La justicia
federal investiga a 8 personas por las quemas
En diálogo con PáginaI12, el ministro de Ambiente Juan
Cabandié aseguró que los responsables son "los productores de la zona
que están quemando los pastizales para mejorar el forraje" y se mostró
convencido de que, para resolver el problema, la justicia debe detenerlos y
apresarlos.
En diálogo con PáginaI12, Juan Cabandié aseguró que los
responsables de los incendios son "los productores agropecuarios de la
zona que están quemando los pastizales para mejorar el forraje"
Imagen: Télam
El humo de los incendios en
el delta del Paraná invade Rosario desde hace
días. De noche, las llamas contrastan con la oscuridad del cielo y
el fuego se puede ver a lo largo de toda la costanera. Son alrededor de 5
mil focos de incendio que, desde hace más de un par de semanas, cubren
los humedales del Río Paraná, resecos debido a la pronunciada bajante del
río. Mientras que organizaciones ambientales cortan el puente Rosario-Victoria
denunciando un "ecocidio", el gobierno de Entre Ríos reconoce
que la situación "se les fue de las manos", que la sequía
histórica los "desbordó", y demanda más ayuda del gobierno nacional y
de la provincia de Santa Fe. La Justicia, mientras tanto, investiga
a productores agropecuarios de la zona, denunciados penalmente por
quemar los pastizales del delta para el desarrollo de la producción
ganadera.
"Impresiona ver la dimensión del daño que este
ecocidio está causando sobre el humedal. Los responsables de estas
quemas tan dañinas para la salud de las personas y tan brutales con nuestra
tierra tienen que pagar por lo que han hecho", declaró el ministro
de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, Juan Cabandié, quien hace
un par de semanas denunció penalmente y pidió la detención de los propietarios
de los terrenos en donde se realizaron las quemas. En diálogo con PáginaI12, Cabandié
aseguró que los responsables de los incendios son "los
productores agropecuarios de la zona que están quemando los
pastizales para mejorar el forraje", y se mostró convencido de
que, para resolver el problema, la Justicia debe detenerlos y apresarlos.
"El Ministerio de Ambiente no tiene competencia sobre los recursos
naturales, no tiene poder de policía, quien sí lo tiene es la provincia de
Entre Ríos", determinó.
PUBLICIDAD
"Todo lo que la provincia de Entre Ríos tenía
disponible para apagar los incendios lo destinó ahí: comisarías, brigada de
delitos rurales, bomberos. Pero la verdad es que la provincia cuenta con pocos
recursos, porque no hay infraestructura y no es que se puede entrar ahí con
camiones hidratantes o lanchas, la única manera es con helicóptero y por eso
pedimos ayuda al gobierno nacional", explicó, por su parte, el fiscal
de Estado de Entre Ríos, Julio Rodríguez Signes. "El delta tiene un millón
y medio de hectáreas, representa el 20 por ciento de la superficie total de
Entre Ríos. Empezaron con la quema de pastizales hace unos meses y los
incendios se fueron propagando como nunca por la condiciones meteorológicas: no
llueve, el río está en una bajante histórica, casi no hay agua, así que el
fuego comenzó a expandirse de forma espontánea. Esta vez la situación se
desbordó, es imposible de controlar", argumentó Rodríguez Signes, quien
sin embargo admitió que la quema de pastizales es una práctica ilegal que se repite
todos los años. Consultados sobre por qué el Estado no sancionaba a los
productores que, cíclicamente, prendían fuego los pastizales del delta, fuentes
del gobierno de Entre Ríos respondieron: "Fracasa el sistema, la provincia
no tiene los recursos para hacer uso del poder de policía que necesitás para
controlarlos. Generalmente ellos hacen los incendios, pasa y nos
olvidamos".
Desde febrero, los incendios han consumido un total de 50
mil hectáreas (una superficie que equivale a tres veces la ciudad de Rosario),
según el relevamiento de una organización ecologista llamada "Naturalistas
santafecinos". Si bien el gobierno nacional destinó helicópteros, aviones
hidratantes, efectivos del Grupo Albatros (el cuerpo de elite de Prefectura
Naval), que se sumaron a los esfuerzos conjuntos de los gobiernos provinciales
de Santa Fe y Entre Ríos, el impacto ambiental del fuego en los humedales es
devastador. "Lo grave no es sólo que afecta un importantísimo recurso
natural estratégico, en tanto que es uno de los reservorios más grandes de agua
dulce, sino que también impacta sobre las funciones ecosistémicas que tiene,
como evitar inundaciones. Los humedales son, además, grandes consumidores de
carbono y, en el caso del Paraná, cuentan con más de 700 especies de plantas,
100 especies de peces y 200 especies de mamíferos", explicó el diputado
socialista de Santa Fe, Enrique Estévez, que presentó un proyecto de ley para
la protección de los humedales.
"Basta de quemar las islas", "No al
ecocidio", "No es pasto quemado, es bosque nativo ardiendo",
"Ley de Humedales Ya", rezaban los carteles de la protesta que el
sábado cortó el punte Rosario-Victoria. La convocatoria, organizada por la
Multisectorial por la Ley de Humedales, reclama, además del cese de las quemas
y la efectiva sanción de los responsables, la sanción de una Ley de Humedales.
"La Ley de Humedales tiene un largo derrotero, se intentó sancionar en el
2013 y en el 2016 pero las dos veces terminaron dormidas en alguna de las
Cámaras por el lobby de los agronegocios. Una Ley de Humedales te permite
realizar un inventario de los humedales, te da unas pautas mínimas y, además,
te permite evidenciar y desnaturalizar la quema como actividad", indicó el
abogado ambientalista Enrique Viale, quien también acusó al gobierno de Entre
Ríos de "ser históricamente muy sumiso a los intereses del agronegocio y
de relativizar las quemas en la zona". Por otro lado, Cabandié
aseguró también haber intentado conciliar con la provincia de Santa Fe y de
Entre Ríos la creación de un área protegida - "que contemplara lo
productivo pero desde un punto de vista sostenible" -, pero que el
gobierno de Entre Ríos se negó.
Según una encuesta realizada por la Universidad Nacional de
Rosario, el 60 por ciento de la población local responsabiliza a los
empresarios ganaderos por los incendios. Hasta el momento, la Justicia
Federal está investigando a ocho personas por las quemas, todos
propietarios de lotes que fueron incendiados. Uno de ellos es Rufino Baggio,
empresario y descendiente del socio fundador de RBP S.A, la firma que controla
la famosa empresa de Jugos Baggio. Los productores rurales de Entre Ríos, por
otro lado, niegan tener responsabilidad sobre los incendios y aseguran que estos
se producen por culpa de la circulación de personas en el terreno en un
contexto de gran sequía, en el que "ante cualquier descuido puede ser
fácil presa del fuego". Siguiendo esta línea, el domingo pasado fueron
detenidos dos pescadores santafecinos, acusados de haber iniciado uno de los
focos de incendio en las islas del Departamento Diamante. Sin embargo, los
funcionarios de Entre Ríos y Santa Fe coinciden en que, si bien es cierto que
pueden ocurrir ciertos "descuidos" que provocan algunos focos de incendio,
los principales responsables son los productores agropecuarios de la
zona.
Informe: María Cafferata. // tomado de pagina 12 de ar
No hay comentarios:
Publicar un comentario