PROBLEMÁTICA QUE SE
PROFUNDIZA CON LA PROLIFERACIÓN DE ASENTAMIENTOS
Agua potable y cloaca: semblante estadístico de la carencia
de servicios en zonas específicas
SECTORES. La división de la ciudad en seis zonas no responde
a un criterio estadístico específico en materia de habitantes o realidades
económicas. Es, solamente, la interpretación de los datos presentados en este
trabajo que dejan ver realidades similares entre los barrios que componen cada
sector. El Litoral tomó en cuenta 105 barrios y las cifras que corresponden a
cada uno de ellos para calcular los promedios generales.
Los contrastes se hacen más visibles en las conexiones
cloacales. Mientras que entre las cuatro avenidas la cobertura es de 98,31%, en
los barrios de la Ruta 5 llega sólo al 12,16% de promedio y algunos tienen
menos del 1%. Aunque las redes de agua tienen un alto porcentaje en todos los
sectores capitalinos, unas 2.409 personas no cuentan con este suministro y
deben utilizar un pozo, cisterna o servirse de arroyos o la lluvia.
POR DIEGO SABAO
La carencia de servicios es una de las problemáticas más
preocupantes a nivel global y en Corrientes la situación se replica y se
profundiza a partir del contraste de realidades según cada barrio y zona de la
ciudad. El agua potable, la cloaca y la energía eléctrica son sólo algunas de
las necesidades básicas que en ocasiones quedan sin satisfacer. Lo cierto es
que estas privaciones pasan a ser claves
para el desarrollo de las familias que, muchas veces, pueden ver afectada su
salud y salubridad.
Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) destacan que
la disponibilidad del agua potable y los desagües cloacales formales, son uno
de los requisitos indispensables para evitar riesgos y garantizar un nivel
mínimo de calidad de vida. En tanto, la ONU reconoció en 2010 de manera
explícita que el acceso al agua potable y el saneamiento constituyen un derecho
humano fundamental.
En este marco, el nivel de cobertura de agua potable en la
ciudad es alto, aunque también es considerable la cantidad de familias que no
tienen suministro formal a través de la red pública. Según los datos oficiales
del censo de 2010 a los que tuvo acceso El Litoral y a través de los cuales
calculó los promedios barrio por barrio, el 99,28% de las viviendas de la
Capital tienen una conexión formal de
agua potable.
Aunque el 0,72% restante puede parecer un número menor,
representa a unas 2.409 personas que no tienen acceso a este servicio. Son, en
términos de promedio, al menos unas 500 casas que obtienen el agua a través de
extracciones con bombas de motor o manuales, pozos, cisterna o sirviéndose sólo
del agua de lluvia o arroyos cercanos.
La zona más céntrica de la ciudad comprendida en lo que
generalmente se denomina como “cuatro avenidas”, cuenta con una cobertura de
agua potable del 99,83%, es decir, la llegada es casi total aunque se dan
algunas excepciones que no dejan de ser preocupantes.
Esta situación es el correlato de la urbanización general de
la ciudad que tuvo mayor desarrollo en la zona céntrica (barrio Deportes, La
Cruz, Cambá Cuá, La Rosada, Yapeyú, Belgrano, Libertad, Ferré e inclusive el
Aldana). Con 42.768 habitantes, este sector es el que menos carencias tiene en
cuanto a servicios básicos, aunque tampoco la cobertura llega a ser total.
En la zona comprendida desde el Bañado Norte hasta el Molina
Punta, incluyendo los barrios que se encuentran al costado norte del corredor
Belgrano como el San José o Villa García, la llegada del agua potable es de un
99,74%. Con 74.483 habitantes, se marca allí un descenso en relación al área
céntrica.
En tanto, el porcentaje baja aún más en los barrios ubicados
a la vera de la Ruta 5 que son asentamientos de más de 40 años. Allí, el agua
potable llega al 97,67% de los 16.578 habitantes. En este sector de la ciudad
se dan realidades diversas ya que la mayoría no posee el título de propiedad
por ser tierras tomadas, mientras que otros compraron el lote a empresas
privadas pero sin la provisión de servicios básicos. La irregularidad de los
terrenos, el mal estado de las calles y la presencia de viviendas precarias
forman parte también de la realidad de estas barriadas y que atentan contra la
posibilidad de una buena calidad de vida.
La zona Sur que está compuesta por el primer cordón de
barrios cruzando la avenida 3 de Abril como el San Martín, San Benito, Mil
Viviendas, llegando hasta el Doctor Montaña y Esperanza y hasta el límite de
Chacabuco, cuenta con una cobertura del 99,65%. Cabe destacar que esta es la
porción de la ciudad, según la subdivisión hecha en seis zonas, que más
habitantes tiene, llegando a 104.468.
Por su parte, en el área urbana donde se encuentran el 17 de
Agosto y Laguna Seca (barrio 9 de Julio), dos de los complejos habitacionales
más populosos de la ciudad, viven unas 83.082 personas, de las cuales el 99,73%
tiene su vivienda con conexión formal a la red pública de agua.
