Nobel alternativo a la lucha contra plaguicidas
por Laura Rocha
Mientras en
Malvinas Argentina, en Córdoba, un grupo de vecinos mantiene una protesta contra
la instalación de Monsanto, nuevamente uno de los premios Nobel
alternativos fue a la lucha contra los agroquímicos. Hace dos años lo recibió la argentina Sofía Gatica, que hoy
lidera el campamento en la provincia meditarránea.
Esta vez fue
para un agrónomo suizo Hans Herren creador de la Fundación Biovisión para el Desarrollo Ecológico con la
misión de combatir el hambre y la pobreza desde sus raíces y difundir
métodos ecológicos que mejoren de forma sostenible las condiciones de vida en
África. Este investigador realizó un trabajo con una plaga exótica que afectó
al continente africano por el cual se esparció por suelo y agua plaguicidas que
no hicieron efecto y que sin embargo, generaron una gran contaminación.
Para Herren, el
reconocimiento implicó modificar sus planes de jubilación: “Los recursos del
premio irán al proyecto `Cambiando el rumbo de la agricultura mundial`, que
tiene como objetivo garantizar la seguridad alimentaria para el mundo”,
explicó.
“Con nuestros proyectos de abajo hacia arriba, podemos mostrar en terreno -afirmó- que los métodos agrícolas ecológicos y sostenibles aumentan los rendimientos y podrían proporcionar alimentos suficientes y saludables para la población mundial“.
“Con nuestros proyectos de abajo hacia arriba, podemos mostrar en terreno -afirmó- que los métodos agrícolas ecológicos y sostenibles aumentan los rendimientos y podrían proporcionar alimentos suficientes y saludables para la población mundial“.
Ese enfoque en el
plano internacional apoya a los gobiernos “en el análisis de sus sistemas
alimentarios y el trazado del rumbo hacia un sistema de agricultura sostenible
y distribución eficaz. Los dos enfoques combinados parecen muy prometedores”,
apuntó.
“¿Cómo podemos
alimentar al mundo dentro de cincuenta años, especialmente teniendo en cuenta
las incertidumbres causadas por el cambio climático, el crecimiento de la
población y la disminución de los recursos naturales? Las respuestas a esta
pregunta indican que es necesario cambiar de rumbo la agricultura mundial, que
los enfoques usuales ya no son una opción, y que un nuevo paradigma, superador
de la revolución verde, es necesario, y urgente. El paradigma es prestar
atención a la agricultura multifuncional y su papel clave en las tres
dimensiones del desarrollo sostenible: ambiente, sociedad y economía… en este
orden”, indicó el ganador.
Herren fue
contratado por el Instituto Internacional de Agricultura Tropical (IITA), con
sede en Nigeria, para desarrollar un enfoque alternativo. Para ello, desarrolló
el Programa de Control Biológico en toda África, creó una coalición internacional y aseguró la
financiación para luchar contra la cochinilla de la yuca por medios naturales.
Con la ayuda de esta red mundial, el enemigo natural de la cochinilla, una
avispa parásita, fue identificada en Paraguay.
Después de
investigar más, Herren comenzó la cría de la avispa primero en condiciones
de cuarentena durante las pruebas de seguridad y eficacia. Una vez que había
sido comprobado que la avispa no se convertiría en un problema para el
agroecosistema africano, comenzó una de las campañas de liberación más
importantes de la historia humana. Alrededor de 1,6 millones de avispas fueron
liberadas entre 1982 y 1993 -tanto desde un avión a baja altura
especialmente equipado como a nivel del suelo- en 24 países del cinturón de la
yuca, desde Senegal hasta Angola.
El Right Livelihood Award fue creado en 1980 para “honrar y
apoyar las respuestas prácticas y ejemplares a los desafíos actuales más
urgentes”. El filatelista sueco-alemán Jacob von Uexkull vendió su colección de
estampillas para obtener los primeros recursos para financiar este premio.
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alternativo. Tomado de la nación de
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