Los avances científicos y tecnológicos están transformando
la vida de las personas: incluso ayudan a los países pobres a disminuir la
diferencia en la esperanza de vida con respecto a los países ricos. Sin
embargo, los
países pobres enfrentan aún enormes desafíos, ya que casi una cuarta parte de
los niños menores de 5 años están malnutridos, y el 60 % de los
estudiantes de escuela primaria no logra ni siquiera un nivel educativo básico. De
hecho, más de 260 millones de niños y jóvenes en los países pobres no
reciben ningún tipo de educación.
Por supuesto, hay un argumento moral para invertir en la
salud y la educación de todas las personas. No obstante, hay también un
argumento económico: estar preparados para competir y prosperar en un entorno
que cambia rápidamente. El
“capital humano” —es decir, el potencial de los individuos— será la inversión
de largo plazo más importante de los países para la futura calidad de vida y
prosperidad de su población.
Los Gobiernos llevan mucho tiempo invirtiendo en el
crecimiento económico, concentrándose en el capital físico, como carreteras,
puentes, aeropuertos y otras obras de infraestructura. Sin embargo, han
invertido poco en su gente, en parte porque los beneficios de dichas
inversiones han sido mucho menores y más difíciles de medir. Por tanto, como lo
señaló recientemente el presidente del Grupo Banco Mundial, Jim Yong Kim, en un
artículo publicado en Foreign Affairs, el mundo enfrenta hoy
un “déficit de capital humano”. En
numerosos países, la fuerza de trabajo no está preparada para el futuro que
evoluciona aceleradamente.
Esta es una de las ideas centrales del próximo Informe sobre el
desarrollo mundial 2019: La naturaleza cambiante del trabajo (i) del
Banco Mundial. La frontera para las competencias avanza más rápido que
nunca. Los
países deben apurar el paso ahora y preparar a los trabajadores para los
enormes desafíos y oportunidades que están siendo impulsados por el cambio
tecnológico.
Pero sin un esfuerzo mundial urgente y concertado para
desarrollar el capital humano, una gran cantidad de personas y países enteros
están en peligro de ser excluidos de la prosperidad futura. Los
Gobiernos pueden desempeñar un papel fundamental en la transformación del
capital humano, porque la pobreza, la desigualdad y otros obstáculos impiden a
las familias invertir en la salud y la educación de sus hijos.
EL PROYECTO DE CAPITAL HUMANO
Este desafío apremiante es la razón por la cual el nuevo
Proyecto de Capital Humano tiene el pleno respaldo del Grupo Banco Mundial y
del presidente Kim. El Grupo Banco Mundial se ha comprometido a ayudar a los
países a dar prioridad al capital humano de una manera sostenible, dado el
profundo reconocimiento de que el empleo y los trabajadores cualificados son
esenciales para el desarrollo en los países de todos los niveles de ingreso.
Los tres objetivos principales del Proyecto de Capital
Humano son: primero, crear la demanda de más y mejores inversiones en las
personas; segundo, ayudar a los países a reforzar sus estrategias e inversiones
de capital humano para conseguir mejores resultados rápidamente, y tercero,
mejorar la manera cómo se mide el capital humano.
El nuevo índice de capital humano, que se presentará durante
las Reuniones Anuales del Grupo Banco Mundial en octubre, apoyará esos tres
objetivos y será un recurso crucial tanto para los Gobiernos como para los
ciudadanos. Servirá para medir resultados de capital humano relacionados con la
productividad, como la supervivencia infantil, la predisposición innata de los
niños para ser exitosos, el aprendizaje de los estudiantes y la salud de los
adultos.
foto Dos niñas en la Clínica Comunitaria Palash del Centro de
Bienestar Materno Infantil (MCWC), en Bangladesh. © Rama George-Alleyne / Banco
Mundial
DE LA TRANSPARENCIA A LA TRANSFORMACIÓN
El índice medirá la salud de los niños, jóvenes y adultos,
así como la cantidad y calidad de educación que un niño nacido hoy puede
esperar alcanzar a los 18 años. Esto ayudará a aumentar la transparencia,
lo que —según pruebas convincentes— puede motivar a las personas y los
encargados de formular políticas a exigir y crear mejores servicios. El
propósito de los datos es impulsar un diálogo, liderado por los niveles más
altos de gobierno, en todos los países acerca de las cuestiones que son
importantes para el futuro.
“Las nuevas mediciones alentarán a los países a invertir en
capital humano con un intenso sentido de urgencia. Eso ayudará a preparar a
todos para competir y prosperar en la economía del futuro, cualquiera que esta
sea”, dijo el presidente Kim. “Y a hacer que el sistema mundial funcione para
todos”.
El Proyecto de Capital Humano ayudará a los países a
aprovechar los recursos y aumentar la eficiencia del gasto, ajustar las
políticas con inversiones orientadas a resultados y abordar las deficiencias de
análisis y medición, entre otras esferas.
Los Gobiernos ya están mostrando interés en cambiar sus
resultados en materia de capital humano. Algunos de los primeros países que se
encuentran trabajando con el Grupo Banco Mundial en estrategias de capital
humano darán a conocer los puntos más destacados durante las Reuniones Anuales
en octubre.
Ningún país puede permitirse no invertir lo suficiente en su
capital humano. Si bien el contexto puede ser diferente, un énfasis en el
capital humano es clave para los países de todos los niveles de ingreso, puesto
que las competencias evolucionan rápidamente y la demanda por una mejor
educación y salud aumenta en todas partes.
El Proyecto de Capital Humano debería contribuir a avanzar
hacia un mundo en el cual todos los niños pueden ir a la escuela bien
alimentados y están preparados para aprender; pueden lograr aprender en la sala
de clases, y pueden ingresar al mercado de trabajo como adultos saludables,
cualificados y productivos.
ENLACES RELACIONADOS
- Voces:
¿Cuál será el futuro del trabajo?
- Foreign
Affairs: El déficit de capital humano (i)
- Devex:
PyR: El proyecto de capital humano del Banco Mundial tiene como objetivo
lograr mejores resultados (i)
- Informe sobre el
desarrollo mundial 2019: La naturaleza cambiante del trabajo (i) (borrador
de trabajo)
- Informe
sobre el desarrollo mundial 2018: APRENDER para hacer realidad la promesa
de la educación
- Debate:
Desarrollar el capital humano: Un proyecto para el mundo
- Debate:
Sentar las bases del capital humano: Una prioridad mundial
Tomado de envio del banco mundial
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