Los diez grandes de la Patagonia
De Río Negro a Tierra del Fuego, un safari fotográfico por
diez sitios en busca de las estrellas de la región: ballenas, pingüinos,
cóndores y guanacos, entre otros, en sus hábitats naturales Carlos W.
Albertoni
Los guanacos viven a sus anchas en la Reserva 25 de Mayo,
cerca de El Calafate. Foto: Carlos W. Albertoni
Estepas de horizontes desmedidos, bosques de sombras
profundas, laderas de pendientes pronunciadas y costas salpicadas por aguas de
mares bravíos. En medio de esos paisajes patagónicos es posible encontrar
especies de fauna que parecen ajustarse perfectamente a esa condición casi
mitológica de la naturaleza de los confines australes. Hay colosales ballenas
saltando cerca de las orillas, pingüinos de andar chaplinesco en islotes de
fantasía, esquivos zorros de tonos colorados apenas asomando sus hocicos entre
troncos caídos por los vientos y elefantes marinos luchando a dentelladas en
playas amparadas por altos acantilados. "Ver animales en la Patagonia
tiene un encanto particular, un sabor distinto, quizás por ese entorno de
desmesura y secreto que los rodea. O tal vez por pensarlos como parte de eso
que tantos llaman el Fin del Mundo", dice Miriam Capasso, directora
ejecutiva del Ente Patagonia.
Pese a que hay especies que sólo pueden ser vistas en
invierno, la mayoría de los animales patagónicos suele ofrecer mejores
avistajes de sus poblaciones en el fin de la primavera y el verano ya que los
climas menos rigurosos de los meses que van de noviembre a marzo favorecen a la
concentración de colonias más numerosas, en especial en el caso de animales que
cumplen migraciones estacionales. De norte a sur, de Río Negro a Tierra del
Fuego, este es un repaso por diez sitios de nuestro lejano Sur que resultan
ideales para el avistamiento de fauna.
PUNTA BERMEJA. Lobos marinos
Charla de pingüinos en Puerto Deseado. Foto: Carlos W.
Albertoni
Situado a muy corta distancia de la ciudad rionegrina de
Viedma, Punta Bermeja es un accidente geográfico con un muy largo frente
costero que se interna más de medio kilómetro en el mar. Allí se encuentra la
mayor colonia de lobos marinos de un pelo de todo el litoral argentino, cuya
población supera los cinco mil ejemplares en la época de reproducción, que se
extiende entre noviembre y marzo. Desde Viedma se puede llegar a la lobería
siguiendo la muy escenográfica ruta provincial 1 que se orilla durante gran
parte de su recorrido al Mar Argentino. Sin dudas, el mejor período para
visitar la colonia es entre noviembre y diciembre, cuando la mayoría de los
machos entran en combate por el control del territorio en el que copularán con
las hembras.
PENÍNSULA VALDÉS. Ballena franca austral
La ballena franca austral. Foto: Carlos W. Albertoni
Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, la
Península Valdés se encuentra en el noreste de Chubut. Hasta sus costas llegan
anualmente un par de miles de ballenas franca austral, especie declarada
Monumento Natural en la Argentina desde hace ya más de treinta años. "Esta
ballena proviene de los mares antárticos, desde donde llega a Valdés para que
las hembras copulen, den a luz y críen a sus ballenatos. El período que se
encuentra aquí es de seis o siete meses, ya que las ballenas llegan en junio y
se van a comienzos de diciembre", señala Paula Fontao, directora de
turismo de Puerto Pirámides. Ubicado al sur de la península, Puerto Pirámides
es el sitio desde el que parten las embarcaciones sobre las que se realizan los
avistamientos de la ballena franca austral. "Existen seis empresas que
llegan a realizar hasta cuatro salidas diarias en las épocas de mayor
concentración de la especie, entre agosto y octubre", agrega Paula Fontao.
PUNTA NINFAS. Elefante marino
Cara a cara con elefantes marinos en Punta Ninfas. Foto: LA
NACION / Carlos W. Albertoni
Punta Ninfas es un accidente costero que marca el extremo
austral del Golfo Nuevo, en la costa atlántica chubutense. Allí se encuentra la
mayor colonia de elefantes marinos de nuestro país, cuyos ejemplares se
asientan mayoritariamente sobre una playa pedregosa a la que se puede acceder
tras descender desde lo alto de un acantilado. Tras pasar casi todo el año en
el mar, los elefantes marinos de Punta Ninfas llegan al lugar en septiembre y
octubre para reproducirse y cambiar la piel. A poco de llegar, los machos se
enfrentan en violentas batallas para dominar amplias porciones de playa y
aparearse con la mayor cantidad de hembras posible. Una vez apareadas, esas
hembras dan a luz a una única cría que amamantan durante un mes antes de dejar
Ninfas para regresar al mar. "Es un sitio en el que uno puede estar en
contacto casi cara a cara con los elefantes marinos, una experiencia única e
inolvidable", asegura Juliette Decre, administradora de la Estancia El
Pedral desde la que se realizan visitas exclusivas a la colonia de Punta
Ninfas.
