Septiembre de 2012. El municipio había clausurado la planta.
Después, firmó una prórroga (Sergio
Cejas/Archivo) Por Redacción LAVOZ
En la Municipalidad de Córdoba no lo dudan, y más aun
después del jueves: mañana le pondrán la faja de clausura a la planta de
Dioxitek, ubicada a pocas cuadras del lugar de la explosión, en Alta Córdoba.
El viernes el municipio debía recibir una nota de la empresa
que elabora el combustible para las planta nucleares, en la que se notificara
el cese de actividades. Eso no ocurrió, y todo seguiría su curso.
Sin embargo, llamó la atención ayer que la Comisión Nacional
de Energía Atómica (Cnea) emitiera un comunicado para aclarara que la empresa
“nunca sufrió un incidente que afectara a terceros, ni causó ningún tipo de
perjuicio ni a sus trabajadores ni a sus vecinos”.
La Cnea manifestó la necesidad de “llevar tranquilidad a la
comunidad de la localidad de Alta Córdoba ( sic ) en particular y de la Ciudad
de Córdoba en general, respecto del correcto funcionamiento de la planta de
purificación de uranio de la empresa estatal Dioxitek”.
La firma precisó que Dioxitek “mantiene una política de
seguridad y gestión ambiental para garantizar una adecuada gestión de los
recursos y protección del entorno”.
Indicó que los trabajadores de Dioxitek y de la Cnea “se
pusieron a disposición de las
autoridades para atender las causas y
consecuencias de la explosión, aportando elementos de seguridad y protección
ambiental”.
“En estos momentos de congoja y preocupación, creemos que lo
más importante es llevar tranquilidad a la población y trabajar coordinadamente
para contener el dolor y resolver las consecuencias de este desgraciado
suceso”, sostuvo en el comunicado.
¿A Formosa?
El 99 por ciento de Dioxitek es propiedad de la Cnea y el
uno por ciento, de la Provincia de Mendoza. En la planta se elabora dióxido de
uranio, una materia prima que se utiliza para la elaboración del combustible de
las centrales nucleares del país.
El 29 de septiembre de 2012 se clausuró la planta por violar
la ordenanza 8.133 de uso de suelo. En noviembre de 2012 el municipio firmó un
convenio con la Cnea y Dioxitek por el que la planta debía trasladarse en 18
meses, con posibilidad de seis meses de prórroga. El acuerdo implica el
saneamiento del predio en el que se encuentran enterradas 57.600 toneladas de
colas de uranio.
En teoría el plan de la Nación era mudar la planta a
Formosa, pero todo parece indicar que aún no hay nada listo en esa provincia.
Recién a principios de septiembre se autorizó la
construcción de edificios del Polo Científico, en el que debería funcionar la
planta, pero Dioxitek aún no logró la vía libre.
Hace un mes, se estudiaba una propuesta de Dioxitek de
fusionar una planta industrial química dentro del predio del polo, por lo que
se estaba evaluando el respectivo estudio de impacto ambiental. Tomado de envío
de red foroba
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