Bob Dylan, el
ausente, estuvo más presente que nunca en la entrega de los premios Nobel
No asistió a Estocolmo, pero mandó una carta de
agradecimiento; Patti Smith cantó una de sus
canciones en la gala y se olvidó
la letra
Smith se emocionó y provocó emoción. Foto: AFP / Soren
Anderson
Como se esperaba y se sabía, Bob Dylan no asistió ayer a la
entrega de los premios Nobel. Así y todo, el flamante Nobel de Literatura,
logró convertir su ausencia en una presencia contundente, hasta tal punto que
incluso el Nobel de la Paz Juan Manuel Santos hizo una paráfrasis de la canción
"Blowin' in the Wind". Pero eso no fue todo. El poeta mandó un
discurso de agradecimiento que, se suponía, leería la cantante Patti Smith,
aunque finalmente las palabras de Dylan quedaron confinadas a la privacidad del
banquete de la Academia Sueca, lo que no impidió que finalmente se dieran
conocer.
En el principio de su carta, dice Dylan: "Lamento no
poder estar allí personalmente, pero estoy en espíritu y honrado de recibir
este premio. Recibir el Nobel de Literatura es algo que jamás imaginé, como
pisar la luna. Desde muy joven leí a quienes lo habían recibido: Kipling, Shaw,
Thomas Mann, Pearl Buck, Albert Camus, Hemingway [?] Que mi nombre esté unido
ahora al de ellos es un hecho que elude toda descripción". Dylan explica
además hacia el final de su carta: "Nunca, ni una vez, tuve tiempo de
preguntarme: «¿Son literatura mis canciones?». Le agradezco
a la Academia Sueca que se tomara el tiempo de examinar esa pregunta y que
diera una respuesta tan maravillosa".
Patti Smith, por su lado, cantó en la gala de Estocolmo
antes los reyes de Suecia, Silvia y Carlos Gustavo, y la princesa heredera,
Victoria, con su esposo, el príncipe Daniel.La canción elegida fue "A Hard
Rain's a-Gonna Fall", que Dylan grabó en 1963, en un arreglo para guitarra
y orquesta. A pesar del acompañamiento orquestal, la versión fue muy íntima,
casi un recitativo. La escritura de Dylan es laberíntica, tan
laberíntica como las decisiones del poeta, y esa canción lo es especialmente,
con imágenes y metáforas que vulneran toda previsbilidad. Pero Smith perdió el
hilo en ese dédalo de impulso bíblico. Al llegar al verso "I saw a room
full of men with their hammers a-bleedin'" (Vi una habitación repleta de
hombres con martillos ensangrentados), se extravió y no pudo seguir cantando.
"Discúlpenme", dijo. "Estoy muy nerviosa". Esto no deja de
ser irónico en una canción en uno de cuyos últimos versos se dice: "But
I'll know my song well before I start singin'" (Pero conozco bien la
canción antes de empezar a cantar). Unos versos más adelante volvió a
confundirse, pero ya no se detuvo. Es muy probable que esta versión termine
convirtiéndose en referencial.
Desde que se conoció, en octubre, el Nobel de Literatura a
Dylan provocó ásperas discusiones sobre la pertinencia (o no) de reconocer a
quien no "escribe libros". Fue por eso que, en su discurso, el
crítico e historiador sueco Horace Engdahl ensayó en nombre de la Academia una
justificación. "En sí mismo, no debería causar tanta furia que un
cantautor merezca el Nobel de literatura. En un pasado lejano, toda la poesía
fue cantada o recitada como canto y los poetas eran rapsodas, bardos,
trovadores. Lyricsviene de lira. Pero lo que Bob Dylan ha hecho no
ha sido volver a los griegos o los provenzales. Se entregó en cuerpo y alma a
la música popular americana del siglo XX, la que sonaba en las estaciones de
radio y en los discos de gramófono para la gente común, blanca y negra:
canciones de protesta, country, blues, rock primitivo, gospel, música
comercial. Escuchaba día y noche, probando el material en sus instrumentos,
tratando de aprender".
Engdahl no pasó por alto algo que conoce cualquier que haya
estudiado a Dylan en profundidad. "Pronto el público dejó de compararlo
con Woody Guthrie y Hank Williams y empezó a ponerlo en relación con William
Blake, [Arthur] Rimbaud y [Walt] Whitman." Y, por si quedaban dudas:
"A las personas del mundo literario que se quejan, quiero recordarles que
los dioses no escriben sino que cantan y bailan".
Tomado de la nación de ar
No hay comentarios:
Publicar un comentario