PUNTA TOMBO. Pingüino de Magallanes
Existen numerosas colonias de pingüinos magallánicos en el
litoral atlántico argentino. La mayor de ellas está ubicada en Punta Tombo, a
poco menos de 70 km de la ciudad chubutense de Trelew. Declarada como Reserva
de Fauna provincial desde hace tres décadas, Punta Tombo recibe anualmente casi
un millón de ejemplares de pingüinos que llegan esencialmente para aparearse y
tener a sus crías. "Los primeros pingüinos llegan a mediados de septiembre
y los últimos se van ya comenzado abril. Las hembras ponen sus huevos a
principios de octubre, luego los empollan durante cuarenta días y a partir de
ahí empiezan a criar a sus pichones hasta que hayan aprendido a nadar y
alimentarse por sí mismos. Recién entonces dejan la colonia y vuelven a las
aguas del Atlántico", explica Saúl Cruz, gerente de operaciones de la
agencia Cuyun Co que organiza excursiones regulares a Punta Tombo desde la
cercana ciudad de Puerto Madryn.
28 DE NOVIEMBRE. Cóndor
Su majestad, el cóndor. Foto: LA NACION / Carlos W.
Albertoni
Ubicado en el sudoeste santacruceño, 28 de Noviembre es un
muy pequeño pueblo minero habitado por poco más de cinco mil habitantes. Su
perfil de casas bajas está rodeado por cerros que son sobrevolados de manera
permanente por varias decenas de cóndores andinos, el ave voladora más grande
del mundo cuyos ejemplares adultos suelen superar los tres metros de
envergadura. Debido a esta inusual concentración de cóndores, la UNPA
(Universidad Nacional de la Patagonia Austral) creó en los alrededores del
pueblo un par de miradores que facilitan la observación de la especie,
especialmente en los horarios matinales y vespertinos en los que las masas de
aire más cálidas favorecen el sobrevuelo de la especie. Declarado desde hace
una década como Monumento Natural en Santa Cruz, el cóndor andino depende de
las corrientes ascendentes de aire para volar y planear de manera sostenida.
PUERTO DESEADO. Pingüino de penacho amarillo
Asentada sobre un promontorio que casi se abalanza sobre el
mar, Puerto Deseado es una pequeña localidad pesquera del norte de Santa Cruz.
Desde allí parten las embarcaciones que navegan por poco más de media hora para
llegar a la fantástica y muy pequeña Isla Pingüino, un sitio de rocas y viento
en el que habita la única colonia de pingüinos de penacho amarillo de toda la
Argentina. "Este pingüino mide apenas 55 centímetros y es bastante
agresivo, especialmente con quienes se acercan a sus huevos. Pese a esto, uno
puede caminar sin mayores inconvenientes en medio de la colonia, lo que es
realmente increíble porque eso se hace por las rocas, casi zigzagueando entre
los pingüinos", señala Ricardo Pérez, quien desde hace varios años lleva a
cabo navegaciones a Isla Pingüino con Darwin Expediciones. "Los penacho
amarillo están en la isla desde fines de septiembre hasta mediados de abril,
aproximadamente", precisa Pérez.
LAGUNA NIMEZ. Cauquén
Ubicada a tan sólo un kilómetro de El Calafate, la
maravillosa laguna Nimez es uno de lo sitios más encantadores de la Patagonia
para la observación de aves. Relevamientos recientes han señalado que existen
en ese lugar casi un centenar de especies diferentes, entre las que se destacan
flamencos, cisnes de cuello negro, teros, patos, bandurrias y cauquenes.
"De todas estas especies, sin dudas las más representativas son las
bandurrias y los cauquenes, por lo que significan para la fauna del extremo más
austral de la Patagonia. Son dos aves muy atractivas y de gran porte que pueden
ser vistas en un gran número en casi cualquier lugar de la laguna Nimez",
señala Gabriel Cornide, actual director de turismo de El Calafate.
PARQUE NACIONAL PATAGONIA. Macá tobiano
Macá tobiano. Foto: LA NACION / Carlos W. Albertoni
El Parque Nacional Patagonia fue creado en diciembre de 2014
sobre la Meseta del lago Buenos Aires, en el noroeste santacruceño. Allí habita
el macá tobiano, un ave endémica de la región patagónica que se encuentra
amenazada por la extinción. "Es una especie zambullidora que vive en las
lagunas de las mesetas patagónicas, en donde se reproduce entre los meses de
noviembre y marzo. Varios factores han ido acabando con su población y en la
actualidad quedan tan sólo 800 ejemplares", detalla Pablo Hernández, naturalista
abocado desde hace años al estudio del macá tobiano. Al Parque Nacional
Patagonia se puede llegar desde la ciudad de Los Antiguos, siguiendo mayormente
el complicado ripio de la ruta 41. Dentro del área reservada la mayor
concentración de macá tobiano se encuentra en la laguna El Cervecero, en donde
es posible ver hasta cien parejas con sus pichones en los meses del verano y el
otoño.
