429 AÑOS DE MODIFICACIONES ARQUITECTONICAS Y TRAZADO URBANO
La ciudad cambió varias veces de fisonomía y se perdieron
los vestigios de la época fundacional
ANTAÑO. Esquina de Fray José de la Quintana y Santa Fe. De
fondo se ven las iglesias La Merced y San Francisco. (Foto: “Pucho” Encinas)
Se pueden identificar varias etapas que van desde los
primeros ranchos precarios y las casas en galerías hasta las construcciones de
“palacios” tipo europeos. Se mantienen algunos edificios del siglo XVIII y la
traza de las primeras calles no sufrió grandes cambios. La imagen urbana actual
se definió recién hacia 1890.
POR DIEGO SABAO
El trazado y la fisonomía de Corrientes dejan entrever una
ciudad con más de cuatro siglos de vida, con construcciones y calles históricas
que la enmarcan en un estilo único en el país. Más allá de modernos edificios y
nuevos barrios que se sumaron a lo largo del tiempo, la estirpe capitalina se
trasluce a partir de viviendas y actuales oficinas públicas imponentes que se
encuentran en el casco céntrico.
Lo cierto es que, más allá de la proliferación de casas y
edificios antiguos, por distintos motivos ya casi no quedan vestigios de las
etapas anteriores de la ciudad. La moda, la aparición de nuevas tecnologías y
las corrientes arquitectónicas consideradas de buen gusto fueron ganando
terreno aquí al igual que en otras latitudes, borrando casi completamente los
rastros de la ciudad primitiva.
Pueden mencionarse varias etapas con distintas realidades
que fueron dando forma a la ciudad actual. Sobre esta cuestión, el presidente
del Instituto de Cultura, Gabriel Romero contó a El Litoral que “se podría
hablar de tres o cuatro ciclos distintos, esta es una ciudad construida sobre
otra ciudad, que a su vez se levantó sobre otra aún más antigua”. Es decir, lo
que marca la fisonomía capitalina actual es la sucesión de distintos estilos y
tipos de pensamiento en cuanto a qué urbe se planificaba en cada época.
Fundación
La primera etapa es la posterior a la fundación, con casas
de adobe, muy precarias. Graficando esta situación, el director del Archivo
General de la Provincia, Enrique Deniri comentó que “Corrientes era como un
campamento formado por ranchos, muy pobre”, y agregó: “No era nada vistoso
porque las paredes eran de color gris”.
La importante cantidad de comercios en la zona fue una
impronta que se mantiene, habiendo sido fundada como un puerto intermedio para
quienes viajaban de Buenos Aires a Asunción. “La compararía con una estación de
servicio donde la gente para a descansar, tomar algo, ir al baño y seguir
viaje”, graficó Deniri.
Esta realidad se mantuvo por al menos dos siglos y recién a
finales del siglo XVIII se da el primer crecimiento. Para el 1800 recién la
ciudad se extiende un poco alrededor del cabildo pero de manera muy lenta, en
un radio aproximado de unas 10 manzanas.
La segunda etapa está marcada por el estilo colonial, con
las casas en galería al exterior que permanecieron por bastante tiempo. Los
especialistas aseguran que este formato de vivienda se adaptaba casi a la
perfección a la realidad y a las necesidades de una ciudad calurosa como es
Corrientes. La galería servía de refugio a las precarias construcciones y
también para proteger del sol y la lluvia a los transeúntes. Además, Deniri
aseguró en este sentido que “este tipo de estructuras promovió la comunicación
entre vecinos y no me sorprendería que haya incentivado también la costumbre de
sentarse en la vereda al anochecer buscando algo de fresco”.
También a finales del siglo XVIII surgen las casas tipo
palacetes, algunas de las cuales perduran hasta la actualidad, siendo los
vestigios más antiguos que siguen en pie.
Gabriel Romero explicó sobre esto que “aparecen los primeros técnicos y
la academia que dicta los parámetros del buen gusto”. Además, comentó que “a
través de las construcciones se buscaba tener un mayor prestigio al que tenían
las casas en galería”.
Cambios
Las casas en galerías, a pesar de ser funcionales al clima y
a la realidad de la ciudad de aquellos años, comenzaron a tener una imagen
negativa respecto a lo que se consideraba el buen gusto. Sobre esto, Romero
aseguró que “la moda generó una tendencia de eliminar la imagen pueblerina que
daba este tipo de viviendas”.
Como una medida drástica, un intendente de la ciudad mandó a
demoler todas las construcciones de este tipo hacia 1890. A partir de allí,
Corrientes vuelve a modificar su fisonomía y abandona completamente este tipo
de construcciones. Se estima que en la actualidad queda una sola en la capital,
en la esquina de las calles Junín y Pago Largo.
Esta transformación marcó un cambio de paradigma,
abandonando parcialmente la funcionalidad y eligiendo las opciones por la
cuestión estética. “Hoy serían muy útiles las casas con galerías y además
representarían una atracción turística increíble”, opinó Gabriel Romero. Por su parte, Enrique Deniri dijo en este
sentido: “Ganó terreno una arquitectura para ‘mirarla’ y no para ‘vivirla’”, y
añadió: “Por eso hoy tenemos techos a dos aguas para que corra la nieve, o
tejas y revestimiento negro que concentra mucho el calor”.
En esta misma época, a finales del siglo XIX, se construyen
en la ciudad algunos de los edificios más emblemáticos que se mantienen hasta
ahora. Allí se levanta la Casa de Gobierno y la Jefatura de Policía, entre
otros. Además, aparecen las ochavas en las esquinas que le dan también otro
aspecto a la ciudad y brindan mayor visibilidad en el marco de la aparición del
automóvil.
Esta fue la última gran trasformación de la ciudad y la que
empieza a definir la impronta que tiene actualmente, aunque hubo otros cambios
en este último siglo.
Entre las modificaciones que se generaron desde 1890 hasta
la actualidad sobresalen las primeras calles céntricas asfaltadas en las
décadas del 40 y el 50 y los edificios de altura que comienzan a aparecer cerca
de 1950, se expanden en los 70 y tienen una importante boom en los 90.
La urbe actual es, entonces, el resultado de distintas
etapas que fueron quedando atrás por la moda o lo que se consideraba de buen
gusto, imitando estilos europeos. En tanto, puede decirse que el vestigio más
antiguo es la traza de las primeras calles, que sufrieron sólo algunos
reordenamientos en diferentes etapas. TOMADO DE EL LITORAL DE CTES AR
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