Un consenso de salud para la región y el mundo
De acuerdo con este consenso, desarrollar capacidades
técnicas en los servicios de salud con énfasis en las unidades del primer
nivel, es un elemento clave de la respuesta
Autor: Lisandra Fariñas Acosta |
Con la aprobación de un consenso para una hoja de ruta como respuesta de emergencia
en materia de investigación y desarrollo para el enfrentamiento al Zika y otras
arbovirosis, concluyó este viernes en el Hotel Nacional la Reunión Regional
para la Estrategia de Vigilancia y Control de las Arbovirosis, que contó con la
asistencia de 170 participantes de Cuba y otros 33 países.
El doctor SylvainAldighieri, director adjunto del programa
de emergencia en salud de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), dio
lectura al documento que convoca a incentivar la voluntad política y financiera
para asegurar la consolidación y sostenibilidad de la estrategia de prevención
y control de las enfermedades arbovirales.
Asimismo, plantea como prioridades fortalecer nuestros
sistemas de vigilancia epidemiológica integrada, de las enfermedades
arbovirales de importancia en salud pública; reportar de manera específica cual
enfermedad arboviral se sospecha, cómo es la circulación y co-circulación
viral, cuál es el riesgo de introducción de nuevos agentes virales, así como
entender mejor la correlación entre las manifestaciones clínicas, el virus, el
vector y el medio ambiente, con el fin de brindar una respuesta oportuna a
brotes y epidemias.
De acuerdo con este consenso, desarrollar capacidades
técnicas en los servicios de salud con énfasis en las unidades del primer
nivel, para brindar una correcta y oportuna atención médica a los pacientes con
sospecha de estas enfermedades y de esta forma evitar la progresión a formas
graves y o a la muerte, es un elemento clave de la respuesta.
Otros elementos se concentran en elaborar y actualizar las
guías de manejo clínico que deben estar accesibles en todo momento para el
personal médico y asistencial, tanto del sector público como el privado y
mantener un proceso de capacitación que oriente el diagnóstico y tratamiento;
además de desarrollar y mantener las capacidades técnicas de los programas de
control vectorial.
Especial importancia reviste en la hoja de ruta el
desarrollar nuevos paradigmas para el manejo integrado de vectores, que
permitan involucrar de manera eficaz a la población y empoderarla como parte
fundamental del control del mosquito.
La respuesta integrada incluye entre sus acciones además el
fortalecer las capacidades diagnósticas y de los sistemas de gestión de calidad
en los laboratorios locales y nacionales a fin de garantizar una adecuada
vigilancia virológica, que implica asegurar el acceso a metodologías y
plataformas diagnosticas modernas, incluyendo técnicas moleculares y
serológicas.
Por otra parte, subraya el texto que la implementación de la
estrategia de prevención y control de las enfermedades arbovirales no puede ser
un esfuerzo aislado ni responsabilidad única del sector de salud. «Debe ser una
acción integral que involucre a otros sectores de la economía, la sociedad, el
sector privado, los medios de comunicación, la comunidad y la familia».
Coloca además especial importancia en la participación
activa de la comunidad y el acceso a la información, a fin de que puedan asumir
un papel activo en las medidas en torno a la prevención y el control de estas
enfermedades.
El doctor Alfredo González Lorenzo, viceministro de Salud
Pública,en sus palabras de clausura enfatizó que resulta necesaria la
definición en nuestros países de programas de sostenibilidad lo suficientemente
integrales, que permitan alcanzar resultados satisfactorios en términos de
control de los niveles de infestación de los mosquitos del género Aedes y la
transmisión de las arbovirosis.
Ratificó la importancia de impulsar las investigaciones
dirigidas al desarrollo de vacunas y a descifrar vacíos de conocimientos aún
existentes, por ejemplo respecto al Zika; y expresó nuevamente la voluntad de
Cuba de continuar brindando colaboración solidaria con los países de la región
y otros pueblos del mundo en la lucha contra esta y otras
enfermedades.«Nuestros pueblos esperan por nuestra capacidad para librarlos de
la amenaza creciente, el dolor y sufrimiento ocasionado por estas graves
enfermedades», dijo.
La señora Sylvia Burwell, secretaria del Departamento de
Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos de América subrayó que el Zika
es una amenaza que exige alianzas entre países y refirió que el apoyo en
programas de capacitación es fundamental para encontrar las mejores maneras de
responder ante este y otros virus. Al igual que el Ministro de Salud de Barbados,
John Boyce, la señora Burwell agradeció la oportunidad de haber participado en
este evento.
«Tenemos un problema grande, pero necesitamos soluciones, y
estos dos días de intercambio dan luces para que nos acerquemos a estas
soluciones», refirió por su parte la ministra de Salud de Honduras, Yolani
Batres, quien expresó que para las enfermedades no hay fronteras, no se
necesitan pasaportes, no se necesitan visas. También para la salud no debe
haber fronteras, y estos espacios nos acercan a romper esas barreras que
definitivamente son imaginarias ¿Cómo?trabajando juntos y teniendo en cuenta
que nuestro fin es la población.
Batres, quien dirigió el 55 Consejo directivo de la OPS,
puntualizó a Granma que está muy satisfecha con la reunión, en
tanto han sido«dos días intensos, pero muy productivos para todo lo que es la
salud de las Américas. Además se ha hecho en un país que ha tenido una
experiencia exitosa en cuanto a la lucha contra el dengue. Podemos aprender
mucho de lo que hemos logrado todos y esta es una muestra».
«Hemos sido una región pionera en eliminar la polio, el
sarampión, la rubeola congénita… y mucho podemos hacer en contribuir a
erradicar estas enfermedades que son un flagelo para el mundo. Este es el
inicio de un nuevo capítulo que vamos a escribir en la salud pública, el de
luchar y vencer estas enfermedades arbovirales», dijo TOMADO DE LA GRANMA DE
CUBA
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