RESERVA 25 DE MAYO. Guanacos
El guanaco es uno de los animales más representativos de la
fauna argentina, ya que su población en territorio nacional constituye más del
90 por ciento del total mundial. Puede hallárselo a lo largo de todo el país,
desde la Puna hasta la Patagonia, pero es en esta última región en donde sus
poblaciones resultan más numerosas. Un sitio especial para avistarlo es la
Reserva 25 de Mayo, ubicada en las cercanías de El Calafate sobre una zona de
pendientes abruptas que se recuesta casi sobre el límite con Chile. "Las
pendientes pronunciadas y los terrenos irregulares son muy importantes para los
guanacos, ya que les permiten huir de sus depredadores", explica Julián
Forés, dueño del tradicional hotel Kau Yatún y organizador de safaris
fotográficos en la reserva que parten justamente desde el hotel. Allí, entre
esas altas laderas de la reserva, se encuentra un cañadón en el que en las
mañanas y las tardes suelen verse enormes manadas de guanacos. "Es un
avistaje sorprendente, en especial si se los ve correr a lo largo del
cañadón", cuenta Forés.
TIERRA DEL FUEGO. Zorro colorado
Los zorros de Tierra del Fuego. Foto: Carlos W. Albertoni
Los bosques fueguinos constituyen el hábitat perfecto para
el muy atractivo zorro colorado. Más allá de que puede ser encontrado en muchos
otros sitios de la Patagonia, su observación en Tierra del Fuego suele estar
cargado de una innegable espectacularidad, especialmente por la combinación del
pelaje rojizo del animal con el blanco azulado de la nieve en los inviernos o
los tonos bermejos de troncos y follajes del bosque en el final del verano y el
otoño. "Hay muchos lugares para ver zorros colorados en nuestro
archipiélago, pero siempre destaco los bosques del Parque Nacional Tierra del
Fuego y las zonas cercanas al Lago Fagnano. Son huidizos pero a la vez muy
curiosos, por lo que es posible tomar buenas fotografías de ellos. Lo único que
se necesita es silencio y paciencia", señala Luis Castelli, actual
presidente del Infuetur.
Coordenadas
BALLENAS. Los avistajes de ballenas se hacen esencialmente
desde Puerto Pirámides. Allí existen seis empresas navieras que realizan
navegaciones desde junio a comienzos de diciembre, dependiendo de los vientos y
otros factores climáticos. Las salidas suelen durar 75 minutos aunque en
algunas ocasiones pueden extenderse hasta una hora más, como en el caso de las
navegaciones realizadas en el atardecer. Informes en www.hydrosport.com.ar,
www.southernspirit.com.ar, www.pekesosa.com.ar, www.whalesargentina.com.ar,
www.puntaballena.com.ar y www.titobottazzi.com.ar
PINGÜINOS MAGALLÁNICOS. Punta Tombo es una Reserva
Provincial y el ingreso para los turistas nacionales es de 40 pesos. Durante
enero están habilitados la totalidad de los senderos del área protegida, que
suman aproximadamente un kilómetro y medio de recorrido. Informes en
www.puntatombo.com. Ubicada en Puerto Madryn desde hace casi un siglo, la
agencia CuyunCo Turismo ofrece excursiones regulares a Punta Tombo. Informes en
www.cuyunco.com
PINGÜINOS DE PENACHO AMARILLO. En Puerto Deseado, la mejor
opción para navegar hasta la Isla Pingüino es Darwin Expediciones. Estos
viajes, sujetos a las condiciones climáticas, pueden demandar medio día o el
día completo, de acuerdo al itinerario escogido. Informes en
www.darwin-expeditions.com
GUANACOS. La empresa Patagonia Profunda organiza avistajes
de guanacos como parte de su programa Safari Experience. La travesía dura 4
horas y se realiza enteramente por la Reserva 25 de Mayo, recorriendo un total
de 50 kilómetros. Informes en www.patagoniaprofunda.com
ZORROS COLORADOS. La mejor opción para avistarlos es el
Parque Nacional Tierra del Fuego. Está ubicado a 10 km de la ciudad de Ushuaia
y es accesible por la RN 3. El ingreso para argentinos tiene un costo de 90
peso.
ELEFANTES MARINOS. En las proximidades del apostadero de
Punta Ninfas se encuentra la muy exclusiva Estancia El Pedral. Desde allí se
pueden realizar salidas para ver la colonia de elefantes marinos. También se
llevan a cabo excursiones hasta una pequeña colonia de pingüinos magallánicos
ubicada sobre la playa cercana a la Estancia, con días de campo incluidos.
Informes en www.reservaelpedral.com
TOMADO DE LA NACION DE AR
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