudadanía de los daños cometidos por sustancias nocivas como el
Glifosato.
A nivel Nacional rige de forma genérica el “Principio de
Precaución” para todo el territorio de la Argentina. Conforme con el artículo
4° de la Ley Nacional de Ambiente n° 25675, la ley obliga a quienes aplican
sustancias químicas que puedan amenazar la salud a que adopten "medidas
eficaces para impedir la generalizada degradación del ambiente, sin importar
costos o consecuencias''. Pero la ley nunca se aplicó a la agricultura, así lo
comprobó la Auditoría General de la Nación.
El campo de la salud tiene un gran compromiso con esta
problemática al revelar las vulnerabilidades, los daños a la salud y las
inequidades sociales relacionadas con el modelo agrario químico. Debemos
producir una crítica profunda al modelo de ciencia que sustenta las decisiones
en el ámbito de las políticas, en especial, las de salud pública, y proponer
otros modelos de estudios que consideren la complejidad de los problemas de
salud y las acciones preventivas para la protección de la salud.
*Médica especialista en Medicina Familiar. Auditora Medica.
Universidad de Buenos Aires. // TOMADO
DE APU , SUGERIDO EN FACE
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