sábado, 27 de octubre de 2018

VECINOS DENUNCIAN INTENTOS DE INVASIÓN DE SU ÚNICA ÁREA VERDE (en Toncontin - Honduras)


Comayagüela, denunciaron constantes amenazas e intentos de invasión y destrucción de los únicos predios de área verde con que cuentan los niños de la comunidad.
Representantes del patronato expusieron ante la sección de SOS Capitalino, toda la problemática, ligada a una serie de irregularidades en transferencias, supuestamente viciadas, porque son parte de zonas que no pueden otorgársele a ningún particular, ya que son áreas verdes registradas de esa manera, oficialmente por catastro.
Según un informe presentado por los habitantes afectados, ante una dependencia de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), entre los años 1990 y 1994, una parte de los terrenos en disputa fueron concedidos de forma ilegal a una familia desalojada de una invasión de El Carrizal.
Los predios, conocidos como áreas verdes uno y dos, nunca fueron habitados por los supuestos dueños, quienes hace algún tiempo incluso vendieron los lotes a otros particulares, los que desde hace unas semanas pretenderían iniciar construcciones de condominios y viviendas en los terrenos que
muchos de los pobladores sostienen son del Estado.
El argumento jurídico de los vecinos para defender dicho lote se basan en la Ley del Plan de Arbitrios de la municipalidad, que establece que los bienes inmuebles nacionales de uso público, como playas, áreas verdes y obras de dotación y servicios públicos, no pueden enajenarse o rematarse, por lo que en ningún caso podrían otorgarse títulos a favor de particulares sobre los bienes nacionales.
El instrumento jurídico agrega que, en caso contrario, cualquier acuerdo dispone de nulidad absoluta y responsabilidad civil para los involucrados.
En algunos predios en disputa, el patronato plantea crear varios espacios de recreación.
EXPEDIENTE “ENGAVETADO”
En ese contexto, los pobladores dieron a conocer que ya se abocaron a las dependencias correspondientes de la Alcaldía Municipal, desde hace algunos años, sin embargo, sobre el expediente aún no hay ninguna resolución, por lo que exigen un pronto dictamen, antes que el conflicto se torne peor.
La problemática se agudizó debido a que la semana pasada, una de las personas que afirma que parte de uno de los terrenos en disputa es de su propiedad, amenazó con ingresar con maquinaria pesada, para literalmente demoler una zona y comenzar una construcción. Sin embargo, los pobladores le impidieron su propósito.
Según vecinos, se encuentran a la expectativa que la Alcaldía Municipal se pronuncie al respecto; de lo contrario, solicitan intervención de la Fiscalía del Medio Ambiente, ya que son los encargados de la protección de los espacios verdes de Honduras.
De momento, como la colonia es un circuito cerrado, los pobladores de Altos de Toncontín, deniegan la entrada a cualquier tipo de maquinaria que intente ingresar para fines de reconstrucción o destrucción del área verde.
DATOS
El área verde de la colonia Altos de Toncontín es importante para los pobladores, pero también para el funcionamiento del mismo aeropuerto internacional de Toncontín, debido a que en el área uno, desde hace 15 años, se localizan unas torres con luces AGL, que sirven de referencia en la aproximación de los aviones que aterrizan en la pista bastante cercana a la colonia.
PREDIOS MIDEN CUATRO MANZANAS
En el mapa de catastro de la Alcaldía Municipal se observa que la zona en disputa es un área verde.
Según las estimaciones de los pobladores de la colonia Altos de Toncontín, el área verde, catalogada de esa manera por el mapa de catastro de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), cuenta con unas cuatro manzanas de extensión y es el único espacio destinado para fines recreativos en la comunidad.
Estos predios colindan con la residencial El Sauce y con unos terrenos del Instituto Nacional de Jubilaciones y Pensiones de los Empleados y Funcionarios del Poder Ejecutivo (Injupemp).
La colonia Altos de Toncontín es una zona capitalina que cuenta con 115 casas y con un estimado de cerca de 400 habitantes. Las zonas en disputa son los únicos espacios verdes con los que cuentan los habitantes, quienes pretenden mejorar esa área para fines recreativos en armonía con el medio ambiente.  // TOMADO DE LA TRIBUNA DE HONDURAS

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