FOTOS Un conjunto de flamencos austral o chileno, de los casi dos
centenares que llegaron a la laguna Alalay,
en la orilla este. Los expertos recomiendan observarlas de 8:00 a
16:00, con largavistas, para evitar
perturbarlas. Los ejemplares más jóvenes tienen una coloración grisásea. |
Daniel James
Un grupo de flamencos rosados (Phoenicopterus chilensis) en
la laguna Alalay, ayer. | Daniel James
Un grupo de flamencos rosados (Phoenicopterus
Flamencos jóvenes con plumaje oscuro junto a una pareja de
aves adultas con plumas rosadas. | Daniel James
Flamencos jóvenes con plumaje oscuro junto a una pareja de
aves adultas con plumas rosadas. | Daniel James
Aves migratorias en medio de la laguna, ayer. | Daniel James
Aves migratorias en medio de la laguna, ayer. |
POR Violeta Soria
Más de un centenar de flamencos rosados (Phoenicopterus
chilensis) han hecho de la laguna Alalay su paraíso, mientras hacen una pausa
en su migración de Los Andes hacia los valles y otras regiones donde puedan
conseguir alimento.
Las aves de plumaje color salmón y un anaranjado intenso, en
algunos casos con ribetes negros en las alas, resaltan la biodiversidad de la
El responsable de Fauna Silvestre de la Alcaldía de
Cochabamba, Dennis Soux, informó que las aves zancudas de cuello alto y patas
largas llegaron primero en pequeños grupos desde abril y esta semana aumentaron
notoriamente su presencia.
Ocupan el lado este de la laguna, considerada el área de
reproducción y anidación. Además de los flamencos rosados se observan otros con
plumaje oscuro por su juventud.
Las aves migratorias pueden ser observadas entre las 8:00 y
las 16:00. Se aconseja llevar un largavista para no perturbar su ambiente.
“Esta especie es nómada, se desplaza de un lugar a otro. Si están acá es porque
se van a movilizar hacia otro lado”, indicó Soux.
Características
Las aves viven en lagunas de altura y están distribuidas en
toda la ruta de la Cordillera de Los Andes como Perú, Chile, Argentina, Bolivia
y parte de Ecuador.
El biólogo y ornitólogo, Everth Rocha, informó que durante
su estadía de por lo menos un mes, las aves visitan las lagunas de Alalay y
Albarrancho como “lugares de paso” para recuperar energías y emprender vuelo.
“No es muy común ver a los flamencos en los valles”, resaltó
al indicar que buscan cuerpos de agua puesto que en las lagunas Colorada, Poopó
y Verde, donde habitan, ya no tienen alimento y están secas a raíz de la ola de
calor que atraviesan.
Estilo de vida Los
flamencos son conocidos por andar en pequeños grupos familiares, cuidar a sus
polluelos como en una “guardería” . El
biólogo y coordinador del Comité de Recuperación, Mejoramiento y Protección de
la Laguna Alalay (Crempla), Erick Martínez, informó que los flamencos son “filtradores” y esto demuestra que existe
un aumento de la población de copépodos
y cladóceros en el agua, es decir,
bichos microscópicos que se comen
las algas verdes.“Eso es relativamente bueno, es un estadio al que debería pasar
la laguna y de ahí pasar al estadio del equilibrio entre el fitoplancton
(animales vegetales) y zooplancton (animales)”, señaló. Sin embargo, alertó que
los perros salvajes que están en la laguna y sus alrededores se convierten en
una amenaza, porque los caninos se comen a las crías, los huevos y a las mismas
aves. El coordinador del Crempla gestiona la presencia de Zoonosis para que
controlen la presencia de los canes. “Son huéspedes ilustres y hay que
recibirlos de buena forma. Si hubiera agua en la laguna las hubiéramos recibido
con agua limpia”, señaló una de las representantes del Comité Departamental de
Medio Ambiente, Natalia Vega.
RIESGO DE DAÑO POR TÓXINAS ES MÍNIMO
El biólogo y coordinador del Comité de Recuperación,
Mejoramiento y Protección de la Laguna Alalay (Crempla), Erick Martínez,
informó que la cubeta está afectada por la falta de agua. A ello se suma que la
poca que existe es “más salina”. Consultado
sobre si estas condiciones son peligrosas para los flamencos, Martínez indicó
que “lo que es peligroso para las aves son las algas verdes que potencialmente
pueden producir toxinas y podrían afectarlas eventualmente”, debido a que si se
alimentan de cladóceros, las toxinas podrían pasar a su sistema digestivo,
afectar su hígado, luego otros órganos, incluso derivar en su muerte. Sin
embargo, aclaró que sólo es “una posibilidad”. Entretanto, los flamencos que se
pasean por la laguna se alimentan en las orillas de la cubeta. Otros
sobrevuelan la cubeta y adornan el cielo azul
de la ciudad. TOMADO DE LOS TIEMPOS DE BOLIVIA
No hay comentarios:
Publicar un comentario