En el cordón suroeste, en tanto, donde se ubican los barrios
Arazaty, Virgen de los Dolores, Patono, 3 de Abril, Río Paraná y Galván la
cobertura llega a 99,31%.
Los barrios periféricos presentan también distintas
realidades. El Santa Teresita, Güemes, San Marcelo y varios de la zona de las
Mil Viviendas como Ciudad de Arequipa, Cristobal Colón y Doctor Nicolini
cuentan con el 100% de cobertura de agua.
Aunque suele referirse al agua potable como el servicio más
importante, lo cierto es que la falta de redes cloacales genera un serio riesgo
para la salud que de hecho están tipificados por la OMS. En este rubro, la
ciudad de Corrientes tiene un 65,89% de cobertura; lo que significa que unas
114.097 personas tienen carencia en este sentido; son al menos unas 25.000
viviendas.
Mientras que el 98,31% del sector céntrico cuenta con
desagües cloacales, en los barrios del Este capitalino, a la vera de la Ruta 5
sólo el 12,16%. Aquí se da una situación llamativa ya que el Ponce tiene casi
un 60% mientras que otros se encuentran muy por debajo de este nivel: Cremonte
15,20%, San Ignacio 16,53%, Flier 5,44%, Lomas 1,49%, Santa Rita 1,24% sólo por
mencionar algunos.
El contraste es importante si se compara, por ejemplo, la
cobertura de cloaca del barrio La Rosada (99,44%) con la del Parque Cadenas
(0,64%). En promedio, existe una amplia diversidad de barrios que, en
diferentes sectores, tienen cubiertas las necesidades básicas en materia de
servicios en distintos niveles.
En este amplio sector de la ciudad que comprende desde la
rotonda de la Virgen de Itatí hasta Laguna Brava, la mayoría de los hogares
tienen el desagote del baño que descarga en un pozo ciego, excavación en la
tierra y hasta algunos casos de familias que no cuentan con sanitario ni
letrina en su domicilio.
La zona Sur tiene un 84,63% de conexiones formales de cloaca
mientras que el sector donde se encuentran barrios como el Pirayuí, Güemes o 17
de Agosto tiene un nivel de cobertura similar a la media de la ciudad; del
66,49%. En tanto, 67,85% es el promedio de los barrios costeros del Sur.
Las barriadas del Norte y Noreste, con el 65,95% tienen
también cifras similares a la situación general aunque con algunos detalles que
resultan curiosos. Por ejemplo, sólo el 34,52% de las casas del barrio San José tienen redes cloacales.
Resulta llamativo ya que se trata de un sector de la ciudad donde prevalece la
presencia de viviendas construidas por el Estado, aunque también hay
asentamientos irregulares allí a la vera Norte de la avenida Independencia.
Hay algunos barrios que, a pesar de estar muy cerca unos de
otros, cuentan con niveles de insatisfacción de servicios bastantes distintos.
Como ejemplo puede mencionarse el Alta Gracia donde el 95,02% de las casas
tienen redes cloacales mientras que en el San Antonio la cobertura es sólo del
34,48%.
Realidades
Más allá de lo que puede advertirse recorriendo las
distintas zonas de la ciudad y de las carencias y necesidades particulares de
cada una, los datos estadísticos sirven en este caso para semblantear una
realidad de desigualdad en materia de servicios básicos entre los barrios más
céntricos y otros sectores periféricos.
Más allá de esto, hay zonas alejadas que cuentan con altos
niveles de satisfacción de necesidades básicas en materia de servicios, aunque
no se da de manera constante y sostenida en otros sectores cercanos. El área
comprendida por las cuatro avenidas sigue siendo el que menos carencias
presenta al menos en estas dos cuestiones: agua potable y redes cloacales.
La zona Este, con los barrios que se encuentran a la vera de
la Ruta 5 vuelven a ser los más complicados, como en varios otros rubros que
representan la irregularidad en la que se encuentran muchos terrenos de la
zona.
Por su parte, en el sector Sureste sobresalen las
dificultades del complejo “La Olla”. Allí existe un bajo porcentaje de
cobertura de redes cloacales además de otras dificultades estructurales, que se
presentan a pesar de las obras que se ejecutaron y se planifican en esa zona.
La cifra
334.497
Son los habitantes de la ciudad que forman parte de la
muestra. Los datos pertenecen al censo de 2010 y no incluye a localidades como
Riachuelo y Santa Ana que pertenecen a Capital.
El dato
La ONU declaró en 2010 que el acceso al agua potable y al
saneamiento, constituyen un derecho humano. Por su parte, la OMS lo considera
de extrema importancia para garantizar la salubridad. TOMADO DE EL LITORAL DE
CTES AR
NOTA: desde 1983 hay política de centralizar en la capital,
en base al empleo público, la actividad Económica provincial y salvo Virasoro y
Mocoreta, con desarrollo autónomo, lo demás sigue siendo profundamente feudal porque
no hay políticas de desarrollo
No hay comentarios:
Publicar un comentario