Violenta disputa por
tierras indígenas
La mañana de ayer, un grupo de manifestantes instaló un
tranque en el sector de San Pablo Tasba Pri, a unos 60 kilómetros sobre la vía
Rosita-Puerto Cabezas, con lo que suman ya dos bloqueos de las vías de este
corredor Gilberto Ariel Artola | FOTO Buses y camiones varados por el tranque
que mantienen los mestizos. Campesinos arreciaron las protestas en demanda de
la liberación de las personas que, desde hace varios días, fueron tomadas como
rehenes por parte de los indígenas que decidieron realizar por su cuenta el
saneamiento de sus territorios. La mañana de ayer, un grupo de manifestantes
instaló un tranque en el sector de San Pablo Tasba Pri, a unos 60 kilómetros
sobre la vía Rosita-Puerto Cabezas, con lo que suman ya dos bloqueos de las
vías de este corredor.
Wester Alejandro Espinoza, uno de los dirigentes del
tranque, explicó que decidieron protestar porque el choque en el territorio
está llegando a un nivel peligroso. “Nuestra demanda principal es el rescate de
toda la gente secuestrada por los indígenas”, dijo Espinoza, hermano del señor
Odón Espinoza, quien murió en manos de los indígenas que han expulsado a unas
80 familias del sector de Tungla, jurisdicción del municipio de Puerto Cabezas.
“Estamos aquí, porque hemos comprado esas tierras… Todos somos indígenas, todos
somos indios hermano, no hay diferencia entre ellos y nosotros, el tranque será
suspendido hasta que nos den respuesta, hasta que liberen a esa gente”,
enfatizó. La disputa por el territorio está afectando seriamente el tráfico por
la zona, ya que aunque los protestantes ordenaron liberar el paso cada dos
horas, luego de superar el primer retén, a 20 kilómetros se encuentra el otro
tranque que fue instalado desde el martes en Nazaret. Javier Espinoza dijo que piden
que regresen a las personas retenidas, pues los están dejando morir de hambre,
entre ellos se encuentra su hermano Bismarck Zamora. “Las condiciones son duras
para los retenidos… aquí nadie nos ha dicho nada”, comentó. SIGUEN DESALOJOS Juan
Quintero Suárez, quien llegó al tranque de San Pablo, desde la zona conocida
como San Pablito, en Tungla, aseguró que ahí los indígenas continuaron el
desalojo de otras 60 familias, e incendiaron las casas. Según Quintero Suárez, el pastor de la
comunidad, Hilario Valle, fue llevado con toda su familia por los indígenas. Destacó
que los colonos han reaccionado a las acciones de desalojo que están ejecutando
los indígenas del gobierno territorial de las 10 comunidades, de Puerto
Cabezas, quienes han iniciado la expulsión de las familias mestizas que están
ocupando parte de su territorio. En esa zona hay colectivos de familias que
alegan haber pagado por las tierras que ocupan. TOMADO DE ENUEVO DIARIO DE
NICARAGUA
No hay comentarios:
Publicar un comentario